Bolonka: Tu nueva mascota
El Bolonka es un perrito de compañía especial para ser adoptado por cualquier familia, pareja o persona que desee un compañero que lo haga feliz.
Es un can que proviene de Rusia, por lo cual tardó un poco en producirse puesto que por algún tiempo la crianza de perros estuvo regulada en ese país, en parte por restricciones económicas, siendo aceptadas las razas que realmente ayudaran a la economía o en el trabajo, como los ejemplares dedicados a la caza o los sabuesos, el resto de los canes más pequeños eran considerados como superfluos y no se les daba su debida importancia.
Afortunadamente estas condiciones cambiaron y a partir de una buena base formada desde las visitas de Napoleón el que traía desde Francia varios animales pequeños como el Bichón Frise, los Poodle Toy y el Shih Tzu, con los que pudieron luego realizar una serie de experimentos que dieron por resultado al Bolonka.
Una vez que se levantan las restricciones y que el Bolonka es empezado a ser reconocido como un perrito de compañía Ruso su popularidad comenzó a emerger dándose a querer rápidamente en la sociedad, haciendo que en un lapso de apenas treinta años se exportara por todo el continente europeo y hacia Estados Unidos, siendo reconocido incluso por el American Kennel Club en febrero del 2015.
Sus características físicas lo hacen ser un perrito muy atractivo, es pequeño, proporcionado y tiene un pelaje hermoso que varía en función a diversas mutaciones que tuvo la raza pero que son reconocidas todas por igual, sin embargo todos tienen un manto largo, sedoso y ondulado, teniendo la habilidad de expulsarlo en pocas cantidades pudiendo catalogarlo como hipoalergénico.
Su tamaño es pequeño llegando a medir entre los 17 cm hasta los 25 cm mostrando una ligera diferencia los machos de las hembras pues estos son un poco más altos y sus rostros tienen el pelaje distribuido de diferente manera formando barba y bigote de lo que las hembras carecen, son animales que en líneas generales pesan entre 4 a 5 kilos no siendo recomendable que se salgan por muchos gramos de este rango.
Idealmente deben vivir en el interior de las viviendas, no son animales para tener como protectores ni en el jardín, a excepción de su momento de juegos, pero logran desarrollar un temperamento bastante templado en el hogar, los que si son bien entrenados pueden respetar las normas que se les enseñen.
Son bastante dinámicos y juguetones, no son animales de permanecer en el regazo de sus dueños aun y cuando su nombre así lo indica, pueden tolerar cierto tiempo de cariños y mimos pero no resisten la necesidad de jugar y moverse así sea alrededor de sus dueños.
Es por ello que requieren de tiempo suficiente como para poder sacarlos a pasear una o dos veces diarias, no significando esto que sean incansables, de hecho pueden agotarse con su respectivo tiempo de entretenimiento, pero no es aconsejable mantenerlos en el interior todo el tiempo disminuyendo sus posibilidades de interacción.
Su entrenamiento es fácil y sencillo, ya que los Bolonka son dóciles e inteligentes, aprenden rápido y repiten todo cuanto les agrada, pudiendo educarse por sus propios dueños con un mínimo de experiencia, sólo se requiere hacer uso de técnicas basadas en el refuerzo positivo generando excelentes resultados, lo que demuestra que estos animales no son propensos a tolerar malos tratos ni amenazas ni gritos.
Son geniales con los niños, pueden compartir sus juegos siempre que sean en la medida de sus limitaciones o posibilidades, es decir, no pueden jugar a ser el caballito por ejemplo ya que su pequeño cuerpo no lo resiste, pero están muy dispuestos a permanecer con ellos, acompañarlos y hacerlos respetar si es necesario.
No son para nada agresivos y en realidad son muy poco temerosos, tienen una especie de confianza en todos tanto humanos como animales que los hace ser muy sociables, pero se ha de tener especial cuidado pues consideran que es lo mismo jugar con perros de su tamaño o con otros más grandes.
Una de las características más fascinantes de esta raza de perro es su estrecha relación con sus dueños, a quienes de verdad llega a amar y respetar de tal manera que incluso cuando ya entra en una etapa de edad avanzada y siente que su organismo se debilita hacia su punto final, éste se aparta un poco de su amo para evitar causarle un gran sufrimiento al momento de su partida.
Hoy en día el Bolonka es conocido en muchos países de Europa y comienza a darse a conocer en Estados Unidos de América pero ya tiene sus buenos admiradores por su excelente temperamento y agradables condiciones físicas, es netamente una mascota de hogar el cual sin duda es muy capaz de retribuir todo el amor que su amo le da.
Historia y Origen del Bolonka
El desarrollo inicial del Bolonka no está bien definido aún, pues en los registros no data una fuente específica que realmente indique el momento donde fue cruzado o el lugar en el que se realizó, pero se tiene conocimiento de que sus ancestros fueron los ejemplares de la raza Bichón Frise los que fueron llevados desde Francia a Rusia a comienzos del siglo XVIII.
Estos perritos franceses fueron llevados en las expediciones de Napoleón Bonaparte los que, en aquella época era muy común que fueran regalados a otros reyes o a la nobleza en general como modo de hacer las paces o de alagar al homenajeado, por lo que eran muy bien recibidos.
Es así como llegan a Rusia los ejemplares que se convertirían en los ancestros del Bolonka, como parte de un regalo proporcionado a la nobleza a finales del período renacentista. Pero cuando parten las tropas ya habían llegado muchos otros ejemplares de otras razas que también tuvieron una leve participación en la formación del Bolonka, como los pequeños Shih Tzus o los Terrier de Yorkshire que poseían el pelaje largo, logrando crear una base bien sustentada de razas.
Sin embargo, hay otras fuentes que aseguran que el Bolonka Francés fue llevado como tal a Rusia ya desarrollado y que también fue parte de un regalo enviado por el rey Luis XIV de Francia, aunque lo más popular es que lo que llegó a ese país en esa época fueron sus ancestros y que el Bolonka es en realidad Ruso naciendo a inicios del siglo XIX como raza.
Lo cierto es que también se tiene certeza de que luego de la llegada de la diversa cantidad de especies, los aficionados Rusos se dedicaron a comenzar a hacer cruces de manera de preservar a los perritos de tamaño pequeño o perros de compañía, pues este país no estilaba criar animales de este tipo ya que no eran propicios para el desarrollo de su economía ni ayudaban en los trabajos, siendo ideales los cazadores y los sabuesos pero no los toy, y no es hasta la década de 1960 cuando se eliminan las restricciones en la crianza de los perros que logró que se convirtieran en razas raras y prestigiosas, dando como resultado otras igual de bellas.
Sin embargo, el Bolonka seguía siendo parte de cualquier raza pequeña derivada de los Poodle pequeños, los Shih Tzu y los Bichones Franceses, siendo reconocidos como una raza Rusa a partir del 1966 a los que se les llamo Tsvetnaya Bolonka causando más interés en la comunidad en general luego de la caída de la Cortina de Hierro en la que empieza a crecer en renombre y popularidad como uno de los mejores perros Rusos de compañía.
Con el tiempo ya el Bolonka era un animal muy aceptado pero se distinguía que se diferenciaban entre ellos un tipo que no tenía manchas y era blanco y otro más colorido que provenía de otras combinaciones diferentes logrando entonces dividirlas en las dos variaciones pero llamándolos a ambos Bolonka que se refiere a la traducción “Russian Colored Lapdog”.
Su existencia en el mundo aún no es muy reconocida debido a que no es hasta el año 1978 que comienza a ser exportado pues anteriormente esta práctica estaba muy regulada llegando algunos pares del Franzuskaya Bolonka hacia Alemania pudiendo comenzar a desarrollarse la especie en ese país a partir de la década de los 1980, pero allí se le dio al Bolonka un reconocimiento como una derivación del Bichón Boloñés que se había rescatado e importado desde Bolonia siglos antes.
Por su parte los Bolonka siguieron siendo exportados a varias regiones de Europa, donde cada país recibió una pequeña cantidad de ejemplares a partir de los cuales han logrado establecer la raza formando grupos bastante aceptables. Siendo luego de los 1980 conocidos en todo el continente Europeo y nombrándose con sus diversas acepciones, bien sean los Bolonka Zwetna o los Deutscher Bolonka producidos en Alemania y los Barevny Bolonsky Psik en la República Checa, pero siendo todos provenientes de la misma línea y siendo aceptados como una misma raza.
En cuanto a su presencia en el continente americano no es hasta 1999 y casi hasta el año 2000 que llega a ser exportado hacia los Estados Unidos, donde fueron especialmente aceptados por su excelente temperamento y tamaño apropiado para las grandes ciudades, logrando ser reconocidos por las organizaciones y Federaciones caninas más prestigiosas como la American Kennel Club que lo acepta a partir de Febrero del año 2015.
Un aspecto poco divulgado pero que da a ver lo interesante que se ha vuelto esta raza es que el Bolonka se ha ganado de tal manera el corazón de quien lo observa que forma parte de las mascotas reales del Príncipe William de Inglaterra y de su esposa Kate Middleton.
Características de la raza
Apariencia General
Estos canes han sido desarrollado esencialmente para desenvolverse como perros de compañía por lo que sus características físicas fueron buscadas tratando de conseguir un animalito compacto, pequeño, bien proporcionado, con facciones lindas y amigables, es ligeramente más largo que alto pero bien balanceado.
Su expresión y composición física demuestran la dulzura de su temperamento, su inteligencia y buena disposición.
Tamaño
Para poder obtener una estandarización en cuanto a su tamaño se estableció una media aproximada en las alturas de varios Bolonka en cualquiera de sus variaciones determinando que efectivamente hay una diferencia entre los machos y las hembras en este aspecto, detallada de la siguiente manera:
Las hembras miden entre 17cm hasta los 26 cm, medidas desde el borde de las patas delanteras hasta la cruz.
Los machos miden entre 18 cm hasta los 27 cm, tomando en cuenta la misma posición que para las hembras.
Esto hace que en líneas generales los Bolonka midan entre 17 cm los más bajos hasta los 27 cm los más altos.
Peso
Igualmente el peso se estandarizó de la misma manera que como se hizo con su tamaño, organizándolo así:
Las hembras pueden pesar entre los 4 kilos hasta aproximadamente los 5 kilos, peso completo sin condiciones adicionales como el embarazo.
Los machos pesan entre los 4 kilos hasta los 5 kilos o un poco más.
Cabeza
El cráneo de los Bolonka se muestra levemente redondeado, con una superficie semiplana en la zona superior si se ve de frente, la cabeza es pequeña y bien proporcionada al cuerpo.
Región facial
El rostro de los Bolonka es muy agradable, su hocico es pronunciado demarcado con un stop bien definido, con poca demarcación del surco frontal, sus labios son pequeños y apretados y la mordida es exacta en forma de tijera con dientes pequeños, al tener la boca cerrada los dientes no se ven.
Trufa
La nariz de los Bolonka es pequeña con las ventanas visibles desde el frente, se ubica por debajo de la zona central del rostro en el extremo inferior del hocico, es ligeramente más grande en proporción que le tamaño de sus ojos y su color varía en función al color de su pelaje, muchos ejemplares la poseen en tono negro sólido pero otros tienen tonos marrones con leves despigmentaciones aceptadas por las federaciones que han estandarizado a la raza.
Ojos
Estos perritos tienen los ojos ubicados en forma ligeramente oblicua, pero ellos en sí son bastante redondos y de tamaño mediano, el tono del iris es variable entre miel y marrón oscuro y poseen un delineado que se difumina en su alrededor siendo casi siempre en el mismo tono de la nariz, lo que marca una combinación con el color de su pelaje también.
Su expresión es demasiado dulce, mirarlo a los ojos es querer abrazarlo, pero también denota su inteligencia y su sentido de alerta.
Orejas
Las orejas de los Bolonka tienen una inserción alta a los extremos del cráneo haciendo que se vea un poco más ancho de lo que en verdad es, son de forma de trapecio con la parte más delgada pegada al cuerpo y todas las puntas redondeadas, son de tamaño mediano y rígidas en la base, colgando natural y suavemente, son bien cubiertas de pelo y en las tonalidades del pelaje combinadas con gris y blanco son plateadas, de resto mantienen el mismo color de la capa.
Cola
La cola de los Bolonka es pequeña y bien cubierta de pelo muy vaporoso que las hace ver un poco difuminadas, pero en realidad son finas y las mantienen en forma curva tocando su espalda.
Pelaje
Los Bolonka en cualquiera de sus variaciones poseen un bello pelaje que se muestra en forma de ondas o rizos grandes y sedosos, su manto es muy denso y apretado, es brillante y suave al tacto, en casi todo el cuerpo se presenta de la misma longitud con algunas zonas más largas que otras, de hecho los machos se distinguen de las hembras pues poseen barba y bigotes.
Poseen una capa interna bien desarrollada fina y pequeña que protege sus aceites naturales, la externa es también muy resistente y no se cae con frecuencia por lo que se considera un animal hipoalergénico.
Color
Los perritos Bolonka tienen una variación dentro de la misma raza que se distinguen básicamente por el color de su pelaje, siendo unos los “Bolonka Franzúskaya” los que son exclusivamente blancos sin manchas ni diversas tonalidades y los otros son los “Bolonka Zwetnaya” que se presentan en varios colores pudiendo ser negros, marrones, plateados o rojos, incluso los hay bicolores con combinaciones más comunes como los negro con marrón claro, marrón claro y café tostado, o algunos que tienen manchas blancas siempre que no excedan el 20% de su cobertura total.
Movimiento
Su andar es despreocupado, suave y con buen desenvolvimiento, lleva la cola elevada cuando se encuentra alerta.
Comportamiento con otros perros
El Bolonka es un animalito muy seguro de sí mismo, es divertido juguetón y buen anfitrión, normalmente no es temeroso de otros perros a menos obviamente que haya tenido encuentros desagradables que lo hayan marcado, por lo que se recomienda que pase por un proceso de socialización monitoreada para evitar que se afecte su temperamento natural.
A pesar de ser un perrito más dispuesto a estar con los humanos su comportamiento con los perros es natural y correcto, sobre todo si ha sido educado, así como también puede tener buenas relaciones con otros animales siempre que no note que le ha robado la atención que le corresponde, pues a veces son un poco celosos de sus dueños.
Socialización con otros perros
El Bolonka normalmente tiene un buen comportamiento con otros perros, de hecho se ha visto que no han mostrado una reacción negativa o temerosa ante canes de mucho mayor tamaño, lo que no es muy conveniente porque si debería tener cierto instinto de protección sin llegar al miedo, siendo posible enseñarle desde pequeño.
Esta socialización lo introduce en el comportamiento canino, del cual podrá inferir como es el proceso de reconocimiento inicial y la fuerza que se aplica en sus juegos, también sabrá que no debe temer de aquellos animales que lo visiten y que debe tener cierta precaución con otros.
Pero lo más importante de toda esta etapa es que su contacto sea vigilado y si es posible previamente conversado con los dueños de las otras mascotas para constatar que también hayan sido educados y no vayan a causarle algún daño, susto o trauma futuro a su Bolonka, que pudiera impresionarse fuertemente en sus primeras semanas de vida.
Los juegos con otros perros
El Bolonka en realidad no tiene edad para el juego, de cachorro es un perro mordelón y entretenido que jugará sin distinción con cualquier otro animal pero que debe ser educado para aprender a tener cierto respeto por las razas más grandes que pudieran hacerle daño.
Cuando llega a la adultez su comportamiento es básicamente el mismo que de cachorro, ligeramente más controlado, especialmente si se encuentra en interiores, pero en el jardín o en los parques será igual de activo, por lo que se debe tener cuidado de verificar que el sitio esté limpio y libre de objetos punzantes o peligrosos.
No tiene instinto de caza desarrollado por lo que además de perseguir alguno que otro insecto no tendrá problemas con el juego con animales pequeños y mucho menos si es socializado con ellos también.
Apareamiento del perro Bolonka
El control sobre este aspecto irá referido en gran parte a los deseos de los dueños de la perrita Bolonka, los que podrán hacer una planificación adecuada en caso de que deseen mantener la pureza del linaje y contribuir a conservar la especie lo más estandarizada posible o si se desea realizar cruces con otros tipos de perros, para lo cual es aconsejable acudir a un especialista, bien sea veterinario o genetista canino, de manera de evitar que los cachorros le hagan daño a la madre, ya que las Bolonka son pequeñas y cruzarla con animales grandes, por ejemplo, es muy perjudicial.
Entre estos aspectos a planificar se encuentra la selección del compañero, del que además de evaluar las características físicas también se debe saber si padece de enfermedades hereditarias, muchos dueños de estos animales prefieren inscribirlo en las asociaciones de la raza y allí se pueden encontrar buenas opciones, otro aspecto es determinar el paradero de los cachorritos pues ante todo se debe ser responsable y garantizar que la camada tendrá una vida de cuidados y amor.
Por su parte, las perritas Bolonka pueden gestar a partir de su segundo ciclo de sangrado, momento en el que pueden ser cruzadas con la pareja escogida, este proceso es tan natural como para otros perros por lo que se recomienda dejar que la naturaleza actué por si sola y no intervenir hasta que se hayan separado.
Una vez que su perrita se encuentre en cinta deberá acudir a un veterinario para que mantenga el control de sus valores nutricionales y hormonales, su peso y necesidades en vitaminas, además de monitorear el crecimiento y cantidad de los cachorros, los que normalmente suelen ser entre dos a cuatro perritos por proceso, pero se han dado casos en los que al ser cuatro o cinco se debe tener que practicar una cesárea pues las Bolonka tienen complicaciones durante partos muy numerosos.
El resto del proceso requiere también de más cuidados, tanto para la madre que ahora se encontrará en proceso de lactancia y un poquito susceptible y sobreprotectora como para los cachorritos que en el ideal deberán permanecer con ella casi los dos meses mientras se alimentan y están listos para partir a sus nuevos hogares.
Dieta y alimentación
El Bolonka es un perrito pequeño, pero con mucha energía lo que hace que su organismo digiera rápidamente los alimentos, por lo que es ideal no sobrepasar sus límites y administrar sus raciones en función a una buena nutrición y desenvolvimiento de sus órganos, lo que se consigue dándole dos o tres porciones de comida al día, pero en pocas cantidades, asegurando que quede satisfecho cada vez.
Lo mas recomendable al respecto es que lleve a su Bolonka a un especialista en nutrición canina o a su veterinario el que dependiendo de su progreso o estado de salud indicará cual es la mejor metodología en su alimentación y cual es la dosis diaria que debe consumir.
Además, esta dieta no es la misma para toda su vida pues el Bolonka pasa por un proceso de maduración física que exige una ingesta diferente en cada etapa, siendo la primera de ellas la fase en la que es apenas un cachorro, en la que idealmente se debe esperar al menos dos meses hasta separarlo de su madre, permitiendo en ese tiempo que absorba todos los nutrientes y beneficios que otorga la leche materna.
Ese proceso de lactancia es muy valioso especialmente para cachorros tan pequeños como el Bolonka, que necesita de la protección e inmunización temporal que le genera la leche hasta que pueda pasar por su debido proceso de desparasitación y vacunación.
Una vez que es destetado puede darle papillas hasta que su dentadura esté lo suficientemente fuerte y desarrollada pasando entonces a la alimentación de adulto, fase en la que requiere de una dieta combinada entre proteína, vegetales y carbohidratos.
El Bolonka, aunque es carnívoro no puede consumir exclusivamente proteínas pues necesita de la energía que le aporta la glucosa de los hidratos de carbono y de los nutrientes y vitaminas que obtiene de los vegetales.
Al respecto puede usted seleccionar cualquier tipo de modalidad en la ingesta del Bolonka ya que le viene bien tanto la comida casera correctamente preparada como el pienso o croquetas empacadas siendo necesario que cualquier versión contenga los porcentajes adecuados para su buen desarrollo, crecimiento y mantenimiento.
Comida casera
Esta tipología tiene sus ventajas y sus desventajas, en parte porque se puede tener el control estricto de lo que consume su mascota, así como de las proporciones y la calidad de los insumos y en parte porque requiere de tiempo de planificación en compras y tiempo de preparación, pero aun así es muy apreciada por una gran cantidad de dueños que prefieren inspeccionar directamente que es lo que consume su Bolonka.
Sin embargo, se debe tener bien claro que los animales de esta raza por su tamaño y el de sus órganos no tienen la misma capacidad de digestión que muchas otras y mucho menos que la de los humanos, por lo que la preparación de sus alimentos debe ser de lo más sencilla y natural posible.
En este sentido es necesario evitar el uso de algunos ingredientes como la sal, el vinagre, ajos, pimienta, salsas preparadas o aceites, tratando de producir los alimentos con sus sabores originales bien sea cocidos, al vapor, asados o hasta horneados, pero siempre evitando agregar ningún tipo de especias las que además tienden a ser aromatizantes y afectan directamente al olfato del Bolonka.
Por su parte no se preocupe en mantener un menú muy variado o llamativo, estos animalitos son bastante fáciles de complacer y la repetición de lo que ya ha aprobado es muy agradable para ellos, sólo cerciórese que además de ser alimentos preparados de manera saludable no tengan presentaciones muy grandes y sean de fácil mordida considerando el tamaño de su boca y de sus dientes.
Croquetas
Este tipo de alimentos otorga muchos beneficios a los dueños de los cachorros y a ellos mismos pues es muy cierto que elimina todo el proceso de planificación de compras para recrear el menú adecuado ciñéndose a la correcta escogencia de una marca en la que sólo se debe verificar en el empaque que tanto los porcentajes como los ingredientes sean los adecuados y que en el caso del Bolonka haya la combinación ideal antes mencionada.
Además, tiene el beneficio de que en la misma croqueta se encuentran distribuidos los elementos de manera más homogénea, garantizando que su perrito ingiera todo lo que realmente necesita sin distinción de lo que más le gusta o no.
Por su parte, aquellos piensos secos cuyas croquetas son pequeñas son las más recomendadas para los ejemplares de esta raza pues además de no molestar en su boca y permitirles una correcta masticación no se quedan pegados en sus dientes generando sarro o halitosis.
El proceso de transición
Esta es una etapa en la que se trata de pasar al animal de un tipo de alimentación a otra, pero para el Bolonka no es muy sencillo pues son rutinarios y muy apegados a sus costumbres y va a requerir de un pequeño proceso donde vaya modificando poco a poco sus platillos hasta que pueda ingerir el nuevo estilo o la nueva marca sin mortificarse.
Salud y cuidados generales
Revisión manual
Una de las acciones que puede tomar para ayudar a su Bolonka a mantenerse limpio y saludable es la de revisarlo diariamente, esta es una actividad sencilla donde lo sostiene en sus brazos y acariciándolo le detalla las orejas, patas, el lomo, la cola, tratando de verificar que no haya adquirido ningún parásito o eliminando suciedad del jardín como hojitas o semillas, las que a veces tienden a incrustarse y causan infecciones.
Además, en esta revisión puede prevenir que se le formen nudos en el pelaje eliminándolos con sus dedos suavemente, trate que todo este proceso sea placentero para su Bolonka considerando que en muchas ocasiones no es muy factible hacerlo quedar quieto por mucho tiempo.
El cepillado
El Bolonka tiene unas características en su manto que hace necesario que sea cepillado diariamente o al menos con un día de descanso, lo que le ayuda en primer lugar a mantenerlo lo más limpio posible retrasando un poco el momento del baño, le ayuda también a mantener su pelo desenredado y con brillo y suavidad, por lo que no se trata de una actividad de belleza exclusivamente sino también de aseo.
Para ello deberá evitar los cepillos de cerdas plásticas que rompen el pelo del Bolonka y las puntas cuadradas o en picos dañan su piel pudiendo causar infecciones especialmente si se aplica con mucha fuerza, por lo que lo mejor es usar cepillos de cerdas naturales y puntas ovaladas, no muy amplios para que puedan pasar por el pequeño cuerpo de su mascota.
Los baños para el Bolonka
A pesar de la mucha necesidad que estos perritos pueden llegar a presentar en función a recibir un baño frecuente siempre es preferible prevenirlo ya que esta actividad realizada muy seguidamente puede irritar la piel del Bolonka y eliminar las grasas naturales que lo protegen incluso de enfermedades, por lo que en ocasiones es conveniente recurrir a los baños en seco que se basan en la aplicación de polvos que eliminan la suciedad y dejan buen olor sin necesidad de remojarlo.
Sin embargo, siempre es importante aplicar uno al menos cada seis semanas, procurando que sea rápido y efectivo, tratando de que todo su cuerpecito quede súper limpio y sin tocar su rostro.
Para ello puede recurrir a los salones especializados en limpieza canina o hacerlo desde su hogar previniendo la selección del lugar de manera que sea manejable y que pueda controlar a su cachorro, siendo ideal una bañerita pequeña que pueda colocar a buena altura o en la tina, tratando también evitar que el espacio tenga mucha ventilación para que su Bolonka no se refríe.
Al hacerlo asegúrese de usar agua templada, y hablarle con buen ánimo constantemente, no lo regañe ni lo amenace, tenga paciencia y muestre su control emocional, esto le ayudará a que su mascota se calme también, pero no demore mucho, haga cada paso concienzudamente, pero lo más rápido posible.
En tal sentido debe en primer lugar cepillarlo bien, luego desde la tina o bañera mójelo con abundante agua tratando de empaparlo, es normal que intente escurrirse pero vuelva a mojarlo, no tarde mucho para aplicar el champú, que debe ser un producto exclusivamente canino, los hay para todo tipo de pelo, sin olores ni acondicionadores, refriegue bien el pelaje y luego saque el jabón varias veces, incluso cuando ya crea que no tiene nada puede volver a mojarlo, esto es importante pues los restos del champú dañan la dermis del can y además contribuyen a que aparezcan los malos olores rápidamente.
De nuevo su Bolonka tratará de sacudirse y permítale hacerlo, no lo reprenda esta es una reacción natural que lo tranquiliza, séquelo con una toalla limpia sin olores y luego aplique el aire templado del secador asegurándose que no le quede nada de humedad.
Peluquería canina para el Bolonka
Por ser una mascotica muy apreciada por sus dueños el Bolonka tiende a ser llevado frecuentemente a la peluquería, siendo muy beneficioso siempre que los cuidados que tenga vayan ajustados a su protección y salud, evitando cortarle demasiado el pelo ya que esto le afecta su capacidad de soportar el frío y le desajusta su nivel de entendimiento del entorno, siendo recomendable solo cortarle lo necesario como los flequillos que cubren sus ojos.
La salud del Bolonka
Debido a lo joven que es la raza todavía no se ha realizado un registro formal donde se aseguren las posibles enfermedades que pueden padecer ni se ha establecido si algunas son hereditarias o no, pero algunos dueños de estos cachorros han reportado que sus mascoticas han sufrido de displasia de cadera, luxación de la rótula, tiroidismo y algunas otras enfermedades muy comunes en perritos pequeños como el Bolonka.
Sin embargo, a nivel general son muy sanos, siendo muy importante protegerlos con su proceso completo de vacunación, para evitar que sean afectados por los virus regulares que se acercan a él, de resto son muy capaces de vivir hasta los 13 o 15 años.
Cómo entrenar, educar o adiestrar un perro Bolonka
El Bolonka es un cachorro tan entretenido y a la vez tan dócil con los humanos que se convierte en una muy buena mascota dispuesta a alegrar el día de quien tiene a su alrededor, pero aun así es muy fácil de entrenar debido a su inteligencia y obediencia, sólo hace falta demostrarle que aunque se le quiere y se le respeta usted es su línea de mando.
En tal sentido se puede escoger entre llevarlo a algún lugar de educación canina especializada o hacerlo por su cuenta en su hogar y más aún si ya ha tenido cierta experiencia.
Estilo de entrenamiento ideal
Este animalito tiene un temperamento muy dulce pero no es muy bueno respondiendo a las técnicas estrictas de educación en la que se les grita, ofende o amenaza, por lo que lo ideal es aplicar un entrenamiento sustentado en el refuerzo positivo con cualquiera de los elementos que se tiene a disposición para su uso.
Entre ellos se puede mencionar al más sencillo pero más efectivo y es el amor recibido a cambio de obedecer, una caricia, una felicitación es tan importante para el Bolonka como cualquier tipo de golosina.
Edad adecuada para comenzar a entrenarlo
El Bolonka es un cachorro muy divertido, en su mentecita de infante sus pensamientos sólo están abocados a jugar y distraerse viendo en todos y en cualquier cosa alguien o algo propicio para jugar, por lo que seguramente comenzar una rutina de entrenamiento en sus primeros meses es prácticamente tiempo perdido.
Así que es preferible que le permita pasar su infancia jugando y aprendiendo con la cotidianidad las reglas del hogar, hasta que madure lo suficiente como para capturar su atención diariamente en la práctica de las lecciones, lo que ocurre más o menos cuando su Bolonka tiene cinco meses de edad, hay algunos ejemplares adelantados que han podido iniciar a los cuatro meses.
Recuerde que estas enseñanzas se deben dar en orden de complejidad, empezando desde las más básicas hasta las más complejas, pudiendo terminar su etapa de educación a poco más de un año de edad de su Bolonka sobre todo si no va a incluir lecciones avanzadas como prácticas de deportes que no son aptos para su tamaño y contextura.
La socialización para el Bolonka
A pesar de que el Bolonka no es un animal con tendencia a la timidez ni a la agresividad su conducta se formará de mucha mejor manera si se le socializa a tiempo, estos cachorros desarrollan la percepción del exterior y entienden cómo es el contacto con los demás desde sus primeros días por lo que mientras más se pueda acercar a los humanos en esa etapa mucho mejor será para él.
En este sentido es saludable dejar que tanto sus familiares como amistades y vecinos tengan contacto directo con él, que lo llamen por su nombre, lo acaricien, jueguen con él y así pueda comenzar a diferenciar en las edades de los humanos, saber que los niños son más juguetones o más bruscos en algunos casos y poder desarrollarse sin temores a desconocidos.
Sin embargo, esta etapa de socialización debe ser monitoreada, en la que sepa que quienes lo tendrán en sus manos le darán buen trato y no le dejarán ningún trauma a futuro.
El contexto del entrenamiento
Cuando su Bolonka tenga la edad adecuada entonces podrá comenzar con las prácticas, las que se recomienda se hagan en un lugar íntimo y cerrado, en el que no haya objetos punzantes ni arbustos bajos con espinas, así como obstáculos o elementos peligrosos.
Asimismo, debe evaluar las condiciones del clima de cada día teniendo en ocasiones que quedarse en el interior por lo que si se pudiera tener un espacio en el hogar donde aplicar estas enseñanzas en estos casos puntuales sería mucho mejor para no perder la continuidad.
Sin embargo, antes de comenzar con cada rutina es conveniente llevar al Bolonka a pasear, donde juegue moderadamente y agote el exceso de energía acumulada del día anterior, pero no lo suficiente como para que esté tan cansado que prefiera reposar, esta actitud la irá notando poco a poco mientras más interactúa con él.
El día a día con el Bolonka
El Bolonka es un perrito muy inteligente que llega un momento en el que sabe que puede ser el consentido y pretenda hacer y deshacer a su antojo, por lo que siempre se debe estar vigilante de que cumpla con todas las reglas y ordenes que se le han enseñado, evitando dejar pasar cualquier transgresión.
Una vez que viole alguna enseñanza y no sea reprendido con el mayor respeto y paciencia posible entonces pretenderá hacerlo siempre, así que aunque provoque ser tolerantes y le pongan ojos de inocencia no puede bajar la guardia y ser siempre amorosos pero disciplinados con él.
Comportamiento con los Humanos
El Bolonka es un animalito muy familiar y que necesita vivir en contacto con los humanos, por lo que su felicidad se basa en ser adoptado por un hogar que esté dispuesto a compartir su tiempo con él, aunque bien es cierto que al nacer todo su entorno gira alrededor de su madre y el descubrimiento de la vida con sus hermanos una vez que es separado de ellos desvía sus sentimientos hacia su nueva familia.
En esta nueva asociación los humanos pasan a ser su camada y su dueño es el nivel máximo de amor y respeto para él, pero cachorro al fin necesita que se le muestre un toque de liderazgo de manera que entienda que debe obedecer a lo que se le pida.
La comunicación con él
Como todo perrito el Bolonka no posee la capacidad de entender que es lo que se le quiere decir en los términos humanos, pues nuestro lenguaje no significa nada para el más que algunos sonidos, por lo que conversar como estamos acostumbrados a hacerlo no es algo efectivo, y esto no es indicativo de falta de inteligencia, simplemente su composición auditiva y cerebral no descifran el idioma humano así como tampoco pueden volar, por ejemplo.
Sin embargo la necesidad en general de los perros de comunicarse con los humanos hizo que adquirieran otras habilidades entre la que desarrollaron una excelente capacidad de observación especialmente de nuestros gestos, habilidad que el Bolonka ha adquirido de la mejor manera y que ha podido explotar por su continuo contacto con los humanos, haciendo que prácticamente no se necesite hablar.
Por su parte también han podido contrastar que es lo que sentimos en nuestro tono de voz y gestos lo que hace que si se combina cada vez que le repetimos una misma palabra puedan asociar algún significado, por ejemplo “no” debe decirse en un tono seco y con el rostro serio, sin gritos ni exageraciones, “bien hecho” con una sonrisa y en tono alegre, preferiblemente usando términos cortos y repetitivos.
Es muy probable que en ocasiones no se tenga que hablarle a si Bolonka para que el entienda algunas situaciones, como cuando está triste por ejemplo, momento en el que su mascota va a procurar alegrarlo o consolarlo.
La comunicación con el Bolonka por lo tanto es bastante sencilla, basad en términos repetitivos asociados a expresiones corporales sin sobre actuar ni ocultar emociones.
Comportamiento con los niños
El Bolonka es divertido y juguetón por lo que se desenvuelve estupendamente con los niños, se distrae con ellos, juega hasta el cansancio y los respeta infinitamente, los aprecia y ladrará en su defensa si es necesario, es un buen amigo, imitador y a veces con un toque de payaso para hacerlos reír.
Su tolerancia hacia ellos será mejor definida desde su proceso de socialización, en el que entienda que son los niños y aprenda que no todos ellos tendrán el hábito de halarle las orejas o la cola, así como de saber que no lo hacen por lastimarlo, también aprenderá que algunos lo van a respetar y otros llorarán sin que sea necesidad de asustarse por ello.
Al respecto es valioso recalcar que se debe procurar educar a los niños desde la llegada del cachorro, los Bolonka son especialmente pequeños y por su atractivo pueden causarle frenesí o pretender tratarlo como un juguete, deben entender que no tienen la fuerza para llevarlos a caballito y que no deben halarle el pelo, así como comprender que hay algunas reglas que también deben respetar para que su mascota viva mucho tiempo con ellos y sean saludables, como el no darles de comer sin la supervisión del adulto.
Estilo de vida que necesita
El Bolonka definitivamente tiene su mejor desenvolvimiento como mascota de hogar o perro de compañía si así prefiere llamarlo pero necesita de familias que tengan tiempo suficiente para dedicarle pues su carácter puede controlarse por algún tiempo y necesita salir diariamente e incluso un par de veces cada día para ejercitarse, correr y jugar.
Puede desenvolverse muy bien en familias grandes o pequeñas, con niños o sin ellos, así como con ancianos pero con la condición de que le otorguen su tiempo en el jardín o en algún parque.
Trabajos para el Bolonka
Hasta la fecha no se tiene ningún aval que indique que el Bolonka haya participado en algún trabajo o colaboración con las actividades económicas o sociales de los humanos, pues ha sido desarrollado más como perro de compañía y mascota de hogar, incluso su tamaño no le permite hacer muchas actividades que bien pueden hacer los perros más grandes.
Sin embargo esto no es un punto en contra pues como animal de compañía es muy apreciado y distinguido, realiza muy bien sus funciones y tiene un carácter bien templado en el interior pudiendo esparcirse a sus anchas cuando es sacado a sus paseos diarios.
Entorno ideal
El Bolonka es un cachorrito muy citadino, se adapta a vivir en cualquier tipo de apartamento del tamaño que sea, desarrollando un comportamiento adaptado a esas necesidades siempre que se le lleve de paseo diariamente, de manera que pueda estirar las piernas y jugar, volviendo al hogar más calmado y tranquilo.
Sin embargo es posible que tenga que entrenarlo en función a que minimice los ladridos o que aprenda a callar cuando se le solicita, pues son perritos que tienden a ser muy bulliciosos o ladradores y aun cuando su tono de voz no es muy grueso ni posee tanto volumen como un perro de mayor tamaño, siempre puede llegar a molestar a los vecinos o a usted mismo.
Así mismo es recomendable que establezca pautas que sean respetadas por todos los miembros del hogar y por supuesto por su Bolonka, atendiendo principalmente que es un animalito que va a convivir con usted en un aproximado de 13 a 15 años y considerando que es pequeño y puede llegar a ser maltratado sin desearlo.
Otro aspecto a tener en mente es que el Bolonka se siente mejor con lo que ya conoce, volviéndose rutinario, por lo que cambiarlo de lugar constantemente no es lo ideal, incluso una mudanza debería tener su proceso de transición para evitar que se estrese o se deprima.
El Bolonka en interiores
Una vez que se tenga definido el estilo de vida y las normas a las que tendrá que adaptarse su Bolonka entonces deberá definir cómo va a vivir en el interior, pues estos perritos deberían llevar un vida dentro del hogar, si bien aman jugar al exterior su composición física y mental no está preparada para ser un animal netamente de patio, necesitando sus espacios dentro de la casa.
En este sentido se recomienda ubicar en primer lugar su espacio de descanso, el que puede ser incluso su propia cama (si está en sus costumbres), pero se debe tener mucho cuidado por el tamaño del Bolonka y sobre todo porque si luego de un tiempo y por algún motivo cambian las circunstancias y deba bajarse de ella a dormir en otro lugar esta etapa será un tanto difícil para él, siendo preferible que le otorgue su propio espacio desde el principio.
Así pues, lo mejor sería comprarle una cesta equipada con un suave colchón, no es necesario que incluya mantas pero tampoco es negativo hacerlo, lo importante es que se ubique en un lugar de buena accesibilidad, que se pueda limpiar constantemente y que no represente problemas para su Bolonka, así como también debe tener buena ventilación sin llegar a causarle refriados.
Otro aspecto a tomar en consideración es su espacio para comer, el que idealmente debe estar separado de la mesa donde se alimentan los humanos, tratando de prevenir que el Bolonka no adquiera costumbres como pedir a los humanos mientras ellos comen lo que como ya se ha dicho, es perjudicial para el pues su composición no está preparada para digerir de buena manera ciertos ingredientes.
Al respecto puede equipar su zona de comida con una tasa para servir su pienso o comida casera, muchas de ellas son recipientes que traen las medidas en gramos lo que le ayuda a colocar las dosis adecuadas, así como incluir otra tasa que sea designada a proveerle agua limpia, la que debe ser cambiada al menos diariamente.
Otro instrumento necesario es la ubicación de una cesta de juguetes, previniendo que los mismos se encuentren regados por todos lados y asegurando que su Bolonka sepa exactamente a donde ir mientras espera su momento de esparcimiento en el exterior.
Igualmente es importante enseñarle a hacer sus necesidades sobre un papel o en el espacio seleccionado, el cual va a aprender a reconocer a través de la asociación de los olores, mientras aprender a aguantar hasta que salga al jardín.
El Bolonka en exteriores
Siendo un perrito que pasa mucho tiempo en el interior el Bolonka espera con ansias su momento de esparcimiento y su salida, lo que llegado un momento aprende a reconocer cuando se acerca la hora y en ocasiones se vuelve más ansioso por ello, por lo que evite saltar este momento y asegúrese de que su mascota pueda pasear diariamente en el exterior.
Asimismo es importante reconocer primero el lugar donde va a tener su salida ya que por su tamaño y por su nivel de excitación cuando se encuentra en esos lugares el Bolonka no atiende a esquivar obstáculos pudiendo hacerse daño con espinas u objetos punzantes.
Por su parte no es recomendable que el Bolonka pase mayor tiempo que el asignado para distraerse en las afueras del hogar ya que necesita de protección y cuidados además del calor de la vivienda, lo que no lo hace bueno para pernoctar en el exterior.