Saltar al contenido
PerrosGatosOnline.com

Cocker Spaniel

Cocker-spaniel

Cocker spaniel: Tu nueva mascota

¿Recuerdas la película “La Dama y el Vagabundo”? Si no la recuerdas es probable que, si hallas visto la adorable escena de dos perritos comiendo espagueti del mismo plato, esta pintoresca parejita, protagonistas del dibujo animado mencionado, se dio a conocer alrededor del año 1955 por la compañía Disney, donde “Damita”, la hermosa perrita de color dorado, es nada más y nada menos que un Cocker Spaniel, quien debido a su belleza conquista el corazón de “Golfo” y sin duda alguna de todo el que pudo ver la cinta.

Con una mirada hermosa, enmarcada con esas largas orejas de pelo rizado, el Cocker Spaniel es uno de los más exuberantes perros de su tipo, aunque posee una popularidad de malhumorado es por el contrario muy dulce con sus familiares y amigos, sólo algunos de su especie poseen en realidad ese mal carácter, que según diversos estudios, como resultado se tiene la teoría de que, va asociado al color de su pelaje.

Amigable, dulce, respetuoso y juguetón, sin duda puede enamorar a quien conviva con él.

Su procedencia se remonta a las tierras Españolas, aunque se cree que incluso antes de cuando se funda esta tierra Vascuence ya existían los antecesores del Cocker Spaniel, remontándose a los años 500 A.C., lo cierto es que es una raza milenaria que era usada en sus inicios como ayudante en la caza, para arrear gallinas y levantar las presas de sus amos, su nombre probablemente sea una referencia a la traducción de “perro español”.

Es un perro de raza pequeño a mediano, corpulento, de apariencia compacta y atlética, de igual longitud y altura, lo suficientemente fuerte, inagotable y con aspecto deportivo, con pelaje sedoso, brillante y largo, especialmente en las orejas, puede llegar a medir unos 39cm a 41cm a la cruz, siendo las hembras generalmente un poco más pequeñas con unos 38cm a 39cm de estatura, por su contextura alcanza un peso que varía entre 12 a 14 kilos (entre 26,45 a 30,86 libras) con una fuerte tendencia a la obesidad, por lo que con cuidados diarios, el cepillado correcto y una buena alimentación puede llegar a vivir entre 12 a 15 años.

Cocker-spaniel

Como la mayoría de las razas de perros que se conocen hoy en día, el Cocker Spaniel actual es el resultado de varias décadas de cruces entre diferentes especies, matrimonios de perros en la misma especie, e hibridaciones en general, por lo que la tipología que se conoce difiere un poco a la de sus ancestros, obteniendo, sin lugar a dudas, mayor fineza y proporciones en su fisionomía, sin embargo, luego de su llegada a América fue desarrollada una variación de la raza, por lo que se han denominado como Cocker Spaniel Inglés y Cocker Spaniel Americano.

Una de las asombrosas características de este precioso animalito es su vigorosidad incansable, puede estar activo por largas horas necesitando sólo unos minutos de descanso y aunque se adapta muy bien a la calmada y pasiva vida de hogar, es necesario sacarlo a pasear diariamente, incluso, a veces una tranquila caminata con su amo, aunque lo llena de satisfacción, no es suficiente, se sentirá feliz pudiendo correr, olfatear y muchas veces darse baños inesperados o chapuzones en cualquier lugar que le provoque, por lo que es necesario estar atento cuando se le da la libertad de ejercitarse.

Con sus raras excepciones el Cocker Spaniel es muy familiar, dulce y amoroso con los suyos, se relaciona muy bien con los niños y procurará agradar a todos en su hogar, respetando incluso a los invitados, sin embargo, creará un apego especial con uno de sus dueños, con el cual muchas veces podrá sentir su estado de ánimo, pues este animalito tiene esta capacidad muy desarrollada, así que no hay necesidad de hablar para compartir con él sus penas o alegrías y tener una compañía consoladora.

El Cocker Spaniel es ideal para liberar el estrés del día a día, pues además de ser el perfecto amigo para jugar y hacer actividades físicas y entretenidas, es inagotable, amable y poco engreído, posee, como uno de sus mayores atractivos, un pelaje sedoso que necesita del cepillado diario, una cabellera que sin el debido cuidado tiende a enredarse, pero que al tacto es suave, provocando a quien lo tenga cerca la necesidad de acariciarlo, lo que él seguramente agradecerá tranquilamente.

Cocker-spaniel

Para quien desea incluir en su familia a un Cocker Spaniel debe saber que tendrá un nuevo integrante con un carácter fuerte, bastante inteligente, que necesita la compañía constante de alguien ya que no le gusta estar solo, un poco bullicioso pero que con el debido trato y adiestramiento basado en el refuerzo positivo, algo de paciencia y bastantes muestras de respeto y cariño puede convertirse en un obediente y fiel compañero.

Historia y Origen del Cocker Spaniel

Los ancestros del Cocker Spaniel podrían estar ubicados en la hoy conocida como Península Ibérica, de hecho el término Spaniel se deriva de Span, el cual según varios estudios filológicos y teorías puede tener diversos significados, algunas apuntan a las traducciones del fenicio donde Sp(a)n significa conejo, o tierra de conejos, otros han determinado que también era usado para indicar que era la tierra que se encontraba al norte de África y por su parte, ciertos filólogos registran una traducción referida a “tierra oculta”, en todo caso, los estudios asociados al significado de la palabra apuntan a la misma zona: España.

Lo cierto es que sí existen pruebas de la extensa antigüedad de estos animales, dando muestras de su aparición hacia el año 500a.C. cuando los cartaginenses llegaron a España, se puede observar también una escultura con la figura de un Spaniel, de la colección Chipriota, exhibida en el Museo Metropolitano de Nueva York, que tiene una data de más de 2000 años, asimismo, dentro de la legislación Irlandesa del año 17d.C. se puede leer como exigían que le fueran obsequiados estos animales al rey.

Un aspecto histórico un poco particular fue en el año 948d.C. en Gales, donde el gobernante era el rey “Howell el bueno”, el cual era tan aficionado a la raza que incluso incrementó su costo, por la misma cantidad que se podía comprar tanto un cachorro se podría adquirir también mujeres, esclavos o varias cabras, incluso en la ley propuso una especificación en cuanto a la clasificación de los perros, derivándolos en Spaniel, rastreadores y galgos.

En muchos otros aspectos se han podido encontrar fuentes que sustenten la existencia del mismo, como en la literatura inglesa, Chaucer quien vivió entre los años 1340 y 1400 incluye su nombre en la obra “Cuentos de Canterbury” y Gaston de Foix en “El Libro de la Caza” también en el mismo siglo.

Cocker-spaniel

Igualmente se encuentra reflejado como perro de caza en la época de Enrique VIII, donde era entrenado para corretear y colocar presas (aves, perdices, liebres, conejos, entre otros) debajo de unas redes que las mantenían sujetas hasta su captura por el hombre, el Spaniel permitía que la red lo capturara a él también hasta que fuera liberado con su objetivo.

Luego de la creación de las armas de fuego, las redes para la caza dejaron de ser útiles, y la función del Spaniel cambió, ya que ahora en vez de ser colocadores, levantaban las presas que yacían en el suelo muertas o mal heridas mientras las capturaba su amo, es aquí cuando se le incluye el término Cocker al Spaniel, que eran especialmente usados para buscar aves y faisanes.

La proliferación y perfeccionamiento de la raza en Gran Bretaña se debe al esfuerzo de varios criadores que a lo largo del tiempo se establecieron como autoridad en el tema del pedigrí de los Cocker Spaniel, entre ellos se puede mencionar al Sr. James Farrow, quien funda el Club de Cocker Spaniel de Gran Bretaña, crio a Bob Obo, nacido en 1879, el cual fue el precursor de la raza actual en Inglaterra.

Como en la mayoría de los casos, la existencia de la raza se vio comprometida durante la primera y segunda guerra mundial, ya que los criaderos mermaban la producción y exposición de estos canes, incluso durante la segunda guerra se conoce que tuvieron la necesidad de sacrificar a muchos de ellos por el peligro de una invasión, luego de algunos años de restaurada la paz se comienza de nuevo a producir al Cocker Spaniel con unos sementales que habían sobrevivido de buena manera.

Por su parte en Estados Unidos de América, el Cocker Spaniel había llegado a mediados del siglo XIX, donde también se pueden encontrar descendientes del mencionado Bob Obo, ya que el Sr. Farrow había enviado a una perrita llamada Chloe II preñada, la cual parió varios cachorros que luego, se convirtieron en una fuerte influencia en la generación de la especie en adelante.

Sin embargo, las bases en los cruces de esta especie no fueron cuidadas de la misma manera que en Inglaterra, generándose cambios importantes en la estructura del can, haciéndolos más refinados, llegando a tamaños tan pequeños que entraron en la categoría de miniatura, poniendo en peligro la calidad del anterior, siendo ahora tan delicados que ya no podían considerarse como perros de caza.

Para lo cual surgió la “Sociedad del Spaniel de Caza” quienes se preocuparon por la posible extinción y gran diferenciación de los perros en la zona que lograron crear camadas que salvaron al Cocker Spaniel Inglés original en América, lo que generó, en el año 1910 aproximadamente, una derivación conocida hoy en día como el Cocker Spaniel Americano.

Cocker-spaniel

En función a esta diversificación de la raza, se han obtenido varias categorías en los Cocker Spaniel, el Inglés que fue el original y fundador de toda la especie, con casas y apellidos importantes a lo largo del mundo y el Americano, que colaboró enormemente en la refinación de los rasgos generando también una versión ahora poco conocida que es el miniatura.

Características Principales

Entre los rasgos más característicos que pueden describir a los ejemplares de esta raza está la gran mezcla de actitudes que tiene en su temperamento, son tiernos, inteligentes, amorosos, alegres y llenos de energía, aunque también son dominantes y ansiosos.

Cocker-spaniel

Sin embargo cuando se tiene un Cocker Spaniel bien entrenado y socializado desde pequeño pueden llegar a ser los perfectos compañeros por ser afectuosos y perspicaces, siempre con alguna estrategia para jugar y hacer felices a sus dueños, razón por la cual son una de las razas más buscadas como mascotas de compañía en las familias de hoy en día.

Asimismo posee otras faces que pueden llegar a desarrollarse de mala manera y tener como consecuencia perros malhumorados, cascarrabias, manipuladores y posesivos, en efecto algunos padecen un sindrome conocido como el de la furia que los hace tener ataques de agresividad, por lo que lamentablemente existe un mínimo porcentaje de familias descontentas con la adopción de algún ejemplar.

Pero estos pocos con problemas de actitud no han llegado a opacar a toda la raza ya que la mayoría en realidad son adorables y el mejor amigo que se puede tener, se adaptan rápidamente a su entorno, son apasionados, dulces, valiente y lleno de vida.

Cocker-spaniel

Apariencia general
Generalmente son armoniosos, compactos y bien proporcionados, son fuertes, deportivos y atléticos aunque a veces por la exuberancia de su pelaje no lo parece dando la errónea impresión de ser delicados, tienen un olfato muy desarrollado y un instinto de caza bastante arraigado.

Altura a la cruz
Como sucede en casi todas las razas o seres vivos, los machos poseen una constitución un poco más robusta y alta que las hembras que se observan levemente más delicadas, teniendo también una altura ligeramente menor, por lo que ellos miden entre 39cm a 41cm y ellas entre 38cm a 39cm aproximadamente, cabe destacar que la medida que marquen desde el pavimento a la cruz tiende a ser la misma que la que posee desde la cola a la cruz.

Peso
Este es un rasgo que genera atención en el cuidado de los Cocker Spaniel puesto que por su disposición a comer continuamente tienden a sufrir de sobrepeso, el cual debe estar en los adultos entre los 12kg a los 14,5kg o 15kg dependiendo de su altura, pudiendo tener una variación nunca mayor al 20 por ciento del mismo.

Formas físicas
Su cabeza es modelada, con buenas proporciones no es muy grande ni muy fina ni ancha, sin mejillas prominentes, lo que da la sensación de tener un aspecto ligero, rematada con un ancho hocico de figura caudrada y una trufa grande dada como consecuencia a sus habilidades olfativas.

Su mandíbula es fuerte, presentando una mordida de tipo tijera, es decir que cuadran completamente los dientes de abajo en los espacios abiertos de los dientes de arriba, permitiéndole tener la fortaleza como para cargar las presas de sus dueños.

Sus ojos son grandes, redondos y expresivos, denotan inteligencia y vida por ser brillantes, generalmente son de color marrón avellana o marrón oscuro, viendose muy pocos con ojos claros.

Sus orejas dan el toque de belleza que lo particulariza, son ubicadas casi al nivel de los ojos, largas y colgadas, cubiertas de sedoso pelo con flecos largos.

Su cola se ubica un poco más abajo que la línea de su espalda pero la lleva curvada hacia arriba, es gruesa en su base y se va afinando hacia la punta dándole balance y equilibrio, al igual que las orejas es cubierta de suave pelo con flecos, en muchas ocasiones la usa para demostrar su estado de ánimo por lo que normalmente se le observa dinámica y en movimiento.

Sus extremidades son fuertes, con huesos resistentes y rectos, un poco, solo un poco cortos y musculosos lo que le genera fuerza en el deporte, con hombros delgados y oblicuos.

Su pelo se constituye también como otra de las características más lindas de los Cocker Spaniel, cubriendolos ampliamnete, es sedoso, liso, ondulado aunque no muy rizado, rematando con flecos en varias áreas como en las orejas, la cola, y las patas posteriores.

Los colores del Cocker Spaniel pueden ser variados, observándose algunos monocolor, bicolores y hasta tricolores. Entre los de un solo tono destacan los dorados o negros, otros poseen una mancha blanca en el pecho, pero es muy raro verlos completamente blancos. Asimismo pueden presentar combinaciones armoniosas como negro con blanco, negro con fuego, marrones con fuego o naranjas con blanco, otros presentan tres tonos combinados entre los mencionados.

Existe una particularidad aún no aprobada científicamente del todo y es que los de un solo color sólido pueden llegar a desarrollar ciertos problemas que afectan su temperamento causando desórdenes de agresividad muy parecidos a los ataques de epilepsia, pero todavía no se ha comprobado que esta sea la causa eclusiva de ello.

Comportamiento del Cocker Spaniel con otros perros

Cocker-spaniel

La gran mayoría de las razas de perros existentes hoy en día han desarrollado la capacidad de permanecer juntos a otros perros en su día a día y en sus actividades, incluso han llegado a colaborar unos con otros cuando se les enseña a hacerlo, pero no todo se da naturalmente.

En general requieren de entrenamiento y de un proceso de socialización desde sus primeros días de vida, siendo esto un factor esencial en la formación del carácter de los Cocker Spaniel, a los que no es aconsejable retirarlos de su madre inmediatamente al nacer, puesto que ella será quien los inicie en la vida social al compartir con sus hermanos incluso el momento de su alimentación, por lo que es ideal esperar a que se dé el destete para llevarlos a sus nuevos hogares adoptivos.

Es pues la socialización la clave inicial para asegurar una convivencia tranquila entre dos cachorros de la misma o de diferentes razas, mientras más tiempo conviva con otros canes, más fácilmente se adaptará a ellos.

Por su parte, se debe recordar que la gran mayoría de las acciones o el comportamiento que muestran los perros frente a otros perros viene condicionado a sus instintos y mecanismo de defensa, si se sienten amenazados bien sea porque su nuevo visitante es más grande o más activo que él, tendrán una conducta agresiva para demostrar a quien considera su enemigo su valor o superioridad, pero si observa que quien lo acompaña será su amigo y compañero de juegos podrán vivir juntos toda la vida.

Asimismo, la gran mayoría de los Cocker Spaniel son ejemplares bastante dinámicos y dominantes, sobre todo si capta que puede llegar a ser el líder en el grupo, por lo que requiere que sea educado y socializado o de lo contrario esta naturaleza le hará tener comportamientos un tanto agresivos.

El apareamiento del Cocker Spaniel

Cocker-spaniel

El apareamiento entre perros es un proceso tan normal que incluso en muchos países es visto en el día a día, ya que se observan gran variedad de razas deambulando por las calles y ellos no tienen ningún tipo de pudor puesto que responden instintivamente al llamado de su naturaleza, aunque lo ideal es que para empezar estos ejemplares no sean vagabundos y tengan sus casas de adopción o centros de atención y cuidados.

En este sentido los Cocker Spaniel son iguales a cualquier otra especie, los machos tienen una respuesta al celo de la hembra, la cual lo incita a través de la expulsión de feromonas por diversas vías, especialmente la orina.

Sin embargo, si usted desea preservar la salud de su mascota y obtener una buena camada es importante que considere ciertos aspectos:

Uno de ellos sería no adelantarse al momento, su Cocker Spaniel tendrá su primer celo entre sus primeros seis a diez meses, pero en esta etapa sigue siendo una cachorra y su madurez física y mental no es la propicia, de hecho sus órganos aún no están totalmente preparados para llevar a cabo una buena gestación.

Al respecto muchos veterinarios considerar que lo mejor es esperar incluso a que llegue el tercer celo que tiende a ser entre los dieciocho y veinticuatro meses de edad cuando ya su Cocker esté totalmente lista y haya recibido su etapa de entrenamiento o una buena parte de ella.

Por otra parte, ahora usted será responsable de una nueva cantidad de cachorritos que requerirán atenciones de su madre y en su momento un nuevo hogar de adopción, por lo que procure planificarlo con anticipación, ubicar el espacio donde estarán temporalmente en su hogar y en el caso de querer quedarse con alguno o con varios, ubicar su lugar y sus objetos.

Generalmente cuando se decide cruzar a nuestra mascota se tiende a evaluar el atractivo físico de su nuevo compañero, lo cual está muy bien para prever la belleza de la camada, pero es también importante indagar un poco en la salud del ejemplar y en la de sus antecesores, puesto que muchas de las afecciones que llegan a padecer los Cocker Spaniel son de carácter hereditario.

Otro de los aspectos a considerar si desea que la próxima camada sea tal como se planificó es que las perras todas, no solamente las Cocker Spaniel, no entienden de fidelidad, y mientras dure su celo puede llegar a permitir que otro macho la monte, poniendo en riesgo la homogeneidad en los nuevos cachorros, por lo que es conveniente extremar las medidas de cuidado y protección mientras  pasan estos días.

En fin, el tener cachorros en el hogar es algo totalmente tierno y esperanzador, pero también trae consigo sus responsabilidades y cuidados, tanto para los perritos como para su madre, la que ahora está en una condición diferente y sobreprotectora de sus chiquitines, por lo que hay que tratarla con el respeto que se merece.

Dieta y alimentación del Cocker Spaniel

Cocker-spaniel

La alimentación de un Cocker Spaniel va asociada principalmente a sus necesidades o requerimientos calóricos como resultado de su peso, tamaño, edad y desgaste energético, adicionando posibles patologías o condiciones hereditarias, las cuales serían evaluadas por un veterinario definiendo una dieta específica en caso de ser necesario.

Sin embargo, existen algunas pautas básicas que pueden aplicarse para todos los Cocker Spaniel variando levemente en función a su edad,  una de ellas es el suministro de agua potable, calculado en función a su peso, tipo de clima, trabajos o si está en estado de gestación, etapas en la que es necesario aumentar las dosis.

Por su parte existe el error de pensar que ellos se aburren de sabor y es forzoso variar los alimentos, cuando en realidad su necesidad de adoptar una rutina de por vida requiere que se le suministre la misma comida (una vez aceptada y que confirme sea la adecuada para su desarrollo) en el mismo lugar, a la misma hora y si es posible en el mismo tazón.

Otro aspecto general es la selección del tipo de alimento, en el que puede optar por establecer una dieta a base de comida casera o industrializada, en este sentido la casera tiende a tener ciertas deficiencias nutricionales ya que es difícil que su mascota consuma todos los ingredientes por igual, al contrario de lo que sucede con los piensos secos que vienen fabricados de manera homogénea y calculado en función a las edades de su perro, ofreciendo la posibilidad de establecer una ingesta completa de los elementos necesarios para su correcto desarrollo.

Asimismo el tipo de alimentación y cantidades que recibirá ira en función a tres etapas por la que pasa a lo largo de su vida, la de cachorro o infancia, la adultez y la vejez.

En la etapa de cachorro su mascota necesitará de la alimentación de la madre, una lactancia exclusiva los primeros meses y luego complementada con alimentos clase junior, con una buena dosificación de agua y suministro de vitaminas o complementos a discreción de su especialista.

Seguidamente, ya cuando su dentadura esté completa y fuerte, puede cambiarse a una alimentación para adultos, en la que se deben contemplar sus actividades físicas o requerimientos nutricionales así como la posibilidad de prevenir complicaciones a futuro, esta etapa es la más larga en la vida del Cocker Spaniel y donde usted podrá adecuar su rutina pensando en la longevidad y salud de su animal.

En esta dieta debe considerar que los alimentos que ingiera posean una buena cantidad de proteínas, grasas, minerales, vitaminas y ácidos grasos, ya que por ejemplo, las proteínas serán parte esencial en el crecimiento y formación de la musculatura y pelaje de su Cocker siendo ésta formada en gran porcentaje por este nutriente, su carencia es una causa evidente de la debilidad en su capa o incuso de sufrir padecimientos como alopecia, además su consumo le provee energía y favorece su sistema nervioso y su esqueleto, generalmente resultante de la ingesta de carne de pollo, pescado o cordero, así como de huevos.

En cuanto a los glúcidos, deben ser suministrados en la modalidad de azúcares de lenta digestión como los hidratos de carbono, en el caso de estar incluidos en un pienso industrializado su presencia viene registrada en un bajo porcentaje, pero en el caso de suministrarlos por la vía casera puede hacerlo a través de los carbohidratos de forma controlada, ya que no es sano eliminarlos por completo pues otorgan una buena cantidad de energía.

Por su parte los lípidos, aportan los ácidos grasos, necesarios para la correcta función celular, cuidando su pelaje, su piel, su hígado, su corazón y circulación sanguínea y hasta su fertilidad.

Por último es importante verificar que su dieta tenga la suficiente cantidad de vitaminas y minerales que ayudan en la absorción de los nutrientes y en el mantenimiento de su sistema inmunológico, evitando también la alta presencia de calorías que aunque no es conveniente eliminarlas por completo, normalmente contribuyen a problemas con su peso.

Quizás uno de los factores a considerar en la crianza y alimentación de esta raza es su tendencia a la obesidad por su deleite con la comida combinada con una pobre rutina de ejercicios, diagnosticándose cuando su Cocker supera su peso ideal en un 20% aproximadamente, para evitar tal problema es indispensable que siga estrictamente la dieta asignada y que el suministro de golosinas sea exclusivamente como refuerzo de algún buen comportamiento y no como parte de su nutrición.

Asimismo, debido a su estrecha convivencia con los hombres siendo criado generalmente con mascota de compañía, corremos el riesgo de sobrealimentarlo o darle de las sobras de comida para humanos las cuales pueden ser tóxicas para su organismo, suministradas incluso a deshoras, ocasionando problemas hormonales, respiratorios, musculares, cardíacos, entre otros, evidenciando la importancia de mantener cierta disciplina en su horario y régimen alimenticio.

Salud y cuidados generales

Cocker-spaniel

El momento de decidir adoptar una mascota, cualquier tipo de ellas, debe saber que adquiere una cantidad de responsabilidades que van más allá de alimentarlo y darle un techo, debe saber que es un derecho de su cachorro el ser tratado dignamente y recibir los cuidados adecuados para tener una larga y sana existencia.

Estos cuidados llegan a ser una responsabilidad de todos los miembros de la familia, quienes deben tener en cuenta que este animalito va a depender del amor y dedicación de todos, por lo que la decisión de adoptarlo no debe ser tomada a la ligera.

En cuanto a su higiene y belleza, tomar muchas medidas y valorar constantemente su estado nunca está de más, especialmente para un Cocker Spaniel cuyas características físicas requieren de cierto grado de manutención.

Estas medidas van asociadas al cuidado de su piel, pelaje, ojos, dientes, patas, a su cepillado, baño, vacunas y tratamiento médico en general.

Una de las actividades más frecuentes que va a necesitar su Cocker Spaniel es el cepillado, el cual debe hacerlo desde que es un cachorro para que se adapte y lo considere como algo normal en su rutina, para su comodidad puede acostumbrarlo a que se tumbe mientras lo cepilla, revisando primero con sus dedos que no tenga nudos, en caso de encontrar alguno sostenga su piel con una mano y con la otra procure desenredarlo suavemente.

Para ello puede usar un cepillo de cerdas gruesas y luego un peine metálico.

Otra actividad que también puede realizar con frecuencia es el cepillado dental, recuerde que la dentadura de su Cocker Spaniel es muy pequeña y tiende a acumular restos de comida provocándole sarro y mal aliento, por lo que acostumbrarlo a una higiene bucal desde cachorro es conveniente para su salud y bienestar.

En cuanto a su baño es importante aclarar ciertos malentendidos, pues los perros no son exactamente iguales a los hombres, ellos y especialmente el Cocker Spaniel posee una especie de aceite natural en su piel que lo protege de agentes externos, sin este aceite o grasa podría sufrir de irritaciones, alergias, caspa, incluso de alopecia, por lo que su protección y mantenimiento es vital.

Ahora con que regularidad debe dársele un baño a su cachorro Cocker, en realidad va a depender del nivel de actividad y contacto con el exterior que posea su cachorro el cual puede llegar a tener sólo polvo y su olor característico hasta aceites o elementos pegajosos.

Generalmente sus baños pueden esperar hasta unas seis semanas entre ellos, pero si su cachorro está muy manchado o la suciedad puede afectarlo podría considerar adelantar ese período evitando que se haga frecuente.

Este proceso debe hacerse relativamente rápido, con agua tibia y jabones especiales para perros los cuales vienen sin olores, antes de meterlo en la bañera es conveniente cepillarlo para desenredar los nudos y eliminar el pelo suelto, luego podría limpiar su lagrimeo con un algodón humedecido en agua solamente, nunca aplique jabón moviendo el algodón desde el lagrimal hacia la mejilla y luego proceder a la limpieza de sus oídos siendo preferible introducir un trozo de tela humedecido con aceite, limpiarlos suavemente y retirar la tela.

Una vez lo bañe, séquelo con una toalla para retirar el exceso de agua, inmediatamente puede aplicarle un secador con temperatura adecuada de forma que no le provoque alguna quemadura y cepillarlo nuevamente una vez esté bien seco para evitar que tenga nudos, además esto lo calmará un poco.

Entre otros cuidados mucho más esporádicos pero realmente importantes se encuentra su proceso de vacunación, el cual debe realizarse asesorado por un veterinario, el que indicará el calendario con el que debe suministrarle cada vacuna procurando cuidarlo de molestias como garrapatas, parásitos, pulgas, ciertos virus y otras afecciones.

Por su parte, su salud, es relativamente sana con algunas consideraciones a cuidar y aunque es un perro de pequeño tamaño es bastante fuerte y resistente, siendo necesario vigilar algunas condiciones que podrían ser hereditarias.

Uno de los principales problemas que padecen los ejemplares Cocker Spaniel se encuentra localizado en sus ojos, sufriendo de cataratas, glaucoma, o atrofia de retina, para los cuales es importante realizar un seguimiento con su veterinario de preferencia de manera de evitar que sufra de dolencias como la ceguera cuando se acerque a su vejez.

Otras afecciones hereditarias se asocian a su estructura ósea, pudiendo padecer de artritis, displasia de cadera o luxación de rotula, condiciones que se agravan si no se le vigila su peso ya que regularmente tienden a padecer de sobrepeso por su preferencia por la comida, lo que puede controlarse con una adecuada alimentación y ejercicios diarios.

Igualmente existe un síndrome muy asociado a esta raza, conocido como el síndrome de la furia, aunque la mayoría de los ejemplares no la padecen y sólo se han visto casos aislados especialmente en aquellos que son unicolor (aunque no es una condición excluyente) en la que se manifiestan comportamientos agresivos esporádicamente.

Por último, otro de los problemas que llegan a afectarlo va relacionado con sus orejas o sistema auditivo,  las que por ser tan largas pueden acumular suciedad causando otitis u otras infecciones, siendo en algunos ejemplares muy notable el desarrollo de sordera.

Cómo entrenar, educar o adiestrar un Cocker Spaniel

Si usted desea adoptar a un cachorro Cocker Spaniel le aconsejamos que lo adiestre, bien sea en un centro de atención especializada o si lo prefiere hágalo por su cuenta, pero debe tener en consideración que esta raza tiende a ser un poco indisciplinada cuando no está entrenado y que educarlo requiere de tiempo, paciencia y dedicación.

Sin embargo es altamente necesario entrenarlo para evitar conductas incómodas naturales en su condición pero que pueden adaptarse al estilo de vida de los humanos.

El momento para empezar a entrenarlo en firme sería a partir de los seis meses o más, antes podría ser una pérdida de tiempo puesto que su cachorro Cocker sólo piensa en jugar y jugar, quizás puede ir introduciendo algunos términos básicos como un sencillo “no” cuando lo encuentre mordisqueando algún objeto, de resto no se preocupe por comenzar tan pronto, déjelo disfrutar su infancia y cuando sea el momento adecuado puede comenzar con su educación.

Una vez que haya alcanzado la edad suficiente, es conveniente tener en cuenta ciertas pautas para asegurar los mejores resultados, entre ellos se pueden mencionar aquellos errores en los que caemos al momento de entrenar a nuestras mascotas en casa, como el perder la paciencia y gritarlo o agredirlo, el castigo de este tipo es una crueldad y está totalmente demostrado que no es efectivo, genera miedo en vez de aprecio y los Cocker Spaniel obedecen más a quienes más aman.

Otro método que tampoco es recomendado es usar collares de ahogo, palos o látigos de castigo ni ataques en general, lo mejor es trabajar bajo el refuerzo positivo, con disciplina y firmeza pero con cariño, dirigirse a él siempre en el mismo tono y con los mismos términos, no use sinónimos pues no los entiende, use un tono decidido y enérgico demostrándole que se es el líder pero que se le respeta.

Es importante tener en cuenta que la clave principal para asegurar una buena aceptación y cumplimiento de las órdenes y formar su conducta es la perseverancia, no se debe desistir ni bajar la guardia, de hecho el entrenamiento puede hacerlo entre tres a cuatro veces a la semana, preferiblemente a la misma hora y en el mismo lugar.

Para ello escoja un sitio tranquilo, donde su Cocker Spaniel no tenga muchas distracciones, mientras más privacidad tengan mucho mejor, asimismo asegúrese que su mascota haya gastado toda la energía posible antes del entrenamiento, no lo deje muy agotado pero si es aconsejable que corra, juegue, haga sus necesidades y esté menos excitado, para evitar que se desconcentre, recuerde que esta es una raza muy activa con tendencia a tomar sus propias decisiones y hacer aquello que más le llama la atención.

Aunado a ello, se debe considerar el clima del día, el cual debe ser tolerable ni muy frío ni muy caliente para evitar que se sofoque, una vez se tenga definido el lugar déjelo primero que olfatee y haga su reconocimiento inicial, entonces escoja con cual orden trabajará ese día, puesto que es conveniente trabajar una sola hasta que la haya entendido, siempre bajo el mismo término como “quieto”, “sentado”, “busca”, si no lo hace déjelo descansar y vuelva a intentar.

En este sentido, debe saber que usted puede demostrarle a su mascota cuando hace algo bien y cuando no lo hace, en el momento que cumpla con una orden felicítelo, acarícielo, dígale muy bien!, así se hace!, de manera de reforzar esa conducta, hay quienes usan premios como golosinas para perros o salchichas pero debe ser muy cuidadoso con el suministro de estos alimentos para evitar que su cachorro sufra de obesidad en un futuro.

Por otra parte cuando no cumpla con una orden o lo observe desobediente, dígale No!, con voz firme y comience de nuevo, un ejemplo de ello puede ser desde casa cuando lo encuentre mordiendo algún objeto del hogar, dígale No! Y retire el objeto, luego puede ofrecerle alguno de sus juguetes, si vuelve a hacerlo repita la operación, como verá la clave para el éxito es la paciencia y no la agresividad.

Generalmente estas sesiones de entrenamiento duran aproximadamente media hora, si llega a superarla procure darle un intervalo de descanso en el medio de unos quince minutos no más, tampoco se extienda hasta llegar a una hora, podría agotarlo, estresarlo y será más difícil que encuentre esta actividad como placentera, haciéndolo desobediente en algunos casos.

Con estas medidas puede llegar a tener una mascota bastante adaptada a sus costumbres y que respete en cierto modo las normas del hogar, pero recuerde que su Cocker Spaniel tiene una hermosa personalidad que no debe ser destruida u opacada por completo, la clave del entrenamiento es generar perros que puedan llevar una vida cónsona con el hombre pero que siga teniendo lo mejor de su temperamento.

Comportamiento del Cocker Spaniel con los Humanos

Las expresiones populares que refieren a que el perro es el mejor amigo del hombre, en realidad no son exageraciones ni slogans publicitarios, el perro puede llegar a ser en efecto el mejor amigo de su dueño y el más acérrimo protector de los miembros de su familia humana.

Aunque para lograr que esta mascota se adapte a nuestras vidas, es preciso entender que ellos no tienen la habilidad para comprender todo nuestro lenguaje hablado, en ningún idioma, aunque puedan ser entrenados a reconocer algunos sonidos cortos asociados a las expresiones con las que las acompañamos.

En este sentido, cabe acotar que la mayor habilidad que han venido desarrollando en su convivencia con los humanos y en su deseo por hacernos felices es la de leer en nuestro lenguaje corporal, en lo cual el Cocker Spaniel es un especialista, de hecho posee la capacidad de asociar cómo responder a algunas de nuestras expresiones para sensibilizarnos, por ejemplo, si descubre que estamos enojados o que se le está regañando puede usar alguna mirada tierna o alguna pose que nos guste para cambiar nuestro humor.

Esta ternura acompañada con lo amorosos que son con sus familiares puede tornarse un poco engañosa, ya que el Cocker Spaniel además de ser enérgico y juguetón posee un carácter fuerte combinado con una gran inteligencia, tendiendo a convertirse en un tirano si se trata de exigir las atenciones que él considera que se merece, por lo que además de darle cariño, debe tenerse mucha autoridad y liderazgo a la hora de educarlo.

Asimismo, esta raza manifiesta una adoración por estar siempre en compañía de sus dueños, llegando incluso a querer ser el centro de atención cada vez que puedan, por lo que dejarlos solos por mucho tiempo puede causar problemas en su comportamiento, sufriendo de ansiedad.

Cuando no está entrenado este problema se acentúa y hace que su temperamento se desvíe de lo normal, llegando a romper objetos, mordisquear, arañar y hasta ladrar excesivamente aún y cuando no son conocidos como los más ladradores, en efecto uno de los síntomas más evidentes de su necesidad de compañía es la de perseguir a sus dueños a donde quiera que éste se mueva, lo que le dará una alarma a tomar ciertas acciones con el propósito de hacerlo sentir mejor.

Entre ellas está la de evaluar su rutina de ejercicios, en la vida del Cocker Spaniel es primordial llevarlo a dar largos paseos todos los días, correr, jugar, practicar gimnasia y actividades que le brinden retos mentales, si usted o su familia no poseen el tiempo para darle a su mascota es probable que sea mejor que se decida por adoptar otro perro de alguna raza menos dependiente.

En cuanto a su comportamiento con los niños, se han visto amorosos hasta cierto punto, siendo necesario y responsable reconocer que no son tan tolerantes como se desea, pues sus gritos y juegos bruscos lo estresan, mostrando actitudes indeseadas, por lo que es conveniente mantener una estricta vigilancia cuando se encuentran juntos.

Por su parte, la gran mayoría de los ejemplares han demostrado ser muy posesivos con sus objetos o juguetes y llegan a ser agresivos si se les intenta quitar alguno de ellos, incluso se puede notar como aún y cuando están jugando o realizando otras actividades tienden a dar un vistazo a sus cosas constantemente.

En este orden de ideas se pueden incluir a algunos Cocker Spaniel, que han tenido problemas de agresividad, lo cual no es característico de esta raza puesto que en realidad son muy amorosos, pero hay algunos que si han desarrollado el síndrome de la furia, dando manifestaciones de ira espontáneas, los que estando tranquilos de la nada tienen arrebatos de rabia contra algo o alguien, durando estos episodios hasta diez minutos, dejándolos agotados y hasta desmayados.

Muchos especialistas y algunos estudiosos han estudiado la posibilidad de que esta condición se asocie con los colores de su pelaje, indicando que se muestra más porcentaje de afectación en aquellos que poseen un color sólido y más aún en el dorado y el negro pero no es una característica excluyente y aún se está investigando al respecto.

Asimismo existe otro aspecto que pudiera causar una percepción negativa sobre este animalito que aunque adorable puede llegar a tener problemas de sumisión, especialmente cuando empiezan su etapa de adultez, demostrándolo con constantes expulsiones de orina, es decir, el Cocker Spaniel que no ha sido entrenado micciona cada vez que le ganan sus emociones y reprenderlo no mejora las cosas.

Para ello y para evitar muchos de los inconvenientes con los que se puede encontrar este precioso perro siempre es recomendable entrenarlo, bien sea en casa o en algún centro especializado, de manera que fortalezcan todas las grandes bondades que posee y controlen algunos rasgos de su temperamento que llegan a ser problemáticos.

Entorno ideal

Al momento de definir cuál será la ubicación de su nueva mascota es necesario tomar en cuenta ciertas consideraciones además de cómo se llamará, cual tipo de alimentos va a ingerir o incluso que veterinario elegir y es la de en qué espacio dormirá y en qué espacio comerá, considerando que el cambio en su rutina no es muy recomendable por lo que puede llegar a ser una selección de por vida, o por lo menos la vida de su nuevo compañero.

Antes de ubicarlo le aconsejamos tomar en cuenta la evolución histórica del Cocker, sus antiguos trabajos, su temperamento y condiciones físicas, en especial la de su capacidad de micción involuntaria asociada a algunas de sus emociones, si no quiere que en su vivienda se encuentren este tipo de rastros de su mascota por doquier, que aunque puede ser controlado con adiestramiento es siempre una posibilidad latente.

Por su parte, el tamaño de su vivienda no es un inconveniente en ningún aspecto, ya que el tamaño y habilidad para adaptarse a las costumbres de la familia adoptiva del Cocker lo convierte en ideal para cualquier hogar, bien sea una granja, casa campestre, un amplio apartamento o un pequeño piso, todos son aptos siempre que le otorgue el tiempo de ejercitación necesaria.

Quizás un aspecto un poco particular que deba tener en cuenta al momento de definir o diseñar su entorno es que el Cocker Spaniel no tolera de buena manera los ruidos fuertes, o los trabajos rudos, lo que hace que se estrese fácilmente y pueda ser muy difícil educarlo para que se adapte y sea feliz en su nuevo hogar.

En realidad no existe un patrón determinado que defina donde ubicar a su nuevo compañero, lo que va a depender básicamente del estilo de vida que posea usted y su familia y de la cantidad y las edades que posean los miembros del hogar.

En este sentido sería importante considerar el tránsito en el hogar de manera de no convertirlo en un obstáculo en el paso regular o en alguna salida rápida, por ejemplo en un caso de emergencia, ya que puede causar accidentes a los humanos o ser muy lastimado con algún golpe, es posible que algún rincón que tenga buena visibilidad sea lo adecuado.

Considere también que el Cocker es muy sobreprotector de sus cosas, cuando tenga visitas y las acepte igualmente estará muy vigilante de su entorno y sus objetos, por lo que una continua mudanza y cambio de sus pertenencias no es recomendado.

Es pues cuando puede definir dos lugares, idealmente separados uno del otro, para evitar contaminaciones, uno para dormir y otro para comer.

En su espacio para dormir, el que eventualmente usará también cuando esté cansado o enfermo, puede equiparlo con una manta o fino colchón, y algunos juguetes específicos para perros, de hecho muchos de estos objetos son especiales para ayudarlos a calmar el picor y los malestares que origina el proceso de dentición.

Por su parte, en su espacio para comer es importante ubicarle un tapete absorbente o anti resbalante, el cual debe ser removido para su limpieza con frecuencia, una taza para servir el alimento y otra para el agua, la que debe ser cambiada al menos dos veces al día para asegurar su potabilidad.

En todos los casos también debe considerar que el Cocker Spaniel es propenso a sufrir de alergias en la piel y que posee un buen olfato, por lo que no es aconsejable que lave sus objetos con jabones o suavizantes perfumados, de lo contrario puede causarle malestares en la piel o incluso no querrá quedarse en el sitio seleccionado para él.

Existe otra posibilidad que aunque no lo parezca requiere de un poco más de atenciones y es la de criarlos en el exterior, ya que debe intentar controlar la mayor cantidad de elementos para proteger su salud física y mental, así como evitar que se extravíe o sea hurtado.

En este sentido, si usted posee un jardín o patio trasero y no desea que su mascota circule dentro del hogar puede optar por construirle una pequeña casita del material de su preferencia que le provea de un lugar limpio y seco donde pernoctar, puede hacerla techada y un poco elevada para evitar que se moje durante la lluvia, pero, aunque si bien es cierto que se adapta al clima, no es bueno dejarlo en el exterior en época de invierno y debe ser bien hidratado en el verano.

Asimismo debe procurar la limpieza de su jardín de manera de eliminar la maleza o podar los arbustos bajos y espinados para evitar que éstos le dañen sus ojos, sus patas o su piel, recuerde que el Cocker Spaniel puede ser muy activo y decidido e incluso puede llegar a ingerir frutos que le provoquen y causarle algún malestar estomacal.