Morkie: Tu nueva mascota
El Morkie es un perro de raza pequeña, audaz, leal, protector y un poco obstinado, es el producto del cruce entre un Yorkshire Terrier y un Bichón Maltés.
Su cuerpo es muy compacto y bien definido, su aspecto varia mucho, no tienen un patrón definido en cuanto a la apariencia, algunos pueden mostrar mas rasgos del Yorkshire Terrier mientras que otros pueden hacerlo del Bichón Maltés.
No siempre en los cruces de raza se obtienen las mejores caracteristicas, aunque se hace todo lo posible para que esto no suceda siempre existe la probabilidad de que no sea así, debido a esto las asociaciones de criadores suelen no reconocer los perros que provienen de estos procesos.
El pelaje de estos hermosos perros en generalmente de color negro, beige, blanco y marrón y la combinación de todos ellos no siempre dará el mismo patrón de color, ya que si naciera una nueva camada con los mismos padres que la anterior, por ser un cruce, los nuevos cachorros no tendrían las mismas características o similitudes con sus hermanos mayores.
Actualmente hay muchas personas trabajando para que se reconozca al Morkie como una raza pura más, tienen la esperanza de cruzar y criar sus propios perros y hacer que las asociaciones como por ejemplo, la American Kennel Club y el Canadian Kennel Club, la reconozca.
Se estima que esto tardará mucho tiempo y que la cria del cruce de dos Morkies dará como resultado una raza más pura y de temperamento mas confiable.
Sin embargo, otras asociaciones si reconocen al Morkie, tal es el caso del Registro Internacional de Caninos Diseñados y el Registro de Perros Diseñados. También se conocen como Maltiyork, Yorktese, Yortese o Yorkiemalt.
Estos perros no sueltan pelo, necesitan de cuidados semanales para evitar los nudos, tienen un pelaje suave y abundante.
Es muy importante mantener limpia el área de sus ojos. Su promedio de vida es de 10 a 13 años, pero si se ejercitan y se les brinda el cuidado necesario pueden llegar a vivir hasta los 14 o 16 años de edad. Son perros muy pequeños, miden entre 15 y 20cm de alto, pero son de muy buen apetito.
En general, los Morkies son perros cariñosos, afectuosos y amorosos. Se llevarían bien con otros perros y mascotas en la casa si se socializan desde los primeros días al llegar a casa.
Son muy juguetones y sumamente activos, su temperamento es un poco desconfiado, pero se adaptan facilmente a la vida familiar. Se debe tener mucho cuidado al jugar con ellos o asearlos ya que son muy delicados y se pueden lastimar facilmente porque son muy pequeños. Es importante que si estan solos tengan algun juguete para distraerse ya que el aburrimiento puede llegar a tornarlos muy destructivos, mordiendo todo lo que tengan a su alcance. Son criados expresamente para ser perros falderos.
Además de ser un poco desconfiado, la raza de perro Morkie es también dulce y gentil, buscan tener siempre la atención de sus dueños, no reaccionan nada bien si son ignorados, incluso pueden llegar a ser tempramentales y bastante ruidosos, no escatiman en ladrar hasta que se les presta la atención que demandan.
Aunque son muy pequeños son muy buenos perros de guardia ya que están siempre alertas y al sentir el más minimo ruido o ver algo extraño enseguida dan una señal de alerta ladrando. Tienen la actitud valiente de su ascendiente el Maltés.
Son desconfiados con los extraños pero si ven que su dueño tiene contacto y buena relación con estos entonces facilmente lograr romper la barrera de la distancia y acercarse al extrañopara ser dosiles y cariñosos como suelen serlo.
Para obtener planear un cachorro Morkie es importante conocer sus rasgos mas importantes, cuales son sus singularidades y los cuidados que se deben tener con estos. Es bueno estar preparado ante esta responsabilidad ya que es una raza muy pequeña y de mucho cuidado.
Se debe tener mucho cuidado con el origen del Morkie, al momento de planificar tener uno es importante saber quién es la persona que lo cria, cuál es el origen del perro, cuál es la salud de sus padres, cuales son las condicions de cria, si tiene todas sus vacunas en regla y cualquier dato que considere importante en pro de mantener la buena salud del animal y además de garantizar que está llevando una raza que no es producto de una persona inescrupulosa que solo está buscando lucrarse de esta actividad.
Al ser un perro pequeño, los Morkies son muy populares entre las celebridades, por ejemplo, Steven Tyler, ex vocalista de la banda Aerosmith disfruta de la compañía de sus dos perritos, Butch Cassidy y el Sundance Kid, él incluso ha declarado que ellos lo mantienen alejado de las drogas.
Además, también está el caso de la compositora y cantante Jann Arden, quien en el año 2012 viajaba en tren con su perrita Midi cuando el conductor se percató de la situación y le pidió que la encerrara el resto del viaje en su jaula o sino debia bajar del tren, a lo cual la cantante decidió bajar del tren en la siguiente estación; fue tal el revuelo por la situación que el alcalde de Oshawa luego las invitó a una visita oficial en su despacho.
Otros famosos que también disfrutan o han disfrutado de la compañía de un Morkie son la cantante Miley Cirus, el cantante Justin Timberlake y el actor de Modern Family Jesse Tyler Ferguson.
Historia y Origen del Morkie
El morkie (o como lo llaman algunos: «yorkie») es un perro que no posee reconocimiento oficial por parte de las asociaciones cinológicas a nivel mundial. Estas instituciones tienen como fin el determinar cuáles son los aspectos que deben repetirse continuamente en cada una de las razas con el fin de preservar la esencia de la misma.
El morkie al no pertenecer a los listados de estas instituciones no tiene un estándar oficial, lo que pudiese afectar un poco sus descripciones ya que los criadores de esta nueva raza pueden entrar en polémicas fácilmente debido a inconformidades en cuanto a las características del pelaje, manchas, tamaño o parecido a uno de las dos razas de las cuales viene.
El principal problema que no permite que las razas hibridas puedan “despegar” en cuanto a popularidad y número es que no son razas que tengan un patrón genético marcado, es decir, no puede saberse a ciencia cierta si juntando un yorkshire terrier y un bichón maltés el resultado será un cachorro con características exactas a las cuales viste en una revista, foto o internet.
Esto sucede debido a que son cruces nuevos. Los primeros ejemplares comenzaron a criarse hace apenas una década por parte de criadores independientes o familias que realmente les encantaban estos pequeños perros.
Desde ese momento si tenían un tamaño u otro, poseían el tipo de pelaje del yorkshire o maltés, tenían un temperamento desconfiado con los extraños como el maltés o tenían un tamaño era cuestión de suerte (o mala suerte si el resultado era el que no se esperaba).
Normalmente tendrían que pasar unas cuantas décadas y procesos exhaustivos de crianza únicamente de ejemplares que cuenten con determinadas características físicas y de comportamiento para que esta raza al fin pueda ser reconocida por las asociaciones internacionales cinológicas, el problema es que los clubes acuerden los estándares específicos para llevar a cabo esta acción en conjunto.
Los estándares que todos los criadores de morkie tienen en cuenta actualmente son:
- Que midan menos de 30 cm de altura a los hombros.
- Que pesen entre 2.5 y 5 kg.
- Que tenga un pelaje abundante y vistoso.
Como verás no es un estándar exigente debido a las dificultades que representa el establecer uno extraoficialmente.
El morkie ha venido popularizándose a pesar de este problema debido a que es un perro muy hermoso, posee características físicas y de comportamiento de sus padres, el maltés y el yorkshire, por lo que es un perro acostumbrado a vivir en familia y obedecer a su dueño mientras le es fiel fervientemente.
Sin embargo, muchas familias se preguntan si el optar por un perro hibrido o de “diseño” es una buena idea debido a los inconvenientes antes mencionados, lo cual hace que decanten por una opción más tradicional como el escoger a uno de los progenitores del morkie como mascota o a otro perro que sea muy buena mascota como el poodle.
Sin duda el morkie es una nueva raza que promete mucho y que comparte mucha similitud con la tambien nueva raza maltipoo. Mientras más sean las personas que adquieran un perro de esta raza y decidan criarla en sus hogares bajo un estándar en específico, más probabilidades habrá de que sea aceptada bajo un estándar y su comportamiento de perrito fiel a su amo y dulzura lleguen a muchas más personas.
Características de la raza
Quizás a las asociaciones cinológicas (las cuales tienen la tarea de regular los detalles de aspecto y conducta de cada tipo de raza) no les guste la idea de la existencia de razas hibridas (descendientes directos de dos razas de perro abaladas por ellos) pero lo cierto es que cada vez más personas adoptan hermosos perritos que son el resultado de estas uniones no oficiales, tal es el caso del morkie.
Este perro hibrido es la combinación de dos razas oficiales, las cuales son el yorkshire terrier y el bichón maltés. Los criadores de esta nueva raza sostienen que se encuentran haciendo un gran esfuerzo por suprimir las características negativas de ambas razas progenitoras para dar como resultado una raza con todas las bondades del yorkshire y el maltés.
Esta nueva combinación da como resultado un perro muy vivo, con una bonita y extrovertida expresión y mucha, pero mucha energía. Pero sin duda, si hablamos del morkie como mascota, resalta mucho su lealtad a su familia.
Apariencia del morkie
Con el morkie sucede lo que en la mayoría de las razas hibridas pasa, es una raza cuyo aspecto definitivo no se encuentra fijado debido a que existen múltiples casas de crianza de la raza y cada una de ella define el estándar que le parece correcto para un perro de esta nueva raza. Sin embargo, y afortunadamente, se ciñen a un aspecto más o menos parecido al que debería tener el morkie, el cual definiremos a continuación.
Casi siempre los morkie se parecen más a su parte yorkshire terrier que a su parte maltés, por lo que puede decirse que su apariencia encaja más con la de estos, independientemente si se trata del padre o madre.
El peso del morkie en promedio es de unos 3 o 4.5 kilogramos, su altura a los hombros puede llegar a ser de entre 25 a 30 centímetros, aunque las hembras son un poco menos altas.
El pelaje del morkie
Lo primero a notar es que el color del pelaje depende enteramente del color predominante del mismo en sus padres, por lo general el más común en los morkies es el blanco o marrón. También son algo comunes los morkies que nacen negros o marrones oscuros y con el pasar de los meses el color de su pelaje va cambiando a plata o gris.
El pelaje sin importar el color es bastante suave ya que sus padres tienen esta característica en el suyo. Lo mejor de él es que no suele caerse con facilidad, por lo que el morkie se trata de un perro hipoalérgenico, que no le dará alergias a su propietario.
El pelo es largo, liso y se deja caer por su cuerpo, vistiéndolo con un fino traje de pelaje. Si el pelo se deja crecer a sus anchas fácilmente puede llegar a hacerlo tropezarse ya que podría llegar a sus pies. Por ello, este debe ser cortado a medida que se vaya acercando a sus pies.
El pelaje es muy delicado y fino, por ello puede llegar a enredarse de una manera que resulte bastante difícil de desenredar, por lo que es necesario el cepillado diario/interdiario para evitar esto y que además puedan albergarse insectos en él.
Aspectos generales del morkie
El morkie es un perro pequeño y adorable, sus dueños tienen la costumbre de tratarlo como si fuera un oso de peluche o hijo pequeño. Las personas aficionadas a las razas hibridas tienen al morkie como una opción popular para probar que tal es la crianza y vida cotidiana junto a un perro que tiene las mejores características de dos razas populares.
El morkie es un perro que fue pensado para que tuviese un comportamiendo amigable, leal y sea una mascota obediente e inocente. Estas características hicieron que su fama subiera mucho desde hace unos años hasta ahora.
Criar a un morkie es fácil, tan solo deberás dedicarle tiempo a diario para atender sus solicitudes de cariño y proporcionarle pequeños paseos o jugar con él a lo largo del día para que así pasen tiempo de calidad.
El ama los juguetes y jugar a buscar la pelota por lo que debes asegurarte de que su entorno disponga de estos elementos para su entretenimiento. Es una buena mascota para niños mayores a 7 años, que ya sepan cómo se debe tratar a una mascota, les encanta jugar con ellos ya que tiene mucha energía, especialmente los juegos en los que tiene que perseguirlos y alcanzarlos.
¿Cuánto vive la raza morkie?
Si eres de las personas que siempre está preocupada por la expectativa de vida de su mejor amigo de cuatro patas no debes preocuparte mucho por los años de vida del morkie ya que es una raza longeva, como la mayoría de los perros de pequeño tamaño.
Los perros de pequeño tamaño suelen tener una mejor actividad física que los perros grandes, por ello, aunque sea un poco contradictorio, sus huesos y órganos se conservan mejor, dándole la capacidad de vivir más años que los perros grandes.
Por supuesto, el morkie es un perro que puede vivir entre 12 y 15 años con facilidad, pero depende de ti que cumpla esta expectativa. Se han visto casos de perros pequeños que con una expectativa de vida bastante longeva de hasta 16 años, como es el caso del chihuahua, pero que lamentablemente mueren a los 10, producto de alguna complicación.
Para evitar que tu amigo muera antes de cumplir su ciclo de vida completo deberás tener en cuenta varias recomendaciones:
- Permitir que se alimente de la leche de su madre cuando es un cachorro recién nacido.
- Llevarlo al veterinario luego de adoptarlo si el criador no lo hizo o le faltan vacunas iniciales.
- Alimentarlo cuatro veces al día con croquetas de alta calidad hasta los seis meses de edad, luego, alimentarlo dos veces al día con croquetas para adultos.
- Compartir con él durante tu día a día, aunque sea un poco.
- Prestarle atención a sus necesidades de ejercicio y atención.
- Cambiarle el agua a diario o máximo cada dos días.
Estos consejos para alargar los días de vida de tu morkie serán efectivos si los sigues al pie de la letra conforme vayan pasando los años con tu buen amigo a tu lado. Básicamente son los mismos cuidados que le darías a un niño pequeño, llevarlo al médico para que lo vacunen, prestarle atención, alimentarlo y darle mucho amor.
El morkie sabrá agradecértelo mostrándote su aprecio casi todo el tiempo.
Lo que debes tener en cuenta a la hora de adoptar un morkie
Antes de adoptar un cachorrito de morkie debes tener en cuenta diferentes puntos los cuales te presentamos a continuación:
¿Adoptar o comprar un morkie?
Uno de los puntos con más relevancia al momento de adquirir un perrito de esta raza es si comprarlo o adoptarlo. Los perros que son adoptados gozarán de una felicidad sin igual, ya que antes no tenían casa ni nadie que los quisiera, pero ahora te tienen a ti, un dueño con un corazón tan grande como para adoptar a un morkie que no sea completamente puro.
Los ejemplares que puedes adoptar no siempre corresponderán al estándar exacto de la raza morkie, pero sí que te darán momentos de felicidad al mismo tiempo que van creciendo a tu lado.
Por su parte, comprar un morkie no tiene nada de malo si los criadores tratan bien a los padres morkie. Existen criadores que mantienen bajo condiciones inhumanas a sus perros, con el único objetivo de que puedan reproducirse y ellos obtener ganancias, asegúrate de que no estés comprando un morkie de estas personas.
El morkie es un perro pequeño que vivirá dentro del hogar
El morkie es un perro bastante pequeño que debido a las particularidades de su raza no puede vivir en espacios abiertos. Por ello debes adaptar tu hogar para la presencia de un nuevo amigo peludo. Colócale un cómodo colchón para perros, sus tazas de agua y comida y juguetes en un entorno ambientado perfectamente para él.
¿Es conveniente adoptar o comprar un morkie mientras la pareja está embarazada?
El morkie requiere de ciertos cuidados que deben llevarse a cabo constantemente todas las semanas, eso sin contar los cuidados naturales que todo dueño de perro debe realizar a diario como darles comida, llenar su plato de agua y sacarlos a pasear. Es por ello que no es aconsejable adoptar a un nuevo miembro de la familia cuando el embarazo está muy avanzado y la mujer requiera los cuidados de su esposo para asuntos concernientes al embarazo.
Si el embarazo está en su etapa inicial entonces no habrá problemas al momento de adoptar un nuevo miembro de la familia ya que este se acostumbrará fácilmente al entorno y tú también podrás acostumbrarte a la presencia y necesidades de tu can.
Como consejo final, debes tener en cuenta las necesidades de ejercicio y atención del morkie, el cual es un perro que te exigirá mucha atención y un espacio en tu día que puedas dedicarle.
Dieta y alimentación del Morkie
La alimentación del morkie está sujeta a varios elementos tales como la cantidad de los alimentos, calidad de ingredientes y contenido nutricional. Esta raza al ser de pequeño tamaño necesita una dieta que le ayude a desarrollarse más rápidamente y le suministre la energía necesaria para su rápido metabolismo.
El morkie es un perro bastante pequeño y adorable por lo que muchos dueños a la hora de la comida le ofrecerán un poco de la suya o le servirán comida para humano, la cual puede contener alimentos tóxicos o dañinos para él. Hay que tener en cuenta que hay un límite para consentirlo puesto a que en un futuro se negará a recibir comida especialmente formulada para él, además de que la comida para humano no es la más saludable para su organismo.
No debe de ninguna manera volverse costumbre, esto fomentaría los problemas gástricos de la mascota y el desbalance de su alimentación. Pueden sufrir de falta de los nutrientes que necesitan ya que su dieta debe estar compuesta principalmente por proteínas y algunos carbohidratos. El morkie puede llegar a ser muy caprichoso si se le concede un gusto demasiadas veces por lo que hay que tener firmeza y decisión. Comidas como los dulces y algunos enlatados no son para nada favorables.
Si el perro ya está acostumbrado a comer estos alimentos será muy selectivo con las comidas para perro, este sentirá más preferencia por lo que ingiere más a menudo. Esto causa que a menudo sus dueños opten por comida húmeda, aunque esta tiene mucha más cantidad de calorías que las croquetas normales y promueven la salida de depósito amarillo en los dientes lo que causa mal aliento y caries a largo plazo, por lo que no es una opción completamente saludable.
Para darles comida húmeda se debe alternar junto con las croquetas secas, de esta forma se eliminara el sarro en su mayor parte por la acción de las croquetas, existen variedades formuladas en contra de la placa amarillenta por lo que es una muy buena opción ya que también ayudaría a mantener un buen peso corporal.
Las croquetas deben tener un tamaño apropiado para el morkie, será muy difícil para el masticar y tragar pedazos grandes de alimento, su digestión también puede verse afectada si no logra digerir los grandes pedazos. Un veterinario puede saber cuál tipo de alimento es mejor para él.
Se puede optar por comida de buena calidad, el perro al ser pequeño no necesitara que sea mucha cantidad, así los gastos serán equilibrados entre calidad y cantidad.
Con una buena alimentación estará protegido contra enfermedades que ataquen inesperadamente ya que el sistema inmune del perro estará fortalecido y listo para cualquier contratiempo.
Siempre hay que guardar los alimentos en un lugar donde no haya productos químicos cerca. La alimentación del morkie debe ser en proporción a su peso y cantidad de actividad física para que así los distribuya acorde a su necesidad corporal.
Si se le proporciona demasiada comida sin tener la el ejercicio diario necesario para quemar las calorías engordara hasta desarrollar obesidad, hay que prestar atención a la hora de la comida para que no ocurran estos inconvenientes.
En otro caso, si el perro tiene demasiada actividad física y no se le suple con los nutrientes necesarios tendrá carencias alimenticias que en casos graves desencadena en muy bajo peso.
El morkie al ser un perro pequeño tiende a comer con mucha rapidez, esto hace que le lleve más tiempo asimilar la cantidad de comida que comió. Su metabolismo también trabaja de manera acelerada por lo que le es más difícil mantener una temperatura corporal estable.
Un morkie adulto necesita en promedio una ración diaria de 60 a 70 gramos de alimento de excelente calidad repartidos en dos porciones. Las partes deben ser equitativas y con igual intervalo de tiempo. Lo mejor es crear una rutina estable, teniendo una ración en la mañana mientras que la otra en la noche. Hay que tener en cuenta que los gramos diarios pueden variar según la actividad física del perro, lo mejor es consultar con un veterinario.
Como alimentar un Morkie Cachorro
Los cachorros de dos meses o menos deberán comer croquetas humedecidas con agua, esto se hace para que no tengan que masticar ya que sus dientes todavía no están desarrollados para esto. 5 dosis diarias distribuidas en pequeñas cantidades es lo mejor para que asimile el alimento.
Los cachorros de 4 a 6 meses ya deberían comer alimento seco, la cantidad diaria deberá distribuirse en 3 raciones diarias.
A partir de los 6 meses ya podrá distribuirse su alimento en dos raciones diarias.
Es importante aumentar las dosis diarias de comida hasta el 5to mes, estando pendiente de sus necesidades nutricionales, luego disminuirlas a partir del 6to mes para evitar sobrepeso ya que en esta etapa de su desarrollo no necesitara tanto alimento.
Comportamiento del Morkie con los Humanos
El morkie es un perro con bastante apego y cariño hacia su dueño, este siempre que pueda intentará llamar su atención, por lo que una tarde de juegos en compañía de su amo sería lo más satisfactorio para él.
Pero con las personas desconocidas su carácter es totalmente diferente, para lograr que se socialice bien con ellas hay que enseñarles desde que son cachorros, puesto a que tienden a ser muy testarudos y rebeldes a la hora de conocer gente nueva. Así en un futuro será un perro muy dócil y simpático con las personas que se le presenten. Si se le ignora por mucho tiempo, el morkie tiende a tomar un carácter reservado y aislado con su dueño.
Estos perros a pesar de ser pequeños tienen un gran espíritu de perro guardián por su actitud siempre alerta, pendiente de cuidar el hogar de algún intruso. El morkie desconfía mucho de los desconocidos. Si el dueño recibe al desconocido y tiene una actitud agradable con él, comprenderá que no es una amenaza latente en el hogar, sino un aliado, y se atreverá a acercarse. El morkie hereda esta actitud vivaz y valiente de su antepasado el maltes.
Esta raza entra en la categoría de perros de compañía gracias a su porte, belleza y pequeño tamaño. Este por consecuente se lleva bien con otros perros con su parecido, pero con los humanos es diferente. Con un buen entrenamiento podrá relacionarse en total normalidad con las personas nuevas, pero siempre estará presente en él cierta inquietud en los primeros días, debido a su instinto protector del hogar y su dueño. En su educación hay que ser firmes en todo momento, pero sin gritarle o ser agresivo, hay que educarlo de manera que tenga una respuesta positiva.
Un buen adiestramiento es fundamental para evitar el síndrome del perro pequeño
Si no se entrena en el ámbito de darle su lugar es posible que con el tiempo él quiera ser el que domine en el hogar, ya sea con berrinches o un carácter negativo que haya desarrollado en algún momento. Por ello hay que equilibrar sus cuidados necesarios y los gustos que se le conceden para que no se convierta en un perro demasiado consentido.
En la educación siempre hay que enseñarle su rango en la familia, haciéndole saber quién es el que manda y quien es el que sigue, imponiendo respeto y control sobre el hogar. De lo contrario será un perro al que se le permite todo tipo de conductas, tanto buenas como malas por lo que hay que intervenir.
El morkie tiene tendencia a desviarse de su posición en la familia, por lo que hay que enseñársela apenas se adquiera. Unos de los comportamientos más indeseados es el de hacer sus necesidades dentro de la casa, para desaprobar esta conducta hay que decirle justo en el momento de la acción un firme “no” para luego guiarlo hacia el lugar destinado para dicha tarea.
Una buena educación es fundamental para él, así se asegurará que sea un buen perro de compañía. Tener a un morkie bien comportado es algo muy satisfactorio que beneficiara a todo los que le rodean. Solo hay que aplicar el entrenamiento y la restricción a ciertos espacios que no sean suyos como el sofá, mesas, etc.
Desde que es un cachorro hay que enseñarle lo que sí y no debe hacer ya que desde el primer instante se dedicara a aprender diferentes conductas que le servirán para desenvolverse en un futuro. No hay que prestar atención a las tiernas insinuaciones que utilice para acceder a cierto premio puesto a que puede estar intentando manipular de esa forma.
Cuando es un cachorro es mucho más difícil desprenderse un rato de su dueño, en algún momento necesitará aprender a desenvolverse solo en la casa. Se le debe proporcionar esta experiencia desde pequeño para que cuando sea adulto no desarrolle esta conducta, puesto a que sería más difícil de cambiar.
El morkie puede desarrollar un gusto por mordisquear los dedos de las personas, esto hay que pararlo inmediatamente para que en el futuro no lastime a nadie con sus pequeños y afilados dientes. Es un perro pequeño por lo tanto su mordida puede romper la piel más fácilmente. Retirar la mano cuando empiece es lo más adecuado para que olvide esta práctica.
Hay que tener en cuenta que una conducta adecuada y serena se logra practicando cada vez que se presente una buena oportunidad para corregir un mal comportamiento, de esta forma se moldeará su forma de proceder para que sea un perro cariñoso, beneficioso y sociable con los demás.
¿Con los Morkies buenas mascotas para los niños?
Antes de responder si los morkies son buenas mascotas para los niños primero debes preguntarte “¿Mi niño sería bueno con mi morkie? La razón de pedir que te formules esta pregunta es simple, muchas veces son los niños pequeños los que tienen ciertos comportamientos que hacen enojar a los perros pequeños debido a tirones de pelo, tomarlo por las patas y levantarlos, golpearlos o demás.
El morkie es un perro excelente con los niños que saben cómo tratar a los perros, no habrá ningún tipo de problemas en el comportamiento del morkie para los niños. Es un perro dulce, seguidor y muy amable y leal. Ahora, si es sometido a daños físicos entonces reaccionará de manera agresiva para librarse de los maltratos, sin importar si el maltratador es un niño pequeño o es un adulto.
Por ello es importante el saber que en pocos casos los perros pequeños son los que comienzan la agresión. El morkie no es un perro territorial por lo que no agredirá a un niño si se acerca mucho a él, se trata de un perro casero al cual le encantan los juegos y juntarse con personas que sean tan enérgicas como él.
Otra de las razones por las que el morkie podría atacar es debido a que un niño lo interrumpa mientras come, claro, esto puede ocurrir si el morkie no ha tenido una socialización correcta tanto con otras mascotas como con humanos ya que este comportamiento es algo dominante y posesivo. Lo mejor es no interrumpir al morkie mientras come, aún menos si se trata de un niño ya que la mordida de esta raza, aunque sea pequeña, podría romper la delicada piel de un niño menor a 6 años.
Como recomendaciones finales te aconsejamos que primero, antes de dejar a un niño jugar con un morkie lo instruyas muy bien sobre la importancia de las mascotas, la naturaleza y sea correctamente sensibilizado en estos temas para que sepa cómo tratar a este nuevo integrante del hogar.
¿Cómo criar a un morkie de manera correcta?
El morkie es un perro “faldero”, es decir, siempre te pedirá atención, aun cuando hace una hora hayas hablado o jugado con él. La razón principal por la que esto ocurre es que en sus genes hay una fuerte dependencia de su amo.
Los yorkshire terriers y el maltés son dos razas que han servido de compañía a las personas durante mucho tiempo, de hecho, han servido a antiguas familias durante una época cuya función principal era el exterminio de roedores que podían infectar los alimentos e instrumentos de cocina del hogar.
Por ello, aunque sea una raza hibrida de cierta novedad es importante satisfacer esta necesidad de atención que es propia del morkie. Un perro de esta raza que haya comparta mucho con su amo sin dudas será muy feliz e irradiará vitalidad.
Es un perro que incluso necesita vivir dentro de casa para siempre estar al pendiente de los acontecimientos que suceden en ella por muy insignificantes que sean para el ser humano.
El ver como su amo juega con otro miembro de la familia o como come, va de un lugar a otro o interactúa con él son cosas cotidianas muy llamativas para él y que le permitirán sentirse parte de la familia sin mucho esfuerzo de tu parte.
A pesar de su belleza al morkie le gustará que lo traten como un perro cualquiera, excesivos abrazos y mimos podrían incluso llegar a molestarlo o hacerle creer que él es el líder del hogar, desencadenando comportamientos agresivos y rebeldes como el morder los muebles, los aparatos electrónicos y el no importarle que le reprendas.
Por eso, como uno de los mejores consejos para criar a un morkie recomendamos el dejarlo con su madre y hermanos al menos unos tres meses para que pueda conocer como es la estructura jerárquica de una manada de verdad y luego, al llegar a casa, hacerlo interactuar amigablemente con miembros de la familia (solo si está dispuesto).
¿Puede el Morkie ser un buen perro guardián?
Los perros pequeños nunca han sido una buena opción para cuidar un hogar… O al menos algo así dicen los dueños de perros de boca en boca, pero lo cierto es que, dependiendo como definas “perro guardían”, el morkie puede ser uno de ellos, y de manera excelente.
Muchas personas escogen rotweillers, dobermans o grandes daneses para cuidar su hogar. Estos perros sin duda pueden resultar un peligro para personas que entren a el territorio de los mismos sin autorización previa del amo, pudiendo llegar a atacar al supuesto asaltante o invasor. Ellos mismos se encargan del problema al mismo tiempo que emiten fuertes ladridos para alertar a todos alrededor que hay un problema.
Ahora, ¿te puedes imaginar a un morkie en este papel? Obviamente sería muy gracioso ver como un perro que mide entre 25 y 30 cm de altura con un peso minúsculo “ataca” a un ladrón, pero aunque no lo creas el morkie puede ser un buen perro guardián, pero no de los que atacan, sino de los que alertan a su dueño de la presencia de un intruso con poderosos e insistentes ladridos, casi imposibles de obviar.
Por ello el morkie es clasificado como buen perro guardián de alerta, él no atacará ya que se encuentra consciente de sus limitaciones físicas para hacerlo, pero si advertirá a su amo en repetidas ocasiones de la presencia de algún intruso, ya sea humano o animal.
A muchos dueños de morkie les encanta que sea así, pero a otros el que ladre tanto por haber visto a un gato o personas pasando frente a casa les resulta molesto, y si no es a ellos de seguro les resulta molesto a los vecinos… Lo bueno es que con adiestramiento en positivo esta conducta puede modificarse un poco para que no sea tan insistente.
Comportamiento del Morkie con otros perros
Los morkie son perros que se encuentran en la búsqueda constante de los mimos y atención de su amo, el principal problema a la hora de relacionarse con otros perros es ese mismo, otros perros podrían sentirse celosos de la atención que le das al morkie ya que se la podrías dar también a ellos.
Lo ideal para fomentar la buena relación entre el morkie y otros perros es darle igual atención a todas tus mascotas, independientemente si son gatos o perros. Manteniendo el mismo nivel de confianza, atención y cariño con todas podrás ver como no solo se tolerarán los unos a los otros, también se la llevarán excelente ya que comparten el mismo amor por su amo y su amo comparte su amor entre las dos en partes iguales.
Te preguntarás en que conductas puedes estar (a los ojos de tus otras mascotas) dándole más atención a tu pequeño morkie que a ellas, las conductas más habituales que los dueños de nuevas mascotas suelen tener con ellas es:
- Pasar más tiempo con ellas.
- Darle caricias, cargar o mimar en exceso a la nueva mascota.
- Permitirle a la nueva mascota estar dentro de casa mientras que las demás están fuera.
- Servirle primero la comida a la nueva mascota o peor aún, usar el mismo plato de tus otras mascotas.
- Apenas llegue ofrecerle los espacios de tus otras mascotas (fatal).
La socialización del morkie para evitar problemas de conducta
Este consejo va para cualquier mascota que adoptes, no solo mejorará la conducta del morkie y hará que sea estable durante toda su vida sino que también a perros con tendencia a ser agresivos les ayudará mucho a controlar su agresividad.
Esta técnica consiste en la socialización temprana, que no es otra cosa que someter al morkie a la interacción directa dentro de una manada apenas nazca. Afortunadamente los bichones o yorkshires pueden tener varios cachorros en un mismo parto, por lo que no existe excusa que limite la socialización del morkie apenas nazca.
Al encontrarse dentro de una manada en donde su madre está presente los morkies podrán aprender rápidamente a relacionarse en una estructura jerárquica bien definida, en donde sabrán que ellos no serán necesariamente los líderes, sino que tendrán que seguir a su líder. Esto es vital en el caso del morkie ya que es un perro pequeño que es mimado muy fácilmente por parte de sus dueños, lo que para él puede ser un claro ejemplo de debilidad por parte de nosotros y puede creer que lo estamos reconociendo como líder.
Los criadores expertos recomiendan no adoptar mascotas que tengan menos de tres meses de edad, ya que aparte de ser cruel el separar a un cachorro de su madre cuando aún puede lactar, no es recomendado tampoco el hacer que los cachorros se separen de su madre y hermanos antes de que aprendan a convivir correctamente con ellos, algunos de los puntos que aprenderán durante este tiempo son:
- No ser agresivos con sus hermanos.
- En el caso de que muestren agresividad se quedarán solos ya que sus hermanos no tolerarán este comportamiento y se marcharán a jugar con otro hermano que no sea agresivo.
- Su madre les enseñará aspectos básicos de supervivencia como olfatear para buscar comida, enterrar reservas de comida, como ser sumisa con el amo y además se encargará de alimentarlos con lo que vaya consiguiendo a su paso (puede dejar croquetas en su plato para que sus hijos las prueben).
Sin duda esta conducta maternal es algo que las hembras morkie aprenderán y mantendrán en memoria para cuando les toque tener cachorros mientras que los machos aprenderán a comportarse de manera sumisa y seguir al líder en todo momento.
Lo más importante a la hora de adquirir un morkie
El punto más importante a la hora de comprar o adoptar a un morkie o cualquier otro perro pequeño es el siguiente: ¡No lo trates todo el día como un peluche! El morkie se trata de un animal vivo con su propia manera de ser y modo de ver la vida, si lo tratas constantemente como si él fuese el rey de la casa entonces se lo creerá y su conducta será muy rebelde.
A nadie le gusta un perro hermoso pero agresivo y que no hace caso, justo lo que conseguirás si además de no permitir que tenga una socialización normal debido al adoptarlo al mes y medio de vida también lo tratas de manera súper especial. Trátalo de manera normal y tendrás a un morkie bien portado contigo y con las demás mascotas del hogar. (Además con esto tus otras mascotas no sentirán celos del morkie).
Finalmente, debes saber que el morkie no es un perro de “raza” por lo que duda instantáneamente de criadores que te lo ofrezcan a elevados precios.
Salud y cuidados del Morkie
Esta maravillosa raza es muy vistosa y obediente, es sin dudas perfecta para vivir en familia cumpliendo el rol de mascota, pero debes saber que tanta belleza tiene un precio, el precio de tener que cuidarla muy bien ya que es una raza muy frágil que necesita constante apoyo de parte de su amo para mantener una buena salud.
Esta pequeña raza extrovertida, fiel y amistosa con los miembros de su familia necesita cuidados puntuales en cuanto a su pelaje, visitas al veterinario y ejercicio, tú como amo debes proveerle todos los cuidados que necesita para que así sea un compañero que pueda vivir durante muchos años a tu lado.
Cuidados del pelaje del morkie
El morkie es un perro que tiene un pelaje hermoso, es una combinación del pelaje de sus progenitores, el yorkshire terrier y el maltés, los cuales tienen pelajes suaves y largos. Pero a los pelajes de sus padres, como al del morkie deben hacérseles múltiples cuidados para que mantengan un aspecto sano y elegante.
Lo primero que hay que tomar en cuenta es el cepillado del pelaje del morkie, el cual debe realizarse a diario si se dispone del tiempo o como máximo cada dos días. Esto evitará que entre los pelos lleguen a formarse nidos de insectos tan molestos como las garrapatas y las pulgas, además también evitará que el pelo muerto se acumule en marullos, pudiendo afectar la piel, ya que estos producen alergias o también pueden producir nudos.
Realiza el cepillado con un cepillo de dientes cerdas más o menos duras para que todo el pelaje muerto se quede en ellas fácilmente y puedas retirarlo. El cepillado deberá llevarse a cabo desde que es un cachorro para que aprenda que es una práctica normal y que no debe alterarse ni temer por ella, así podrá saber desde pequeño que es una práctica relajante y en donde tendrá la oportunidad de estar cerca de su amo un rato.
Con un cepillado frecuente el pelaje siempre se mostrará reluciente y radiante, tal y como quieres que se vea el fabuloso pelaje del morkie.
Como consejo adicional debes saber que todos los perros, luego de comer, están saciados, felices y listos para tomarse una siesta, por lo que el mejor momento para cepillar a tu morkie es cuando ya han pasado unos diez minutos luego de que haya comido, de esta manera lograrás que se comporte muy bien al ser cepillado ya que estará tranquilo.
¿Cada cuánto bañar a un morkie?
Los baños se pueden llevar a cabo en los morkies mensualmente. Son perros que están destinados a vivir en el interior del hogar, por lo que puede que no se ensucien mucho a lo largo de una o dos semanas. El tiempo mínimo recomendado para bañar al morkie es de dos semanas, un intervalo menor a este podría producir que la capa de grasa natural de su piel se elimine, dejándolo propenso a sufrir de alergias.
¿Cómo bañar a un morkie?
No uses productos destinados para el uso humano en tu morkie, para bañarlo necesitarás productos especiales destinados al uso veterinario. La razón es simple, los productos para humanos tienen un pH adecuado para la piel humana, mientras que la piel de los perros es más sensible, por lo que requieren productos con un pH controlado especialmente dirigido a ellos.
Los productos como champús, jabones y colonias son bastante accesibles para el uso animal, estos se venden en cualquier centro comercial, farmacia, tiendas por departamentos o veterinarias.
Es recomendable bañar a tu morkie primero aplicando jabón y sacando todo el sucio con este y luego aplicar champú, el cual dejará su pelo brillante y sedoso. Luego de enjuagado el champú y secado el cabello del morkie con un secador y toalla podrás aplicarle perfume para perros. El resultado será un perro limpio, oloroso y de hermoso pelaje y personalidad.
¿Cuánto ejercicio debe hacer un morkie?
El morkie es un perro que usualmente vive en interiores ya que el exterior del hogar puede ser un poco rudo para él. Por ello necesita realizar jornadas de ejercicio como máximo cada dos días.
Los ejercicios y juegos deberán darle la posibilidad de drenar energía y de estirar sus patas. Afortunadamente esta raza hibrida ama los juegos con la pelota, jugar al escondite y a las atrapadas, por lo que no existe excusa para no pasar un rato divertido a diario con ella.
Los exteriores no son buenos para un morkie ya que es un perro que tiene una gran necesidad de atención. Practicamente siempre querrá saber que te encuentras bien y “a salvo”, por lo que te visitará a dónde estés ubicado en el hogar cuando te encuentres en él.
Si te encuentras trabajando en un proyecto, haciendo arreglos o desayunando siempre podrás ver a tu fiel morkie a tu lado. La razón principal es que es un perro faldero, es decir, que siempre querrá estar al lado de su amo. Ahora, ¿Qué pasa si su amo es sedentario y casi nunca sale a caminar?
Los resultados de un estilo de vida sedentario para el morkie son dañinos para una correcta convivencia puesto que querrá morder muebles, ladrar de manera seguida y subirse a diferentes lugares para entretenerse. También puede que desarrolle una conducta nerviosa no deseada.
Por ello, para evitar estos inconvenientes en un morkie que vive dentro de casa debes sacarlo de paseo o agotarle su energía de alguna manera, por ejemplo, puedes sacarlo a pasear por los alrededores de la casa o apartamento unos 45 minutos o una hora, tras los cuales el morkie quedará exhausto y no querrá más actividad física hasta el otro día.
También, si cuentas con el espacio necesario como un jardín o terreno amplio, puedes jugar con la pelota. Al morkie le encanta jugar a buscar la pelota, de hecho será difícil quitársela de la boca cuando se la pidas de vuelta (si no está entrenado para buscar y devolver la pelota).
Otros juegos que puedes realizar con tu morkie es el de las cosquillas o vencidas, en donde harás que se ponga boca abajo para hacerle caricias. En resumen el morkie es un perro con una necesidad de ejercicio baja, aunque no debe obviarse para que no llegue a aburrirse, entristecerse o llegar a adoptar un comportamiento obsesivo y nervioso.
La alimentación del morkie es importante
La alimentación debe ser balanceada, debe tener proteínas, vitaminas y minerales para que pueda hacer gala de toda su energía y realice todas las travesuras a las cuales tiene acostumbrados a sus amos.
El morkie es una raza que necesita atención
Es importante dedicarle unas horas al día, distribuidas a lo largo del día a tu morkie. Es una raza que odia la soledad, por lo que podrás verlo pidiéndote un poco de atención si no se la has prestado en el día.
Tampoco debes olvidar llevarlo al veterinario desde las dos semanas y media de vida.
¿Cuánto dura el celo en las morkies?
Como ya sabes, morfológicamente las morkie pueden variar mucho debido a que el estándar de la raza no está completamente definido hasta el momento. Algunos criadores creerán que está bien escoger a un bichón maltés macho para que monte a una yorkshire terrier, otros criadores creerán que es mejor que un yorkshire macho monte a una maltés hembra.
Además, un cachorro puede salir más parecido a un yorkshire que a un bichón, lo cual le puede parecer muy bien a un criador, sin embargo, otros criadores de preferencia querrán que se parezca más a un bichón o incluso que sea una mezcla homogénea de las dos razas.
Todas estas discrepancias entre criadores hace que sea difícil determinar a ciencia cierta cuánto dura y cada cuanto se presentará el celo en la morkie hembra, pero teniendo en cuenta los datos estadísticos de ambas razas de hembras, se puede hacer una estimación y llegar a descubrir cuánto dura el celo de las morkies en realidad.
El celo en sí de la morkie puede durar aproximadamente unos 21 días, pero no en todos estos días ser un macho (que quiera permanecer ileso) podrá montarla, por lo que tendrá que esperar a los días en específico que esté receptiva al mismo. Durante estos 21 días de celo podrás apreciar que se encuentra un poco más “decaída” y perezosa que de costumbre. También será bastante más cariñosa de lo normal.
La primera fase del celo ocurre cuando comienza a sangrar. Este sangrado se da por gotas y no suele ser abundante, sin embargo, es notorio ya que a medida que camina puede dejar el rastro. Esto dura unos 10 días y es llamado el proestro.
La sangre no será totalmente roja, más bien tiene un tono rosado y no es muy densa. Durante esta etapa no aceptará al macho aunque el macho sepa que hay una hembra en celo cerca. Puede que intente montarla pero la hembra reaccionará de manera agresiva ante la insistencia.
Luego se producirá el estro, el cual tiene una duración de 14 días y es cuando la hembra dejará que el macho la monte. Esta etapa puede notarse ya que la hembra permanecerá con el rabo hacía un lado cuando esté cerca de un macho.
¿Cuánto dura el embarazo de un morkie?
El embarazo de los perros es completamente diferente al embarazo de otras especies. Por ejemplo, el embarazo del ser humano dura unos nueve meses debido a la complejidad de todas las funciones neuronales del cerebro y diferentes órganos más evolucionados del cuerpo, ahora, comparando este con el de los perros, el cual dura tan solo unos dos meses en el caso del morkie y de la mayoría de los perros, el de estos buenos amigos puede parecer muy corto, pero no es así, se trata de un tiempo estándar para que una perra dé a luz a sus cachorros.
En el caso del morkie, la hembra puede demorar de 58 a 60 días como máximo en tener a sus crías, aunque en casos especiales el proceso suele tomar unos días menos.
Tras un mes y una o dos semanas se comenzará a notar el abdomen de la hembra morkie algo abultado, los laterales del abdomen se verán también abultados, los cuales te deberán dar la pista definitiva sobre el estado de preñez de esta. Entre la sexta y la octava semana ya podrás sentir a los cachorros moviéndose dentro del abdomen de tu adorada morkie.
Durante esta gran etapa en la vida de la morkie esta se cuidará mucho más, puede que esté más inactiva que de costumbre, no querrá realizar juegos en los que tenga que arriesgarse o fatigarse y si participa en ellos se fatigará rápido debido a que se encuentra alimentando a sus cachorros de su propio ser.
Durante esta etapa la alimentación de la morkie embarazada deberá ser a base de croquetas para cachorros. Las croquetas ideadas para cachorros tienen el beneficio de que se encuentran muy llenas de proteínas, minerales y vitaminas necesarios para la correcta alimentación de los cachorros aunque estos no hayan nacido, a través de su madre.
Sobra decir que durante esta etapa tú también debes cuidar mucho a tu perrita, mantele siempre agua fresca, un lugar comodo en donde tumbarse y al acercarse la octava semana de embarazo acomódale su paridera, en donde tendrá lugar el parto.
¿Cómo cuidar a los morkie cachorros?
Cuando la madre se dispone a parir a los cachorros normalmente ella se encargará de todo. Se pondrá en su paridera y dará a luz de 3 a 6 cachorritos como máximo. Estos cachorros deberán estar muy cerca de su madre todo el tiempo durante los primeros 3 meses de vida para poder alimentarse de su leche durante mes y medio o dos meses y que puedan comenzar a comer alimentos sólidos humedecidos.
Los cachorritos son frágiles, no deben ser tratados bruscamente, durante los primeros días de vida no es conveniente que reciban visitas ya que su madre estará bastante comprometida en cuidarlos y puede resultar agresiva a la hora de “defenderlos” de miembros de su propia familia humana. Lo bueno es que podrás asistirla incluso durante el momento del parto si eres su amo, ya que ella podrá confiar en ti debido a que eres su querido amo.
Luego de tres meses ya los cachorritos deberían poder comer alimentos sólidos y moverse libremente por el hogar. Estos cachorritos deben ser alimentados cuatro veces al día, una vez en la mañana, una vez temprano en la tarde, ya entrada la noche y por última vez ya tarde en la noche antes de dormir. Este periodo durará unos tres meses, hasta los seis, cuando ya podrán comenzar a comer dos veces al día una ración más grande de croquetas para cachorros sin humedecer.
Es conveniente dejarles de humedecer las croquetas cuando sus dientes están ya bien asomados.
De resto deberás estar pendiente de que no se escapen a la calle, ya que durante esta etapa son especialmente aventureros y no temerán al entorno, por lo que deberán estar en un entorno cercado en donde no haya ningún peligro para ellos. Ya llegada la noche deberán dormir dentro de casa para evitar que el frío los enferme.
Por supuesto, no pueden olvidar a las tres semanas de vida llevarlos al veterinario para que reciban todas las vacunas necesarias para su supervivencia y la correspondiente desparasitación. Recibirás por parte del profesional un calendario de vacunación y desparasitación que debe ser cumplido para evitar inconvenientes con tu mascota.
Por ultimo no olvides darle toda la atención y amor que pidan, los morkies son perros que no se separarán de ti mientras estás cerca.
Cómo entrenar, educar o adiestrar un perro Morkie
Todos los propietarios de razas pequeñas deben orientarse muy bien en cuanto al cuidado y entrenamiento de las mismas. Muchas personas se enfocan únicamente en lo estético, en que su mascota esté siempre muy bien arreglada para que pueda ser el centro de las miradas cuando vaya de paseo contigo, pero el entrenamiento también es fundamental, y aún más en perros pequeños como el morkie.
La razón principal por la cual el entrenamiento se vuelve fundamental en perros de raza pequeña es que estos usualmente son tratados como si fuesen juguetes. Un perro, sin importar su tamaño, tiene su propio modo de ver la vida, ellos establecen sus relaciones por medio de complicadas estructuras jerárquicas, en donde el ejemplar más fuerte es el que dirige a la manada guiándola para hacer que esta esté protegida y abastecida correctamente.
Los ejemplares menos fuertes en ella están destinados a seguir al líder, estos ejemplares sumisos no pueden cuestionar al líder ya que de lo contrario serían atacados por el mismo, tratados de manera agresiva por él e incluso rechazado por la manada luego de esto. Al entender esto ya sabrás un poco el por qué es necesario tratar a tu morkie como un perro y no como un juguete: los mimos excesivos denotan debilidad de tu parte.
Si durante el entrenamiento del morkie te das cuenta que es bastante testarudo y no presta atención a tus comandos o le cuesta mucho tomarte en serio durante este momento si no le ofreces una golosina probablemente estarás experimentando los efectos negativos de los mimos excesivos, los cuales hacen que a sus ojos él sea el líder y tu un seguidor. Entre los perros el lamer la cara de otros o seguirlos es una actitud de sumisión, por lo que tu morkie puede haber confundido tus mimos de cariño como declaraciones constantes de sumisión de tu parte hacía él.
¿Cómo adiestrar a un morkie correctamente?
Ahora que ya sabes lo que no es conveniente a la hora de adiestrar a tu perro pequeño, en este caso el morkie, debes comenzar a “darte a respetar” para él. Los mimos están bien, pero deben efectuarse de vez en cuando, cuando haga algo correcto. Por ejemplo, si usa su cama para dormir en este caso correspondería un mimo, si duerme sobre el sofá entonces necesitará un enérgico “no” para que pueda entender que no debe ocupar el lugar que ocupa su dueño sin su permiso.
Este comportamiento deberás tenerlo desde que el morkie es aún muy cachorro, dado que aprenden mejor durante el primer año de vida. De esta manera el morkie no dará problemas de dominancia típicos en las razas pequeñas o toy, ya que estará siendo tratado como un perro de tamaño normal.
¿Cómo enseñarle trucos y adiestrar a un morkie?
Ahora que sabes cómo tratar correctamente a tu morkie todo será más sencillo a la hora de adiestrarlo, él te verá como el líder de la manada y debido a que es un perro faldero será mucho más fácil que tenga muy en cuenta tus órdenes y busque agradarte.
Lo primero que debes tomar en cuenta a la hora de adiestrar a un morkie es que estos perros adoran a su amo, por lo que tomarán muy mal que él se torne agresivo hacia ellos, por lo cual el entrenamiento tradicional que basa la obediencia de perro amenazando con maltratarlo o gritándole queda descartado.
Para poder enseñarle trucos y adiestrar correctamente a un morkie deberás usar el entrenamiento en positivo, que no es más que recompensarlo cada vez que realice una buena acción o la acción acertada que esperas en cada sesión de entrenamiento.
Estas recompensas pueden venir en forma de caricias, felicitaciones verbales o bocadillos saludables muy sabrosos para él. Lo recomendable es alternar cada una de ellas y alternarlas entre sí. Por supuesto, el morkie sacará su lado glotón esperando que siempre le des un bocadillo, lo cual no puede llevarse a cabo ya que podría engordarlo, pero la esperanza de que le des un sabroso bocadillo y el afecto hacia ti hará que te preste atención mientras lo entrenas.
¿Cómo hacer que el morkie se acostumbre a un nuevo entorno?
El morkie es un perro que se adapta muy bien a los nuevos entornos, pero puede que necesite de tu ayuda a la hora de juntarse con tus mascotas del hogar siendo él recién adoptado. Para ello puedes juntarlo con ellas y observar su reacción y la reacción de tus mascotas. Si todo marcha bien compartirán miradas, se olfatearán y finalmente pasearán juntos.
Si hay agresividad de alguna parte entonces debes darle un tiempo a tu morkie o a tu otra mascota para que el olor de la otra mascota le resulte familiar y no exista problema alguno en su relación.
Carácter, personalidad y comportamiento del perro morkie
Para saber cómo entrenar correctamente a un morkie primero es necesario meterse en su pelaje para saber cómo ve la vida, a las otras mascotas, a su dueño y familia humana. Para entender esto es necesario saber que el morkie viene de una antigua familia de perros de compañía.
Primero, está el yorkshire terrier, uno de los acompañantes más populares para familias que existen en la actualidad, este perro, como la gran mayoría de los terriers, fue usado para ahuyentar a alimañas que se metían al hogar para comerse las reservas de comida de las familias en una época colonial.
Debido a esto los terriers se volvieron especialmente familiares en un entorno hogareño, con los miembros de la familia. Al resto de los perros de mayor tamaño les fue delegada la tarea de cuidar el hogar como perro de vigilancia, por lo cual siempre estaban pendiente de los acontecimientos en el jardín, otros también estuvieron muy unidos a su amo, como los que se dedicaban a ayudar al hombre en labores de caza.
Por su parte, el bichón maltés le da a la raza morkie una personalidad un poco desconfiada con los extraños y aún más apego con su amo. El bichón maltés es bastante reconocido por los alborotos que puede armar cuando se da cuenta de que un extraño se ha acercado demasiado a su territorio, conducta que el morkie ha heredado un poco. El morkie también ha heredado del bichón maltés el apego hacía su amo, ya que ambas razas prácticamente quieren vivir unidas a su amo en todo momento.
Sabiendo esto se puede decir que la personalidad del morkie es la de un perro que necesita constante atención por parte de su amo. Este tipo de perros considera necesaria la presencia de su amo para estar tranquilos. Solo necesita estar a solas en un lugar más o menos apartado que seleccionará para descansar.
Si no se trata la anciedad por separación el morkie puede convertirse en un perro nervioso que siempre estará atento para ver si su amo se encuentra en casa, si no lo encuentra puede que comience a comportarse de manera destructiva debido a la ansiedad, por ello, puedes practicar unos cuantos ejercicios contra la ansiedad del morkie:
- Aunque no te vayas, ponte tu chaqueta y suena las llaves del hogar. Luego de esto vuelve al lugar en donde estabas.
- Haz que otros familiares también interactúen con el morkie.
- Adquiere una nueva mascota para que le haga compañía.
- Préstale atención a diario y juega con él.
Con esto tu morkie tendrá mucha menos ansiedad aunque no estés en casa.
Entorno ideal del Morkie
Los morkies son perros de casa. No son perros adecuados para cubrir grandes extensiones de terreno, son perros que necesitan vivir en el interior del hogar para así evitar las inclemencias ambientales que podrían ocurrir en el jardín, recuerda que se trata de un perro pequeño que tiene un pelaje que debe cuidarse mucho y este puede enmarañarse fácilmente con restos de ramas u hojas si estas se adhieren a él mientras se acuesta en el patio.
Pero existe un problema, es un perro delicado y pequeño, que no resistirá juegos bruscos por parte de los niños, lo cual representa un problema si lo mantendrás dentro del hogar, ya que estos, sin querer, pueden hacerle daño. Lo más recomendable en estos casos es esperar a que el niño crezca un poco mientras le enseñas la importancia del cuidado de las mascotas antes de adoptar un morkie.
El morkie compartiendo el hogar con niños pequeños
Con los niños de más edad el morkie no tendrá problemas, es un perro activo, por lo cual se llevará muy bien con niños que jueguen con él y lo lleven de paseo (siempre con correa puesta)
Los Morkies son los más adecuados para un entorno que gira en torno a los miembros de la familia. Es recomendable para las familias con niños bastante pequeños no optar por esta mascota, ya que es un perro frágil y jugar con los niños puede provocar accidentes.
Además no es recomendable que su hábitat sea el jardín del hogar ya que estos siempre estarán deseosos de atención y afuera no tendrán la atención que podrían conseguir dentro de casa.
¿Cómo se comporta el morkie dentro de casa?
Cuando están dentro de casa son bastante activos y juguetones, siempre estarán prestándote atención esperando que interactúes con ellos. Es necesario que mantengan siempre cerca de ellos juguetes para perros, tales como huesos de juguete o de carne seca para que puedan morderlos cuando tienen la necesidad. Usualmente los cachorros morderán cualquier cosa que se les atraviese, ya que sus dientes están creciendo y necesitan estimular la zona.
El que un morkie adulto muerda los muebles ya es otro caso especial, ya que esto puede significar que no está recibiendo suficiente ejercicio y se encuentra frustrado y aburrido, no encontrando más remedio que divertirse mordiendo la alfombra, muebles o el control remoto de la TV. Para evitar esto siempre debes prestarle atención a las necesidades de tu morkie. Es un perro que ama los paseos, con un paseo corto por los alrededores será suficiente, aunque a veces insista el continuar el paseo por su espíritu aventurero.
Son perros que no necesitan mucho espacio para sentirse cómodos. Un pequeño plus en su estilo de vida sería un pequeño jardín en el cual pudiera salir a explorar algún rato e hiciera sus necesidades en un rincón determinado para ello en el mismo. Al morkie le encanta estar al aire libre (aunque le encanta más disfrutar de un entorno familiar).
La razón por la que el morkie es un perro tan familiar se remonta a la historia de los perros involucrados en la concepción de esta raza, el maltés y el yorkshire, ambos perros dedicados exclusivamente a ser mascotas, por lo que el estilo de vida casero va bastante arraigado en los genes del morkie.
¿Qué necesita un morkie dentro de casa?
El morkie será un miembro más de la familia que vivirá en casa, por lo que necesita su propio espacio en donde pueda sentirse cómodo, refugiado, pero al mismo tiempo no muy lejos de la zona en donde se realiza la interacción familiar, es decir, no muy lejos de la sala de estar, cocina o comedor.
El morkie necesitará que su espacio personal cuente con una camita cómoda, sus juguetes cerca de él y su plato de comida y agua en la misma zona, pero lejos de la cama para evitar accidentes.
Si colocas estos accesorios muy lejos de las zonas en donde usualmente te reúnes con tus familiares a conversar o simplemente ver la TV lo más seguro es que el morkie prefiera dormir en el suelo cerca de ti que estar lejos en su cama. Con esto te das cuenta el nivel de estima y familiaridad que esta pequeña raza hibrida tiene con su familia.
Sin duda el morkie es la opción correcta para familias con poco o ningún jardín, es un perro hecho para los entornos cerrados, aunque no debe olvidarse que necesita ejercicio a diario para evitar episodios de estrés que lo hagan destruir muebles.