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Tesem

perro extinto tesem

El tesem era una de las razas de perro que vivieron en el antiguo Egipto, un fino canino, de cuerpo estilizado e impresionantes habilidades de caza que data de varios milenios antes de Cristo y cuya existencia puede comprobarse por medio de grabados egipcios en las tumbas de los faraones. Algunos dicen que el tesem se mantuvo por cierto tiempo y que las mezclas con otras razas de perros domésticos lo hicieron evolucionar de tal manera que puede ser el antepasado del galgo.

Un poco de histori

Las pruebas más antiguas de la existencia de la raza tesem se remontan al Antiguo Egipto, aproximadamente unos 3000 años antes de Cristo. Una expedición del 13 del de octubre de 1935 liderada por el egiptólogo George A. Reisner, encontró en la tumba del emperador Keops (2.589 – 2.566 a.C.) inscripciones con la figura de unos perros de caza que corresponden a la descripción del tesem.

Esta raza existió hace mucho tiempo, según parece eran perros de la realeza egipcia, utilizados como guardianes de posesiones del faraón y también en actividades de caza.

La expedición anteriormente mencionada encontró una lápida en el Cementerio G2100 en la parte occidente de la Pirámide de Jufu/Keops  con una inscripción que hace suponer que uno de estos perros de la raza tesem fue enterrado en dicho lugar. El año corresponde al 2.280 cuando se encontraba al mando la dinastía VI y es interesante observar la visión de los egipcios tenían de los perros y como acostumbraban a representarlos.

El texto en la lápida parece hacer referencia a las ofrendas del faraón a un perro de nombre “Abuwtiyuw”, de la familia real, dicho nombre no tiene traducción y los estudios presumen que es el sonido que hacía el perro al ladrar o aullar.

Para los egipcios, los perros eran seres de alto respeto, también llevados después de la muerte al proceso de momificación y eran enterrados en las tumbas de la familia. Esta, y otras civilizaciones del cercano oriente, veían a los perros como seres espirituales, que tenían relación con deidades o dioses y ejercían influencias importantes entre las conexiones de los dos mundos.

Las evidencias muestran que los egipcios sometían a sus perros a un proceso de momificación parecido al de los faraones, y luego los colocaban en una estatua de madera de Anubis, un dios que tiene cabeza de chacal y que es el que controla la vida luego de la muerte. De modo que el tesem era un perro de gran estima en el imperio del antiguo Egipto.

Algunas características

No se han encontrado imágenes exactas del perro tesem ni tampoco restos confiables de esta raza, la información que se tiene es de algunas representaciones egipcias en gravados.

El tesem se trataba de un perro de porte mediano a alto, con un cuerpo fino y estilizado, muchas líneas rectas predominan en su figura y contorno. Su cráneo es pequeño, estilizado, con hocico fino y puntiagudo, presenta un par de orejas triangulares, erguidas y puntiagudas.

Su cuerpo era delgado, fuerte pero estilizado, similar al de los galgos modernos; la cola era corta y enrollada en sí misma dándole un aspecto de rizada. Sus patas son largas, final y ágiles.

En algunas descripciones se identifica el nombre de “Abutiu” para los tesem egipcios, que quiere decir “de orejas puntiagudas” haciendo referencia a esta característica física.

Aparentemente, el carácter del perro tesem permitía que fuese una buena compañía como mascota.

Función

Por las pruebas encontradas sobre la existencia y la forma de vida de estos perros, se presume que los tesem fueran cazadores en el antiguo Egipto, en varias pinturas se les representa en actividades de caza, así también, eran perros muy solicitados por los faraones, pues se les atribuían cualidades espirituales altas. Eran criados también como perros guardianes del faraón y sus tesoros, especialmente en época de la dinastía VI.