Pastor Lapón: Tu nueva mascota
El pastor Lapón cuyo nombre completo es Pastor de Laponia, es un maravilloso ejemplar canino originado proveniente de las heladas regiones del norte de Europa, en los países Suecia y Finlandia donde se asentó un grupo de tribus nómadas llamadas Sami, que domesticaron a este can para que fuese su compañía, su guardián y les ayudase en sus labores de pastoreo.
Así comenzó a surgir esta hermosa y atractiva raza, un can con una personalidad cautivadora y una apariencia física imponente y muy llamativa.
El Pastor Lapón es un perro muy vistoso, que presenta un tamaño mediano, y una contextura fuerte, gruesa y robusta, su pelaje es un denso manto de pelo corto y semilargo que funciona como el abrigo perfecto para protegerlo de las heladas temperaturas de la región donde nació.
Sus colores son negro, gris y marrón, pueden presentar un manchado blanco en el vientre y en las patas, lo que les confiere un aspecto muy hermoso y llamativo. Con su tierna mirada de ojos redondeados, grandes y expresivos color café, el pastor lapón puede conquistar el corazón de muchos.
Este perrito es una gran mascota para cualquier hogar. Con el apropiado proceso de interacción y socialización con otros perros desde que es cachorro, el pastor lapón no tendrá problemas en convivir con otras mascotas perrunas, de hecho un gran compañero para él sería otro perro de su misma raza. Sin embargo, este can muestra actitudes de líder y tiene un fuerte sentido territorial, por tanto, además con perros de razas pequeñas o mascotas diminutas no es tolerante.
Ante los conocidos se muestra sociable, cariñoso y amigable, disfruta pasar tiempo jugando y compartiendo con sus dueños, así como realizando actividades juntos. Por el contrario, ante los extraños hace uso de su imponente ladrido, como señal de alerta y para espantar al intruso. El pastor lapón es un perro ladrador por excelencia.
La alimentación de este amigo perruno es fundamental para lograr un aspecto saludable y una salud fuerte. Es importante mantener un alto aporte proteico en cada comida para garantizar la correcta nutrición de esta mascota.
Entrenar a un pastor lapón no es una tarea demasiado compleja, ya que este perro goza de una inteligencia impresionante y de un gran sentido de obediencia. Usualmente se comienza desde que son cachorritos, enseñándoles a convivir con humanos y con otros perros.
Los primeros trucos pueden ser sencillos, como sentarse, acostarse o atrapar objetos. Poco a poco los ejercicios de entrenamiento se harán más complejos y creativos para mantener la correcta estimulación física y mental del can. Es recomendable que pasees a este perro al menos una vez al día y practiquen algún juego o se ejerciten luego de la caminata de rutina por cuando menos una hora.
El pastor de lapón es un perro fuerte y sano que usualmente alcanza una esperanza de vida superior a los diez años. A esta raza no se le conocen enfermedades genéticas ni patologías congénitas, salvo algunos problemas hereditarios oculares, y osteomusculares como la displasia de cadera. Por lo tanto, amerita revisiones periódicas y regulares desde que es cachorro para la detección temprana de alguna patología o enfermedad.
El pastor Lapón es un perro muy inteligente, gracias a sus grandes cualidades para laborar, este amigo peludo ha sido compañero del hombre en diversos trabajos de campo, tales como pastoreo y guardián de renos, protector de tribus, perro guía, y más recientemente se ha entrenado para ser perro de terapia y para participar en numerosas competiciones deportivas de destreza y habilidad.
Historia y Origen del Pastor Lapón
Los pastores de Laponia son una raza muy antigua, las estimaciones basadas en los hallazgos científicos de los arqueólogos indican que puede tener unos cinco mil años. En las expediciones arqueológicas realizadas en Suecia, los científicos han encontrado restos de un canino que es muy semejante al perro pastor Lapón de Suecia, este ancestro se estima que data de unos siete mil años atrás.
Esta raza de perro en sus comienzos se entrenaba como un perro para la caza, eran los compañeros de las tribus nómadas de los Sami en la región de Laponia, el trabajo del perro pastor Lapón era resguardar a los renos, ser los perros guardianes de las tribus y servir de compañía a los cazadores.
Los primeros pastores de Laponia eran perros tranquilos, equilibrados y silenciosos, sin embargo, las necesidades de sus trabajos requerían de un perro ladrador que alertara a los hombres de las tribus y avisara acerca de intrusos. Así fue como mediante cruces selectivos nació el pastor de Lapón “ladrador”, con la característica de utilizar su ladrido para espantar a los intrusos, avisar a los hombres de la tribu ante cualquier amenaza, y del mismo modo, hacer saber a los renos, mediante su ladrido, que se trata de su perro guardián.
Así fue como en los comienzos de esta raza, el pastor de Lapón vivía como un perro de pastoreo en el pueblo de Sami al norte de Europa, no pertenecía a ninguna raza moderna ni documentada, era simplemente un ejemplar variante de los perros de pastoreo local dependiendo del cruce.
Alrededor de los años 1930 un grupo de amantes de los perros europeos, se interesaron particularmente por las razas suecas y finlandesas en desarrollo y comenzaron a recopilar información y datos acerca de varias razas de perros, entre ellas el pastor de Laponia. Sin embargo, con los grandes conflictos surgidos en la Segunda Guerra Mundial, todo este trabajo pasó a un segundo plano, e inclusive muchas recopilaciones y documentos se perdieron.
Posteriormente, varios criadores de perros en Suecia y en Finlandia se interesaron por recuperar los registros extraviados sobre los perros de pastoreo de renos, y profundizar la información acerca de sus características y sus razas. Así fue como de manos de unos criadores se logró caracterizar una raza con un abrigo de pelo más denso, conocido finalmente como el Pastor Lapón.
Hacia los años de 1950 y 1960, numerosos perros fueron rescatados y asignados a las variedades de perros clasificadas por los estudios anteriores de acuerpo a su aspecto. Básicamente se distinguían dos razas entre los perros de pastoreo de renos; una raza tenía un pelaje más corto, llamados como Lapphund, y la raza con un abrigo más grueso se llamó Lapinporokoira, nombre que al traducirse al inglés se lee como Pastor Lapón.
Auspiciado por los finlandeses, la Federación Cinológica Internacional, reconoce al perro Pastor Lapón bajo el número casta 284, en el grupo 5, en la sección 3 de los perros nórdicos de guardia y pastoreo.
Con los años esta raza llego hasta Norteamérica, donde logro el reconocimiento del United Kennel Club, actualmente numerosas asociaciones y clasificaciones caninas incluyen a esta raza única, el pastor de Laponia.
Características de la raza
Cuando vemos a un perro pastor Lapón inmediatamente tenemos ganas de tener un amigo peludo de esta raza con nosotros. El pastor de Laponia es un hermoso ejemplar de perro de pastoreo de reno, ideal para vivir en los climas templados del norte de Europa, además con un espíritu de trabajo protector y guardián. ¡Toda una joya de animal!
El pastor de Lapón, o Lapinporokoira, el cual es su nombre original, es un perro de tamaño mediano a grande, en su clasificación se ha incluido en el tipo de los perros Spitz. Exhibe una estructura ósea poderosa, de formas cuadradas, con buen desarrollo muscular y aspecto robusto, su osamenta es fuerte y resistente.
Su cuerpo es bien proporcionado y fuerte, se observa que es ligeramente más largo que alto, tiene una altura entre 40 y 50 cm, con un peso de 20 a 35 kg. La diferencia entre ambos sexos es marcada y evidente, siendo mayor en tamaño y peso los pastores de lapón machos.
El cuello es fuerte y musculoso, no presentan papad, si un denso pelaje alrededor, la espalda es recta, refleja gran fortaleza muscular, además es muy ágil en sus movimientos y es flexible. Por su parte, el lomo es corto y ancho, el pecho también es ancho y profundo que puede llegar hasta los codos. La cola es de inserción baja, ésta es larga, peluda, con aspecto de plumero por su pelaje largo y se dispone incurvada como si fuese hacia el dorso del perro.
Cuando observamos la cabeza del pastor Lapón, se puede notar que ésta tiene una forma algo más larga que ancha. Se distinguen en ella un par de ojos que son muy grandes, tienen una forma redondeada, con buena separación entre sí. Por lo general, son de color café o en tonos marrones, le confieren una mirada muy expresiva y sentimental a este perro. El hocico es más corto que la cabeza, la nariz es negra o en tonos marrones oscuros dependiendo del color del pelaje del perro. Algunos ejemplares muestran un ribete negro alrededor de la boca.
En el cráneo se implantan un par de orejas que tienen forma triangular, las cuales son anchas en su base, de tamaño pequeño y se disponen erectas, con las puntas en una forma algo redondeada, están bien separadas en su inserción y tienen gran desarrollo muscular pues son muy móviles.
Quizás el aspecto más llamativo del pastor Lapón es su hermoso pelaje. Hay ejemplares que presentan una variedad de pelo corto y otros mediano, usualmente se disponen en una capa doble. Característicamente este pelaje es más corto en la cabeza y en la parte anterior de las patas, pero se hace largo en el pecho, en la región posterior de los muslos y en la cola, alrededor del cuello y del pecho forma una especie de collar, es muy abundante, suave y denso.
Los colores que se aceptan en esta raza son: el pardo o marrón claro, negro sólido o gris oscuro, pueden ser uniformes aunque muchos ejemplares presentan un tono más claro en la cabeza y las partes inferiores del cuerpo. Las marcas blancas solo se permiten en el pecho, los pies y la punta de la cola.
Como podemos denotar, el pastor lapón es un precioso ejemplar canino. ¡¿Cómo no querer tan hermoso y elegante perro?
Comportamiento con otros perros
El Pastor Lapón es un perro con una personalidad desbordante de energía, inteligente, animado, y algo ruidoso, su trabajo de pastor desarrolló en él cualidades innatas de un perro guardián. Siempre mantiene un estado de alerta, pero al mismo tiempo muestra una conducta afable y leal.
Este perro es en esencia natural un can ladrador, utiliza su ladrido como método de alerta, de intimidación y para hacer notar su presencia, estas cualidades reflejan que es un maravilloso perro guardián. El pastor Lapón, es un perro fuerte e inteligente, de cuyo entrenamiento y crianza depende en gran medida su relación y convivencia con los demás, especialmente con otros canes.
Como todo perro guardián y de pastoreo, este canino es un perro con una personalidad impotente y un sentido territorial bastante arraigado. Aunque con una familia adoptiva, dedicada a su cuidado y educación por lo general, el pastor de lapón no presentará inconvenientes mayores en su convivencia y vida en el hogar.
En lo que se refiere a su relación con otros animales domésticos de mascota, particularmente con otros perros, la convivencia es variable dependiendo de qué tan efectiva sea el adiestramiento que haya recibido el pastor lapón para la convivencia con otros perros.
Un pastor lapón que desde cachorro haya sido instruido en el contacto y compartir con otros perros, sean estos de su misma raza o de razas diferentes, será un buen compañero, sereno, calmado y tolerante ante otros perros de mascota. Puede que en ocasiones demuestre una actitud precavida ante nuevos miembros caninos en la familia o que vengan de visita al hogar, ya que haciendo uso de su papel de guardián, es un perro muy territorial.
Dentro del hogar si convive con otras mascotas perrunas de su misma raza congenia de maravilla, son amigos, compañeros y comparten el puesto de guardián la mayoría de las veces. Si se trata de canes de otras razas, el pastor lapón tratará de ser el dominante y el principal, quien ladre más, quien reciba más atención del amo manteniendo su papel primario y de custodio y guardián.
En los lugares públicos, tales como plazas o parques en los que el pastor de Laponia se puede encontrar con otros perros, suele mostrar una actitud equilibrada, serena, aunque en ocasiones puede hacer uso de sus ladridos, especialmente con el objetivo de marcar su territorio y hacer notar su presencia.
El pastor de lapón no es un perro agresivo ni de conductas desordenadas, a no ser que se sienta amenazado o bajo peligro, situación que puede suceder cuando otros perros con malas normas de convivencia se acerquen demasiado, ladren, o quieran atacarlo a él o a su amo.
De modo que los compañeros adecuados para los pastores de Lapón son perros de razas grandes, tranquilos y serenos, de su misma raza si es posible, que hayan sido adiestrados desde pequeños para la convivencia. Con perros de razas muy pequeñas, que usualmente son ruidosos y con una personalidad difícil de controlar, el pastor de lapón no se la lleva bien, por lo que es mejor evitar estas compañías en el hogar.
Dieta y alimentación del Pastor Lapón
Al igual que en todas las razas de perros grandes, el pastor de lapón requiere fundamentalmente de una dieta adecuada que proporcione en calidad y cantidad todos los nutrientes que necesita este animal para su completo desarrollo físico y también mental, así mismo es parte de la dieta adecuada un aporte de agua fresca disponible de manera continua para el alcance del pastor lapón, ya que la buena hidratación es crucial para mantener todas las reacciones bioquímicas y fisiológicas que tienen lugar en el organismo de los seres vivos.
En las opciones de alimento que se disponen para los perros tenemos como pilar los populares preparados comerciales, estos representan una combinación de nutrientes en alimentos procesados especiales para los canes como son las purinas.
Lo importante a la hora de seleccionar alguno de estos preparados comerciales es considerar cuál es la composición de estos alimentos. Lo primero es ubicar la etiqueta de contenido nutricional, en este punto nos dedicaremos a leer lo que contiene el alimento. Como primer ingrediente debe encontrarse la proteína.
Esta proteína puede ser de origen de res o de pollo, lo importante es que sea el componente con más porcentaje en la fórmula del alimento.
Ya que la proteína es esencial para la formación de tejido óseo muscular, y además porque los perros son animales carnívoros, el contenido proteico de la dieta del pastor lapón debe ser de la mejor calidad, con esto mantendrá su fuerte contextura, y su hermosa apariencia gracias a un pelaje brillante, sedoso y suave.
Estos preparados comerciales de alimento para perro además pueden estar enriquecidos con vitaminas, minerales, ácidos grasos esenciales y otros nutrientes. Se recomienda evitar los cereales, tales como harinas, trigo, arroz, cebada, ya que estos productos tienen escaso valor nutricional, son fuente de carbohidratos y además son alérgenos potenciales.
Las comidas húmedas enlatadas están permitidas como suplemento ocasional en la dieta. Estas aportan gran contenido de agua que contribuye al estado de hidratación del canino. Así mismo, pueden comprarse bocadillos, snacks o pequeñas meriendas para perros, sobre todo para emplearlas en los momentos de premiar durante el entrenamiento.
La comida natural preparada en casa, es una opción cada vez más utilizada en la nutrición canina. Esta se basa en la combinación de nutrientes a partir de proteínas animales, proteínas vegetales, debidamente cocidos y preparados para administrar al perro pastor Lapón una dieta mucho más sana y equilibrada que los preparados comerciales industrializados.
El agua es fundamental para cualquier ser vivo. El pastor lapón es un perro de actividad y gran metabolismo, por lo tanto requiere de un suministro de agua constante, la cual debe ser limpia, fresca y cambiada de manera regular. La hidratación mejora las funciones gastrointestinales y las reacciones intracelulares de todos los seres vivos.
Por último en la alimentación consideramos el tema de las porciones. Las raciones y porciones para alimentar al pastor lapón se cuantificaran en relación a la edad del perro y el grado de actividad que realice; de modo que en promedio este perro recibirá dos platos principales durante el día, con algunas meriendas entre ellos. Las comidas se administran lejos de los momentos de entrenamiento, trabajo y ejercicio para evitar indigestiones.
Salud y cuidados generales
El pastor Lapón es un hermoso ejemplar canino, con un porte elegante y fuerte, y un aspecto muy tierno gracias a su abrigo peludo denso y suave, además la combinación de colores que usualmente presenta este can, hacen de él un perro muy llamativo y agradable a la vista.
Los perros de la raza pastor lapón son producto de un origen natural, provienen de ancestros que convivían junto a las tribus Sami den norte de la región europea, y conforme pasaron los años experimentaron un proceso de selección natural que fue afinado por los criadores de esta raza para originar al ejemplar actualmente conocido como pastor lapón.
Por fortuna y gracias a este origen natural, el perro de esta raza es muy sano, fuerte y resistente, son pocas las enfermedades congénitas o hereditarias que se describen en estos canes. Aunque, al igual que otras razas, se han descrito algunos trastornos visuales de origen familiar, y también óseos y musculares, entre ellos la displasia congénita de cadera. Esta patología surge a consecuencia de un moldeo inadecuado o insuficiente de la articulación de la cadera en los perros, que hace que esta sea propensa a luxaciones y que además limite la movilidad del perro.
Además de estos problemas de salud, otras patologías que pueden afectar al pastor lapón desde el punto de vista digestivo son la torsión de estómago y la torsión intestinal, comunes en perros de razas grandes. Por lo demás, es un perro sano, fuerte, resistente a enfermedades y con poco índice de patologías, su esperanza de vida supera los 10 años.
Se recomienda desde que son cachorros, acudir tempranamente al veterinario para las revisiones apropiadas de la articulación de la cadera y de las pruebas oculares, que permitan detectar tempranamente cualquiera de estas patologías.
Del mismo modo, es apropiado revisar con frecuencia su pelaje, acicalarlo, y limpiar las orejas y ojos, con toallas limpias, aplicando posteriormente colirios recetados por el especialista. La acumulación de suciedad a este nivel, puede propiciar infecciones oculares y óticas, y las secreciones podrían manchar su pelaje. T
El pastor lapón es un perro de trabajo que lleva a cabo muchas labores al aire libre, por lo que periódicamente y preferiblemente después de cada jornada laboral en terrenos abiertos como los campos, es propicio revisarlo e inspeccionarlo, puede suceder que tenga espigas clavadas o parasitosis en la piel, además, haciendo énfasis especial en las patas y orejas. Las garrapatas son en extremo perjudiciales para la salud del pastor lapón, pueden provocar patologías como babesiosis, ehrlichiosis o las hepatozoonosis.
Acudir con frecuencia al veterinario es aconsejable, ya que es preciso en esta raza mantener su cartón de vacunas al día y sus desparasitaciones debido a los trabajos que realiza en el campo.
Del mismo modo, se debe cuidar de la salud emocional y afectiva del perro pastor lapón. Este es un can muy cariñoso, amable, sereno y apegado a su familia, necesitará de sesiones diarias de entrenamiento físico que pongan en práctica sus habilidades y destrezas. A toda costa se tiene que evitar la vida sedentaria, ya que por su fuerte y robusta contextura este perro podría desarrollar sobrepeso.
Su manto de pelaje grueso resulta un buen abrigo en los días fríos, pero las altas temperaturas son mal toleradas. Se recomienda mantenerlo bien ventilado en estos días calurosos. En cuanto al baño dependerá del estado del perro, se puede bañar una vez al mes con champú para perros, y su manto requiere un cepillado frecuente que permita remover el pelaje muerto y caído y mejora la circulación cutánea reduciendo el riesgo a enfermedades de la piel.
Cómo entrenar, educar o adiestrar un Pastor Lapón
El pastor de lapón es un perro sociable, leal, fiel y trabajador, gracias a su notable inteligencia y capacidad, su entrenamiento no requiere un alto grado de complejidad.
El adiestramiento y la educación del perro se inicia desde que son cachorros, más o menos alrededor de los dos meses, el pastor lapón estará listo para comenzar su proceso de entrenamiento. El primer paso será la sociabilización. Esta es fundamental para lograr que el perro desarrolle hábitos de convivencia con otros canes y con los humanos, mantenerlo junto a su madre y hermanos propicia la interacción con otras mascotas, especialmente con los perros. Hacer que interaccione con humanos, especialmente con niños y familiares, para que se creen en él hábitos de compartir con humanos y de cercanía y tolerancia a las personas.
Cuando el pastor lapón llega al hogar como un ejemplar adulto, no hay que preocuparse en demasía por su entrenamiento, aun se pueden lograr modificaciones conductuales a esta edad, especialmente para vencer algunas fobias y miedos. El pastor lapón solo necesitara un dueño amable, cariñoso y a la vez firme que se dedique a su entrenamiento.
Las conductas de líder y de perro dominante están muy arraigadas al temperamento del pastor lapón, de modo que requiere que el dueño tenga un carácter firme, pero a la vez afectuoso, para que moldee estos ímpetus de manera correcta y de adulto el pastor lapón sea un perro sociable, amistoso, colaborador y trabajador.
Un consejo apropiado a la hora de pasearlo es asegurarte de mostrarle que tu eres el líder y su amo, que camine junto a ti y no delante, y se firme cuando le digas que no puede realizar alguna actividad, como subirse a las camas, o hacerse en casa.
Trata de asociar los paseos y las caminatas a las horas donde el pastor lapón evacúa, de esta manera entenderá que las necesidades fisiológicas se realizan fuera del hogar.
A la hora de entrenar al pastor lapón para la ejecución de órdenes se inicia con lo más básico, trucos como sentarse, o acostarse, e incorporar juegos como atrapar o buscar objetos serán los entrenamientos iniciales para este canino. El aprendizaje se puede estimular con reforzamiento positivo, esto es, cumplidos y premios cuando obedezcan correctamente las órdenes.
Las actividades de entrenamiento deben ser constantes, diarias y creativas para mantener al pastor lapón siempre estimulado y activo, dispuesto para el aprendizaje. Cuando vaya a desempeñar trabajos de pastoreo en el campo, desde temprana edad es apropiado mezclarlo con los rebaños y animales para que se familiarice con su cuidado y desarrolle las habilidades para este trabajo que de por sí son innatas en esta raza.
El pastor lapón puede entrenarse con juguetes. En las tiendas de mascotas puedes encontrar diversos modelos de juguetes para perros, los hay desde los sencillos y tradicionales hasta los complejos e interactivos, a los fines de mejorar habilidades como memoria, rastreo e inteligencia.
Las pruebas de destreza y agilidad son otro de los fuertes de esa raza. Se comienza con ejercicios en el parque o en el jardín superando obstáculos, saltando cajas, o pasando a través de túneles, posteriormente se incorporan elementos más complejos.
Si deseas entrenar a tu perro pastor Lapón para competiciones deportivas lo ideal es que luego de este entrenamiento básico, el pastor lapón reciba la atención y adiestramiento final por parte de un entrenador canino experimentado, con esto seguro ser aun perro campeón.
Comportamiento con los Humanos
El pastor lapón es un perro que antiguamente estaba acostumbrado a vivir en un estado semisalvaje y que comenzó a ser incorporado en las relaciones humanas cuando las tribus nómadas de Sami se asentaron en regiones cercanas a su hábitat. Desde este momento fue relativamente sencillo educar al pastor lapón para que conviviese con los humanos, siendo su compañero, su ayudante en los trabajos de pastoreo y su guardián siempre alerta.
El perro pastor lapón es un canino con un comportamiento equilibrado y sereno la mayoría del tiempo.
Con los humanos suele ser bastante dócil, amigable, afectuoso y cariñoso. Su personalidad se caracteriza por desbordar energía y ganas de trabajar y realizar actividades. Sin embargo, el temperamento individual de los pastores de lapón varía un poco en relación a su crianza y educación desde cachorro.
La norma es que un pastor lapón adoptado desde cachorro por una familia amistosa, cariñosa, que haya dedicado la atención necesaria para la educación y adiestramiento del canino, tendrá como características de personalidad el ser un perro obediente, educado, sereno, amigable y cariñoso con las personas cercanas a él o al círculo de su familia.
Un aspecto muy notorio de esta personalidad del pastor lapón es que es un perro ladrador; utiliza la herramienta de su ladrido para desempeñar al máximo su tarea de perro guardián, con su sonido alerta al dueño de algo inusual, así como también puede usarlo para avisar su llegada. Con las personas extrañas, ajenas al hogar o distintas a sus conocidos las recibe con un ladrido, es un perro desconfiado y distante con los desconocidos aunque no es agresivo a menos que se sienta en peligro o amenazado.
El pastor lapón es una gran mascota para criar y educar, sobre todo para aquellas familias que viven en zonas menos urbanizadas con más campo y terrenos al aire libre, donde el pastor lapón será una excelente compañía en aquellas labores.
Es un perro amable, cariñoso, sociable y siempre en estado de alerta, con un fuerte sentido protector y de guardián. Con los niños pequeños es paciente y cariñoso, disfruta de sus juegos y travesuras, sin embargo no es prudente dejarlos solos jugando, sobre todo si se trata de niños muy pequeños.
El pastor lapón es un perro esencialmente de trabajo. Las cualidades que resaltan en su comportamiento tales como obediencia, trato amigable, serenidad, energía y entusiasmo, favorecen el entrenamiento de este can.
Desde los inicios de esta raza, el pastor lapón fue entrenado como un ayudante de pastoreo para los renos, a quienes con su ladrido alertaba de su presencia y además espantaba a los intrusos.
Con los años se fue convirtiendo en perro protector y guardián de las tribus nómadas que lo habían entrenado, además de ya ser el protector de los renos. Las increíbles cualidades que posee el pastor lapón han hecho que incursione en distintas competiciones y disciplinas deportivas, tales como pruebas de agilidad, de resistencia, de búsqueda de objetos y personas, también de flyball. Recientemente se ha venido desarrollando un programa de entrenamiento para perros guía de personas invidentes o discapacitadas que adiestra pastores de Lapón.
Entorno ideal del Pastor Lapón
El pastor lapón es una raza de perros que se originó en las regiones templadas de Laponia al norte del continente europeo, sus variedades proceden de Suecia y de Finlandia, países con cuatro estaciones.
Vivió inicialmente como un perro rural en aquellas zonas, domesticado e incorporado a las tribus de los Sami para ser perro guardián, compañía y pastor de los renos, por tanto, el perro pastor lapón es un canino adaptado a los extremos entornos de las frías temperaturas de invierno.
Con el desarrollo y la implementación de programas de crianza sobre esta raza, el pastor lapón ha llegado a muchos países europeos, y fuera de su continente particularmente a Norteamérica, así como a otras regiones del planeta diversas.
Gracias a las características físicas naturales que desarrollaron en ellos el proceso de selección natural, el pastor Lapón es un perro muy bien adaptado para el frío. Posee una doble capa de pelaje denso, la cual funciona como un abrigo que le ofrece protección ante las bajas temperaturas heladas. Aunque por el contrario, no toleran también los climas calurosos y tropicales.
En los cálidos días del verano es recomendable un cepillado regular del pelaje, pues esto va a hacer que la circulación cutánea se estimule, y además porque en estos días los pastores lapón mudan más pelo de lo común. Con el cepillado se remueven los pelos caídos y mejora la regulación térmica por medio de la piel.
Así mismo se recomienda mantenerlos en lugares bien ventilados, y proporcionarles suficiente agua limpia y fresca ya que podrían deshidratarse por las perdidas insensibles en los calores extremos.
El entorno de estimulación física del pastor lapón debe estar enfocado a cubrir las necesidades de entrenamiento, energía y actividad que tiene esta raza. El pastor lapón requiere como mínimo de una hora de ejercicio activo diariamente, y si es posible más tiempo.
Durante su entrenamiento podrás constatar que es un perro activo, obediente, que aprende rápido gracias a su gran inteligencia. La estimulación emocional a través de los juegos es fundamental y necesaria para un buen comportamiento del pastor lapón.
Los ejemplares de esta raza son caninos cariñosos, protectores, apegados, con espíritu de trabajo, disfrutan del tiempo compartido con su familia, tanto en labores como en actividades recreativas, como los paseos.
El hogar ideal para el pastor lapón no tiene exigencias definitivas establecidas. Como todo perro de raza grande necesita el espacio suficiente para crecer, caminar y jugar, de modo que es preferible que sea adoptado por familias que viven en casa. Más aún, si la casa tiene ambientes exteriores amplios, tales como jardines o patios, el pastor lapón será feliz corriendo y jugando en ellos.
De todas maneras es necesario un paseo rutinario en un terreno abierto al menos una vez por día. También pueden adaptarse a la vida en apartamentos, pero en el caso de un entorno pequeño se deben agregar más paseos durante el día y horas de ejercicio.