Las pulgas, son parásitos que atacan a nuestros animales domésticos, y aunque sean más escuchadas entre los perros, nuestros gatitos también pueden sufrir esta incómoda parasitosis.
El contagio entre los gatos es muy fácil, ya que al ser estos animales más independientes pueden salir de casa a explorar el vecindario y regresar infestados, pues entraron en contacto con algún animal con pulgas, o con objetos o lugares donde las pulgas están, como los rincones donde se apila la basura.
Es una ectoparasitosis molesta y tediosa que provoca un prurito o comezón intensa causando lesiones en la piel a consecuencia del rascado, las cuales pueden sobre infectarse, además de causar alergias diversas y alopecias.
Siempre que adoptas a un gatito, lo recomendable es llevarlo al veterinario para que haga una revisión adecuada de su salud y aplique las vacunas y desparasitaciones correspondientes. Así mismo, debes tener cuidado cuando tu gato sale de paseo por el vecindario, revísalo siempre cuando regrese, pues es más fácil para ellos contagiarse y al llegar a casa incluso pueden infectar a otros animales, como los perros, o incluso, a nosotros mismos como humanos, pues las pulgas causan dermatosis en algunas personas.
En este sentido, puedes ir a cualquier tienda de mascotas y comprar alguno de los novedosos productos disponibles para combatir las pulgas en los gatos, aunque, es cierto que estos productos contienen una gran cantidad de químicos que podrían ser dañinos para la salud de tu animal.
Como otra opción puedes optar por un remedio natural fabricado en casa, que por lo general son preparaciones sumamente sencillas, fáciles de preparar y aplicar, y en su mayoría resultan ser muy efectivos para eliminar las pulgas.
Como paso inicial debes acostumbrar a tu gatito al baño. Cuando bañas a tu gato prácticamente estás ahogando las pulgas, un baño de agua tibia regular ayudará a eliminar estos molestos parásitos de la superficie cutánea del gato. No te olvides de utilizar el champú adecuado para el pH de la piel de tu gato, y además puedes agregar unos cuantos aceites de hierbas como eucalipto o lavanda. Luego del baño, sécalo con una toalla limpia, y cepíllalo con un peine de cerdas finas y firmes.
Puede que esta rutina de aseo resulte incomoda para tu gato, por lo cual, ármate de paciencia para que puedas ayudarlo.
Puedes preparar un champú especial antipulgas para los gatos. Solo tienes que mezclar una parte de champú, con otra parte igual de aceite, y lo aplicas sobre el cuerpo del animal durante la ducha, haciendo énfasis en las partes más afectadas por las pulgas como son, las patas, la cola, los genitales y las orejas. A continuación, enjuaga muy bien a tu gatito y sécalo con una toalla limpia, para después cepillarlo.
Una observación importante es que si tu gatito es menor a 3 años, preferiblemente no utilices los aceites, puesto que aun su piel es muy sensible y estás substancias podrían irritarlo y ocasionarle alergias. Además, se muy estricto con el enjuague luego del baño, ten en cuenta que los gatos tienden a darse baños lamiendo las partes de su cuerpo, por lo que el dejar restos de champú podría ser perjudicial para su salud.
Como aseas a tu gato debes asear igualmente el ambiente en el que él se encuentra, además porque las pulgas quedan en los ambientes y objetos que usa tu gato. Igualmente, debes dar una limpiada extensa y profunda a toda la casa para ayudar a erradicar el parásito, incluyendo aseo con la aspiradora.
Otros remedios caseros, se basan en la preparación de lociones que puedes aplicar con paños limpios o atomizar sobre el cuerpo del gato, utilizando en las mezclas vinagre y agua tibia, té de manzanilla, o aceites naturales. Los spray cítricos son sumamente útiles, para prepararlos solo necesitas la piel de un limón o una naranja que pones a hervir con agua y luego de enfriar, pasas por un colador y colocas en la botella atomizador. ¡Y listo! ¡Adiós a las pulgas de los gatos con estos remedios caseros!