Akita Inu: Tu nueva mascota
El Akita Inu es un perro de gran tamaño y constitución, inteligente, protector y la mascota perfecta para toda la familia. Es muy parecido al Akita Americano, pero es, en definitiva, una raza diferente.
Estos perros son en su mayoría precavidos y algo cohibidos. Suelen estar tranquilos a lo largo del día y mantienen la calma en situaciones un poco turbias. De igual forma, el Akita Inu es leal a sus dueños, actitud que le ha dado gran popularidad alrededor del mundo, siendo Japón en donde más se les conoce y venera.
Al día de hoy, el Akita Inu es un perro de ambiente familiar, aunque también puede ser un perfecto guardián si se le entrena adecuadamente. Es de apariencia elegante y segura, incluso puede llegar a ser soberbio pero al mismo tiempo súper tierno, una combinación enigmática e interesante.
Sin duda, el Akita Inu es una raza milenaria que tiene grandes secretos que ofrecernos.
El Akita Inu, también conocido como “el perro japonés”, es de contextura grande, es muy fuerte, incluso se llegó a utilizar para cazar osos algunos siglos atrás.
Su pelaje, todo un espectáculo, es de una textura aterciopelada y esponjosa; lo podemos hallar en colores blancos, rubios o rallados. Su cola es gruesa y enroscada sobre su espalda. En cuanto el peso, si bien es cierto que pueden llegar hasta los 50 kilogramos, lo ideal es que en promedio pese 40 kilogramos, dependiendo de la actividad física constante a la que se someta.
Actualmente lo podemos hallar en pocas partes del mundo, pero fundamentalmente en Japón, de hecho es monumento nacional de este país asiático. Allí fue donde se desarrolló la raza, hace siglos, cuando era utilizado para la caza y la pelea.
También lo podemos ver en algunos países europeos, pues varios Akita Inu fueron llevados al viejo continente durante la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, éstos eran utilizados para desprender su hermoso pelaje con el fin de cubrir a los soldados del frío.
En algunos lugares de Estados Unidos también podemos encontrar ciertos ejemplares de esta raza en diversidad de versiones. Esto se debe a que, durante la guerra, militares norteamericanos adoptaron algunos cachorros para llevarlos a su país.
Así mismo, en Canadá también se pueden ver algunos Akita Inu genuinos, no obstante, expertos en la raza aseguran que a pesar de existir diferentes versiones y cruces de ella, el honorable Akita Inu japonés es difícil de localizar.
Pueden vivir un promedio de 10 a 12 años si se les cuida y alimenta correctamente. Los Akita Inu son de cuidado exigente, por ejemplo, en Japón las familias que ya no cuentan con recursos para mantenerlos deben entregarlos al Estado, el cual asume la protección del perro.
Pero sobre todo, el Akita Inu demanda un entrenamiento especial porque no son sumisos ni sociables. Lo ideal es mantenerlos en un espacio suficientemente amplio para que haga ejercicios y pueda entrenar. De esta manera, podrá llevar un estilo de vida estable que lo ayude a vivir durante mucho tiempo.
Gracias a su pelaje, el Akita Inu puede tolerar temperaturas muy bajas. A pesar de ello, se debe criar en climas templados o frescos. Es por ello que como su dueño no puedes mantenerlo en climas tropicales o con altas temperaturas.
Por lo general, esta raza de perro vive feliz y sin complicaciones en países como Estados Unidos, Canadá, y por supuesto Japón, debido a que sus zonas climáticas concuerdan con sus características. En contra parte, probablemente tendrán problemas en su piel si se crían en la costa del Caribe, por ejemplo.
Es probable que toleren el calor con un cuidado extremo a su piel, pero no por tiempo prolongado. Además de los países antes mencionados, esta mascota es posible que pueda vivir sin problemas en España, Francia o en algún otro país europeo con estaciones de clima pronunciado.
Akita Inu: Tesoro nacional en Japón
No es casualidad que los Akita Inu sean un tesoro nacional para Japón, y que incluso se encuentren estampillas y estatuas en su nombre. Esta raza es una de las más honorables, no sólo por su historia de pelea y supervivencia sino por la profunda lealtad que mantienen con sus protectores.
Historia y Origen del Akita Inu
El Akita Inu es una raza originaria del imperio del sol naciente con gran difusión a nivel internacional y con información que data desde hace 3000 años atrás.
A pesar de no conocer con exactitud el momento en el que se da el origen de la raza, la representación de perros con sus características se remonta hacia la Edad de Piedra en donde su función principal era la caza y guardia.
Durante el período de Yayoi también conocido como la Edad del Bronce, son encontrados diversos objetos en los que se apreciaban perros con aspectos similares al Akita de hoy en día, con orejas alzadas y colas rizada, todo esto aproximadamente 300 años A.C.
Su nombre proviene de una característica particular de todas las razas caninas en Japón, las cuales incluyen el lugar origen (Akita, una provincia nor-oriental) en conjunto con “Inu” o “perro” en japonés. Este can es uno de los más grandes en todo el país asiático y sin duda, el más venerado.
Con la llegada de algunos perros de otras razas provenientes de diferentes lugares de Asia, aún más de China y Corea se realiza un cruce que disminuye la pureza de los Akita nativos. Sin embargo esta situación sucede solo durante un periodo de tiempo determinado hasta la puesta en marcha de acciones para preservar los primeros ejemplares.
Antes de ser llamado por su nombre actual, fue conocido como “Perro de Odate” haciendo referencia a una ciudad situada en la provincia de Akita, también llamada “ciudad del perro”. El nombramiento oficial del Akita Inu se dio apenas en el año 1931 con el objetivo de preservar su especie, siendo declarado como un monumental natural en Japón.
Desde 1603 en adelante la función de la raza fue exclusivamente la pelea, en la búsqueda de desarrollar su fuerza y resistencia. Esto en conjunto al cruce con algunos Tosas Inu y Mastines, ocasiona la perdida de características originales en la raza, destacándose las capas de pelo por su tipo spitz.
3 siglos después se prohíben las peleas caninas en Japón, dando fin a un periodo difícil para el Akita, pero sin poder recuperar su tamaño original.
Los primeros Akita Inu
Previo al año 1930 no es mucha la información existente de la raza, teniendo en cuenta solo algunos indicios de sus primeros pasos y posibles épocas de desarrollo. Los ejemplares más conocidos del Akita Inu y a los cuales se hace referencia en diversos libros son Babagoma-Go y Tochini-Go, pertenecientes a Mr. Kunio Ichinoseki y Mr. Isumi respectivamente.
Otro de los perros que más importancia ha obtenido a lo largo de la historia es Ichinosek Goma-Go, que posteriormente daría vida a Goromaru-Go, ambos con gran relevancia en la conservación de la raza.
Goromaru-Go gozó de gran reputación en todo Japón por procrear a los “Moku” o perros de colores mezclados, dándole un puesto de semental en todas las exposiciones.
Llegada del Akita a Estados Unidos
Las razas cuyo desarrollo y crecimiento han sido establecidas formalmente en su país de origen no cuentan inicialmente con reconocimiento y atención en otras fronteras. Los primeros Akita Inu en ingresar a Estados Unidos no generaron un alto interés en los aficionados y amantes de los perros en la región, careciendo de importancia durante algunos años.
Hellen Keller, una famosa norteamericana fue de las primeras personas en cuidar algunos ejemplares de la raza, específicamente 2 de ella en la ciudad de Nueva York.
La llegada de este enigmático can se dio en primer lugar a través de soldados que cumplían el servicio militar en Japón y a su regreso, optaron por hacerse con ellos y exportarlos. California fue uno de los estados en donde mayor número de Akita Inu llegó, manteniéndose esta estadística hasta el día de hoy.
El interés hacia la raza no fue inicialmente elevado a pesar de los esfuerzos de sus importadores, ocasionando un lento crecimiento y progreso de la misma. Debido a la variedad de especímenes como consecuencia de todos los cruces no existió un consenso que lograra el desarrollo de programas de crianza específicos y bien establecidos.
Los primeros años del Akita en este continente fueron extremadamente difíciles. Las barreras sociales de una población con poco conocimiento sobre la raza fue motivo de grandes batallas para lograr su establecimiento oficial. La mayoría de los nuevos criadores no tenían idea de cómo actuar frente a este animal lo que produjo graves problemas en su crianza.
Con el paso del tiempo eran muchas las organizaciones caninas creadas para apoyar el desarrollo del Akita Inu sin resultados positivos. Es apenas para el año 1952 cuando se funda el Akita Dog Association de la mano de Kelly Spellmeyer. En 1956 abre sus puertas el Akita Kennel Club que posteriormente sería llamado Akita Club of America.
Es aceptado de forma oficial en julio de 1955 dentro de los Miscellaneous Class o una especie diversa, abriendo un camino de posibilidades para que en la actualidad goce de afecto e interés por los aficionados caninos.
Características de la raza
Este perrito de nombre gracioso, Akita Inu, tiene llamativas características físicas que son tan únicas y particulares como lo es su curioso nombre. Comenzamos diciendo que es un perro de tamaño grande, el cual tienen una altura que varía entre 55 y 70 cm, y que puede alcanzar un peso alrededor de los 30 a 45 kg cuando ya es un adulto, dimensiones que son mayores para los machos que para las hembras.
Estos rasgos le confieren al Akita Inu un aspecto de poderoso, pesado y con mucha fuerza. Podemos ver que tiene similitud en estas características con otros perros de razas de frío como el Alaskan Malamute, o el husky siberiano.
Su cuerpo es compacto, grueso, alargado, tiene un lomo recto y un pecho fuerte y ancho. En su extremo posterior se implanta la cola que es de tamaño mediano a largo y es peluda, se implanta en posición intermedia, y su actitud la mayoría de las veces es estar erguida y sobresalir por encima del tronco.
Las patas son largas, gruesas y muy hábiles, terminan en pies con almohadillas esponjosas. Este aspecto del cuerpo le da al perro de la raza Akita Inu la apariencia de un can fuerte, grueso, musculoso y resistente, un perro de trabajo.
Con respecto a su cráneo y cabeza, es de tamaño proporcional al cuerpo, más o menos alargada, con hocico un tanto prominente. En ella se observan un par de ojos pequeños, de forma triangular con ángulos redondeados, que por lo general tienen color marrón oscuro, aunque también pueden ser de acuerdo al pelaje.
También se observan en este can un par de orejas un tanto pequeñas, si se compara con el tamaño general de este can, son triangulares de base ancha y de extremo más romo que puntiagudo las cuales están bien separadas entre sí y se disponen en una actitud erguida. La nariz o trufa es de color oscuro y grande.
Es probable que lo que más resulte atractivo en esta bonita raza Akita Inu sea el grueso abrigo que forma su pelaje. Este está formado por un manto de pelo largo, que tiene dos capas a su vez, una interna de pelaje fino y corto para protección de las bajas temperaturas, y una capa externa de pelo un poco más largo, grueso y de textura dura y áspera, aunque al acariciarlo es bastante suave. Este grueso abrigo le confiere protección para las bajas temperaturas del invierno y también en casos de humedad.
En relación al color del pelo, por lo general, se admiten casi todos los colores y tonos, aunque los más comunes son el blanco, el rojizo ya sea claro u oscuro, el marrón oscuro, y también pueden verse colores atigrados.
Como se puede deducir, todas estas características y rasgos físicos le confieren una apariencia única a este maravilloso perro. El Akita Inu es un perro fuerte, imponente, llamativo, además de ser muy inteligente y ágil, no cabe duda de que sea una buena opción para mascota, especialmente en aquellas zonas donde se dan las cuatro estaciones.
Comportamiento con otros perros
El perro de la raza Akita Inu, famoso por su tierna apariencia, además de por salir en cierta famosa película donde fue ejemplo de amistad aun después de la muerte, es un can de gran tamaño, y muy inteligente.
Puede confundirte un tanto ese tierno aspecto que presenta de peluche, por su grueso abrigo de pelaje semilargo, sin embargo, el carácter de esta raza tiene algunas particularidades, y entre ellas no solo hay que hacer referencia a su relación con los humanos, sino también a cómo es su comportamiento con otros perros y demás mascotas.
Sabemos que la raza Akita Inu desde sus orígenes fue entrenada como un perro para la vigilancia y el cuidado, por tal motivo, este can muestra fuertes instintos protectores y sentimientos territoriales que hacen que el Akita Inu sea un gran perro de vigilancia y guardián para las familias. En relación a esto, sabemos que esta raza puede llegar a comportarse un tanto agresiva y tener dificultades para la socialización, en especial con otros perros.
De modo que, si deseamos que el Akita Inu sea un perro sociable, amistoso, cariñoso, capaz de convivir y desarrollarse efectivamente en un ambiente con otros perros y mascotas, es necesario que se inicie un proceso de socialización tempranamente en la vida de este can que le ayude a que de una manera adecuada, pueda aceptar y tolerar a otros animales.
Algunas técnicas e ideas a implementar para lograr este proceso de socialización son: sacarlo a pasear con frecuencia al parque y a demás lugares en los que pueda compartir con demás personas y animales, llevarlo a visitar a amigos o permitir visitas en casa con mascotas.
En este sentido, si planeas tener otro perro u otra mascota en el hogar, es prudente que el Akita Inu comience a compartir y a tratar a estos compañeros desde que es un cachorro, y así se podrá conseguir una socialización temprana y efectiva que hará que tu perro se comporte educado y receptivo para con los demás animales.
En esencia, el temperamento del Akita Inu es el de un perro fuerte, valiente y defensor, que cuida y protege el hogar y a su familia, pueden mostrarse un poco celosos y rechazar a los extraños, e incluso ser hasta agresivos, sobre todo con perros machos.
Sin embargo, se afirma con lo expuesto anteriormente que son conductas que pueden ser modeladas y mejoradas. Se conocen ejemplares Akita Inu que son excelentes compañeros de animales como de humanos, se la llevan bien y conviven con perros de su misma raza o de otras, preferiblemente cuyo carácter sea compatible con el de estos canes, al igual que también, estos perros se muestran receptivos con otras especies de mascotas, particularmente con los gatos.
Toma las precauciones para asegurar su buen comportamiento en público y frente a otros animales, de modo que, cuando salgas al parque a pasear a tu Akita Inu, llévalo sujeto de una correa para que te sea más fácil controlar sus reacciones y respuestas; aun cuando sea un perro entrenado excelentemente, no se recomienda que esté suelto independientemente en los paseos.
Dieta y alimentación
El Akita Inu, pertenece a una raza de perros que presenta ciertas consideraciones con respecto a la alimentación y dieta que debe seguir.
Así tenemos que los perros de esta raza ameritan de un menú que tenga alimentos de la mejor calidad, y en especial que sean una fuente rica de proteínas de alto valor nutricional, estás proteínas son las derivadas de productos cárnicos (ya sea que se trate de res, cerdo, pollo).
Las proteínas son el principal sustrato para la formación de músculos y tejidos nuevos en nuestro can, y en general, en todos los seres vivos. En especial, los cachorros de Akita Inu requieren de una dieta especial a base de 3 a 5 raciones diarias de alimento rico en proteínas, que regule su crecimiento hasta que son adultos, cuando la alimentación cambia y se reduce a tres comidas fuertes o comidas principales.
Para el perro de esta raza, Akita Inu, se te aconseja que selecciones entre los tipos de alimentos a ofrecer, principalmente el pienso seco, el pienso húmedo, aunque también se mencionan las tendencias modernas y cada vez más populares de ofrecerle a tus mascotas menús preparados en casa con combinaciones de alimentos que integran las cada vez más populares dietas para animales.
Sin embargo, lo más apropiado y universalmente aceptado es recomendar para tu Akita Inu un pienso seco de la mejor calidad, el cual, el cual no siempre será el más caro, pero sí el que tenga mejor composición nutricional.
Para esto, verifica la tabla de contenido nutricional en el empaque del producto. Lo primordial es verificar la presencia de las proteínas animales como principal ingrediente, seguido de grasas y algunos carbohidratos.
Es preferible escoger productos libres de cereales sobre agregados, cuyo aporte nutricional total es bajo y por el contrario, ofrecen muchos carbohidratos que además pueden producir alergias. El pienso húmedo puede ser una opción de menú ocasional para estimular la alimentación, hacerla más variada y darle un poco de sabor.
El Akita Inu necesita un pienso especial para cada etapa de su crecimiento, madurez y posterior envejecimiento, debes asegurarte de adquirir los mejores productos destinados a cada etapa de la vida de tu can. Recuerda que ofrecer a tu mascota una alimentación de calidad, se traduce en beneficios de salud y compañía el día de mañana.
Las cantidades diarias de las raciones se sitúan alrededor de los 600gr cada una. Aunque, también puedes guiarte por las recomendaciones nutricionales en el empaque. Respetar las recomendaciones de las porciones y las raciones evita problemas como la obesidad.
Así mismo, puedes enriquecer la alimentación de tu can, con un pienso que tenga nutrientes para la condroprotección, esto es, vitaminas y minerales que protejan los huesos y articulaciones de los perros grandes que son problemas de salud presentes en estas razas.
No dejes de lado el tema de la hidratación y ofrécele a tu Akita Inu un tazón de agua limpia y fresca que se recambie regularmente para que se mantenga hidratado.
Salud y cuidados generales
Para tener una mascota de la raza Akita Inu, feliz, sana y contenta, además de garantizar una buena alimentación, debes garantizar la observancia y el cumplimiento de ciertos aspectos que corresponden al cuidado de aseo e higiene así como la atención a la salud de tu can.
Sabemos que esta raza está integrada por ejemplares muy activos y con gran energía, por lo que una de las primeras recomendaciones para cuidar la salud y ánimo de tu Akita Inu es que compartas con él unos 20 a 30 minutos de actividad física diaria, estos pueden ser paseos y caminatas, y juegos de atrapar o traer objetos. Estos juegos pueden llevarse a caso en el jardín de tu casa, si es el caso, o en la visita al parque, que debe ser garantizada.
Cuando paseas y juegas con tu perro, no solo satisfaces su necesidad de actividad física, además, refuerzas el vínculo que existe entre tu can y tu, la confianza, el cariño, el apego y la unión, son buenas actividades que mejoran la relación dueño- mascota.
El siguiente aspecto a vigilar, será la salud del Akita Inu. Sabemos que este es un perro de apariencia imponente, de gran tamaño, fuerza y resistencia, sin embargo, no es una raza que esté libre de enfermedades. Como todos los perros grandes, el Akita Inu puede sufrir de patologías osteomusculares tales como displasia de cadera y luxación de la rótula, a los que tiene un alto riesgo.
Entre otras afecciones se menciona la predisposición a la torsión gástrica, las enfermedades oculares como la atrofia progresiva de la retina, cataratas, también enfermedades neurológicas como las epilepsias, polineuropatía, enfermedades renales como la hipoplasia renal cortica, y enfermedades de la piel como el pénfigo y la adenitis sebácea.
Debes estar atento ante cualquier alteración en el comportamiento o salud habitual de tu perro Akita Inu y, llevarlo al veterinario unas dos veces al año para chequear su estado de salud en general y para desparasitarlo y vacunarlo oportunamente. El Akita Inu tiene una esperanza de vida que puede alcanzar hasta los 12 años de edad.
El tercer pilar de su cuidado es mantener reluciente y llamativo el hermoso aspecto del Akita Inu. El grueso manto de pelos que tiene este can, amerita de un cepillado diario, para que siempre se mantenga en perfectas condiciones y para evitar la acumulación de suciedad, polvos, ácaros, así como para estimular la circulación de la piel y remover el cabello muerto. Puedes emplear un cepillo de cerdas suaves con punta metálica roma.
Para el baño, debes utilizar champú y acondicionador para perros de pelaje largo, se acostumbra a bañar una vez al mes. Cuida de la limpieza de sus ojos, y en especial de los oídos para prevenir las infecciones limpiándolos con suavidad con una toalla humedecida en solución y que sea estéril.
Así mismo, la higiene dental es precisa para la salud buco-dental. Acostúmbrate a cepillar los dientes de tu can regularmente desde que es un cachorro, para prevenir las infecciones e inflamaciones.
Cómo entrenar, educar o adiestrar un perro Akita Inu
El Akita Inu es un gran perro de mascota, sobre todo para considerar en el aspecto de entrenar y educar como un gran perro de compañía y un excelente guardián para cualquier hogar.
Al decidirte por adoptar a un perro de esta raza, siempre el primer paso del entrenamiento comenzará idealmente desde el mismo día que lo lleves a casa, de manera que puedas iniciar una educación temprana, a buen tiempo, que permita que este can, aprenda e internalice mejor las órdenes y comandos, puesto que existe cierta fama alrededor de él, de que se trata de un perro con un temperamento un poco difícil, que podría provocar que un dueño poco experimentado y con limitada paciencia, fácilmente se sintiera cansado y frustrado durante el entrenamiento.
El perro de la raza Akita Inu se caracteriza por tener una personalidad fuerte y dominante, la cual hace necesario que su dueño sea muy paciente, contante y a la vez firme para el entrenamiento adecuado de esta mascota. Es bueno comenzar a una edad bastante temprana, es posible que alrededor de los 3 meses cuando es un cachorro recién llegado a casa. Comienza con los comandos básicos, como sentarse en uno u otro lugar, y corrige las conductas inapropiadas aun cuando solo sean travesuras por la edad.
Por la edad, por ejemplo, si no le permites subirse a los muebles, cada vez que lo intente enfatiza y corrige esta situación con un fuerte y directo “no”, si flexibilizas las medida aunque sea una sola vez la corrección y la adquisición de la conducta no sería aprendida. Lo mismo ha de ocurrir con otro tipo de actividades como el morder los zapatos o las pantuflas.
La posición del dueño o entrenador, debe ser siempre la de una figura firme y de autoridad, puesto que el Akita Inu, tiene un sentido de líder y de territorialidad fuerte, por lo que el dueño debe demostrarle cual es su papel en el hogar.
Hacemos parte del entrenamiento del Akita Inu, actividades y pruebas de interacción con el medio, como los juegos de destreza y agilidad.
La ventaja de este tipo de actividades es que permiten la interacción amplia entre el perro y dueño, desarrollando un vínculo mayor, además de que estimula las capacidades físicas y mentales del can, las cuales deben aprovecharse al máximo, ya que esta es una raza de perros muy inteligente y con gran potencial.
Sin embargo, no olvides durante los entrenamientos, observar y prestar atención a su físico y articulaciones, recuerda que los perros de razas grandes tienen la desventaja de sufrir de problemas osteomusculares.
Para educar al Akita Inu en la conducta de hacer sus necesidades, se comienza por enseñarle que se ha establecido un lugar específico para que lo haga, puede ser en el jardín sobre un periódico por ejemplo, aunque también algunos expertos recomiendan la jaula, que lo ayudaría a hacer sus necesidades en específico en un punto dentro de la misma casa en aquellas situaciones en las que no puedas llevarlo a dar su paseo.
Para cualquier consejo o problema de conducta en relación al entrenamiento y aprendizaje del Akita Inu, puedes consultar con los expertos entrenadores.
Comportamiento con los Humanos
No hay palabras mejores ni más certeras para describir a este maravillo can que la lealtad, la fidelidad, la confianza y el amor, estas sin duda alguna son las cualidades que mejor definen a esta estupenda raza de perros Akita Inu, un perro japonés tan famoso, que tiene el honor de haber recibido la designación de monumento nacional de Japón.
Esta distinción se la ha ganado esta raza en vista de las maravillosas cualidades que exhibe su personalidad encantadora con los humanos. Ante todo es una excelente mascota, muestra gran lealtad y fidelidad a su familia y a sus dueños; en un Akita Inu las personas tendrán un amigo fiel, un excelente compañero en todos momentos, y que se adapta y amolda a muchas personalidades. Aunque, se hace la salvedad de que no es la mejor raza para ser compañero de otros perros o mascotas puesto que puede mostrarse un tanto intolerante.
Del mismo modo, con los niños, es recomendable que se vigile sobre todo si son niños pequeños, aunque el Akita Inu no es en lo absoluto un perro agresivo con miembros de su familia, es más bien protector y apegado.
La fidelidad y devoción de este perro por sus dueños, cuentan que data desde los inicios de la raza, donde se dice que este era el compañero fiel de los guerreros samurái. Es una de las razas más apreciadas y valoradas entre los asiáticos por ello.
Como la mayoría de los perros, el Akita Inu se divierte a través de los juegos, el correr y realizar actividad física moderada diariamente es necesario para una buena salud emocional de esta raza. Es un perro amoroso, familiar, armónico, generoso y amistoso con las personas. Otra ventaja es que es un perro muy aseado, sin desprender el molesto olor a pero, es dócil y además con gran inteligencia para aprender.
Tiene un fuerte sentido del territorio y de la protección del hogar, por ello se dice que es un perro guardián, atento, observador, fiel, se dispone alerta y valiente ante cualquier extrañeza o amenaza, incluso puede llegar a atacar si está en peligro. Es un perro lleno de energía y vitalidad, la cual también usa para curiosear y explorar su entorno. Esta raza es independiente, calmada, equilibrada y cuidadosa en sus movimientos.
Con los extraños puede mostrarse un poco celoso y reservado, hasta entrar en confianza, en cambio, con quienes son cercanos a él, el Akita Inu es sumamente amigable, sociable y muy cariñoso.
En la actualidad, se conoce que esta magnífica raza de perros participa en labores tan importantes como el ser un perro de competición en las pruebas de ejercicio y habilidad canina, en las cuales tienen una participación muy destacada la mayoría de las veces. También, el Akita Inu puede ser entrenado y educado para convertirse en un gran perro de terapia.
Otros trabajos que ha desempeñado es ser perro ayudante en granjas y en el campo, y por su puesto el ser un perro de acompañamiento, y competidor en importantes eventos de pruebas caninas.
Entorno ideal
La raza Akita Inu es una de las más famosas en todo el continente asiático y particularmente en su país Japón, donde se declaro monumento nacional. Espiritualmente, este perro es considerado como el guía de las almas guerreras, pues era el compañero de los nobles samurái. Además, es muy común ver en las casas de familias japonesas cuando nace un bebe como símbolo de felicidad, salud y larga vida.
Del mismo modo, una de las más preciosas y conmovedoras historias de esta noble raza es la del valiente perro Hachiko, que fue inmortalizada en un filme. Se trata de la mascota de un profesor universitario, quien diariamente tomaba el tren para ir a su trabajo, en cuyo trayecto, siempre iba acompañado por su fiel compañero “Hachi”, el cual lo esperaba en la estación a su regreso.
El día de la muerte de este profesor, lamentable suceso que ocurrió en la universidad, el can fue a la estación de tren a esperarlo como siempre, y continuó haciéndolo durante todos los días durante 10 años, hasta su muerte.
Como vemos, este perro es un maravilloso compañero para las familias, fiel, atento, apegado y protector. Serán en promedio unos 13 años de vida de cariño, lealtad y respeto si decides adoptar a un Akita Inu.
Sin embargo, debes asegurarte de brindarle la calidad de vida que este perro se merece. Ofrécele un entorno, que no solo garantice su salud física y cuide de su alimentación, sino que también le proporcione el apoyo y cuidado emocional que el Akita Inu amerita.
Este es un perro muy activo, que disfruta de los paseos y caminatas diarios, así como de jugar y realizar actividades físicas y estimulantes con sus dueños. Puede adaptarse a vivir en cualquier tipo de ambiente, aunque por ser un perro grande se adapta mejor a una casa con el espacio para moverse con libertad, jugar y salir al jardín cuando lo desee.
Pero, también puede vivir cómodo en un apartamento de ciudad con un dueño atento y responsable que le dedique dos paseos diarios de 20 minutos cuando menos. Este tipo de raza de perros es más compatible con personas que lleven un estilo de vida activo y que puedan compartir con él actividades y juegos con frecuencia.
Puedes brindarle en casa un cómodo espacio acolchado para que duerma por las noches. En la tienda de mascotas encontrarás diversas opciones para adquirir. Consigue una correa para perros puesto que es recomendable que lo lleves de esta manera cuando pasean, ya que no se la lleva bien con otros animales y te será más fácil controlarlo.
El Akita Inu disfrutará increíblemente en un ambiente fuera de casa, como el jardín, el patio o la terraza. En los días de invierno, su grueso abrigo de pelaje lo protege del frío intenso, aunque debe tener una caseta para perros donde dormir y resguardarse del frío.
Consigue una con un tamaño adecuado para que se sienta cómodo. Cuando llegue el caluroso verano, también debes ofrecerle a tu can un espacio ventilado para protegerse del sol y darle el agua suficiente para cuidar su hidratación.
Si observas estos consejos y cuidas de él con amor y cariño, el Akita Inu te acompañará por muchos años.