A veces, la ilusión de tener una mascota nos llena de alegría y de emoción, y también nos puede llevar a tomar la decisión de adoptar o comprar un perro apresuradamente sin considerar todos los aspectos y responsabilidades que implica el hacerse responsable de un animal, de una mascota que será un miembro más del hogar.
Por ello, asegúrate de pensar con cabeza fría todas las circunstancias y situaciones que representan el tener un perro en casa y considera seriamente si realmente estás preparado para darle la bienvenida en tu hogar.
Disfrutar de la compañía de un perro es una experiencia increíble, sobre todo para aquellas personas que sienten este afecto especial hacia la mascota. Sin embargo, para que la relación del perro con los miembros del hogar y especialmente su convivencia sea armoniosa y placentera, es necesario considerar algunas situaciones, que nos lleven a elegir el perro adecuado para nuestro entorno y nuestras necesidades, e igualmente, que podamos cubrir las necesidades del perro también.
La primera pregunta que te plantees puede ser, ¿adoptar un perro o comprarlo? Ambas son buenas alternativas dependiendo del punto de vista que tengas para cada una y de tus posibilidades.
Cuando te animas a adoptar un perro, no solo resultará mucho más económico para ti, sino que también tienes la grandiosa oportunidad de poder darle a un lindo cachorrito la posibilidad de tener un hogar y una familia que cuide de él.
No pienses en los perjuicios de adoptar un perro, esa idea sobre difícil educación o aquella que habla de problemas de comportamiento, son preconceptos errados, puesto que se ha demostrado que los perros adoptados son igual de buenos que los perros que compras en la tienda de mascotas, y hasta puede verse como son más agradecidos, apegados y amorosos con sus dueños.
Otra idea que tienes que plantearte es el tamaño y la raza de perros que quieres, esto importa y mucho a la hora de la convivencia en el hogar. Un perro grande necesitará más espacio para moverse con libertad, una casa con jardines, por ejemplo, en los que pueda jugar, en cambio, un perro pequeño puede adaptarse a cualquier tipo de hogar, ya sea que se trate incluso de un pequeño apartamento en la ciudad.
Considera igualmente, los factores climáticos; hay perros cuyo físico está preparado para vivir cómodamente en regiones frías, mientras que otras razas son propias de ambientes más cálidos. Escoge bien el perro que quieres de acuerdo a la región donde vivas, así facilitas su adaptación al entorno y cuidarás también de su salud.
Una duda, sobre todo si te decides por adoptar un perro en lugar de comprarlo, es el escoger entre un cachorro o un perro adulto. Es cierto que los cachorros son totalmente adorables y nos llenan de ternura, pero también debes tener en cuenta que el adoptar un cachorro exige un mayor compromiso y dedicación en sus cuidados para llevarlo a la vida adulta, y por ende requiere más de tu tiempo y responsabilidades para con él. Por su parte, un perro adulto te evita estos primeros pasos de la crianza del animal, aunque puede ser difícil modificar algunos comportamientos en un perro ya adulto.
Por último, y quizás sea la consideración más importante, debes plantearte cuáles son tus necesidades al buscar una mascota, compañía, distracción diversión, un amigo para salir a dar una vuelta o a pasear, pero más aún, considera las necesidades de un perro.
Las mascotas necesitan cariño y atención constante, además necesitan cuidados básicos de higiene, alimentación y salud; el tener una mascota también representa mayores gastos para la familia, y lo más importante, los perros requieren de un tiempo diario para poder cubrir sus necesidades y hacer de su estancia en el hogar, una vida cómoda y agradable. Así que analiza serenamente todas las posibilidades que tienes a tu alcance para poder atender a una mascota antes de dar el importante paso de buscar una.